Capítulo I. Violencia de género y conceptos afines
| Autor | Djamil Tony Kahale Carrillo |
| Páginas | 35-44 |
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La familia constituye una institución social con gran importancia y trascendencia en la vida comunitaria a través de la cual el individuo desarrolla algunos de los aspectos más importantes de su existencia. Asímismo, se define como el conjunto de personas entre las que median relaciones de parentesco, ya sean de consaguinidad, afinidad o adopción a las que la ley atribuye algún efecto jurídico16. El fenómeno de la agresión continuada y habitual no responde únicamente a las relaciones entre parientes -derivadas del reconocimiento legal-, también han de tenerse en cuenta todos los vínculos afectivos que derivan de la unión de hecho de dos personas y que justifican una convivencia continuada17.
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En consecuencia, la violencia aparece en las uniones estables de hecho entre una mujer y un hombre e, incluso, en las relaciones de carácter homosexual. La violencia no es un fenómeno individual aislado, es el fruto de la relación de dos o más personas; por ello la violencia debe analizarse en un contexto relacional y no, exclusivamente, desde la óptica del sujeto agresor. Todas las personas implicadas en esta interacción son responsables de alguna forma, cualquier individuo puede llegar a ser violento, con diferentes manifestaciones o modalidades, y puede darse en todas las clases sociales y en todas las edades. Aunque los malos tratos en familias de niveles sociales y económicos más elevados no suelen denunciarlos18. El término de violencia según la Real Academia de la Lengua Española (RAE) es la acción violenta o contra el natural modo de proceder19.
Desde la década de los setenta se viene utilizando por las Ciencias Sociales el concepto de género, como la construcción simbólica que apunta al conjunto de atributos socioculturales establecidos a las personas a partir del sexo, y que convierte la diferencia sexual en desigualdad social. Lo más relevante de este concepto es la diferenciación que establece entre mujeres y hombres, y de la cual la palabra sexo y género no son sinónimas. Dicho en otros términos, pretende distinguir las diferencias entre mujeres y hombres que responden a la naturaleza de aquellas otras que son establecidas por la sociedad y que no son, por ende, inamovibles e
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irremediables20. De la cual sexo alude al conjunto de caracteres genéticos y a las diferencias biológicas entre mujeres y hombres; mientras que gé-nero apunta a las diferencias fundadas social y culturalmente para mujeres y hombres, a la manera de relacionarse y dividir sus funciones21.
En este sentido, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados señala que con el fin de comprender la naturaleza de la persecución por motivos de género, es de gran importancia diferenciar los términos género y sexo. En el que género se refiere a la relación entre hombres y mujeres basada en la identidad, las condiciones, las funciones y las responsabilidades según han sido construidas y definidas por la sociedad y la cultura, asignadas a uno y otro sexo. Mientras que el sexo está determinado por las condiciones biológicas22.
Para referirse a la violencia que ejercen ciertos hombres sobre las mujeres se han utilizado diferentes expresiones, entre ellas, violencia doméstica, violencia machista, violencia de sexo, violencia familiar y violencia de género. La terminología de la violencia doméstica ha sido la más usada en estos últimos años, y es la que se refiere a la violencia ejercida por el varón sobre la mujer en un lugar físico como el hogar común. Lo relevante de esta expresión es el espacio físico y en
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el cual suelen someterse las agresiones, que en este caso es el hogar, y puede ser utilizada para referirse a las agresiones que se le hagan a la mujer, así como a otras personas que convivan bajo el mismo techo.
La violencia familiar se refiere a la violencia ejercida sobre personas que tienen entre sí relaciones de parentesco, ya sea por consanguinidad, afinidad o adopción; mientras que la violencia de género es la violencia que se ejerce contra las mujeres tanto física como psicológica por razón de su sexo, como resultado de su situación tradicional de sometimiento al hombre en las sociedades de estructura patriarcal. Hoy por hoy la expresión de violencia de género se utiliza para referirse a la violencia que se ejerce por parte del sexo masculino hacia el femenino, y de la cual se incluyen las diferencias de trato social y cultural, que se escapan de las simples diferencias biológicas que podrían comprender la expresión violencia de sexo23.
El término de violencia doméstica es el que se ha venido comúnmente utilizando, tanto a nivel nacional como a nivel internacional, para referirse a la violencia que las mujeres sufren por parte de sus parejas en el interior de sus hogares. La locución violencia de género incluye, en cambio, cualquier tipo de violencia contra la mujer, independientemente de si ésta se produce por un compañero o un extraño o desconocido, o en el ámbito de la familia, de la comunidad o del Estado. En este sentido, el artículo 2 de la Declaración...
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