Azaña jurista, de Antonio Pau Pedrón.

AutorManuel Lavado Mouna
CargoRegistrador de la Propiedad de Huelva
Páginas1523-1525

    Pau Pedrón, Antonio: Azaña, jurista, Ministerio de Justicia, 1990.

Quién fuera Azaña es por todos sabido; menos lo es que fue Letrado de la Dirección General de los Registros y del Notariado, el prestigioso Cuerpo de Administración nutrido de superespecialistas en Derecho privado.

En un bello volumen, presentado por el anterior Ministro de Justicia Enrique Múgica, "cuando se cumplen los cincuenta años de la muerte de don Manuel", se agrupan un ensayo de Pau y tres textos jurídicos de Azaña: su tesis doctoral sobre la responsabilidad de las multitudes, una conferencia sobre la libertad de asociación, y el ejercicio de la oposición acerca del estado civil. Cierra el libro un índice cronológico del expediente personal del Azaña funcionario.

Antonio Pau, nacido en 1953, brillante miembro del mismo selecto Cuerpo, agudo y documentado publicista de temas jurídicos, es hoy el jovencísimo Director General de los Registros. En el amplio estudio, que da título al libro, Pau intenta una aproximación a la figura desconocida del jurista Manuel Azaña.Page 1523

He aquí las ideas básicas y las líneas maestras de este trabajo, "punto de partida para investigaciones más detenidas y exhaustivas". Según Pau, en opiniones discutidísimas, "la obsesión de Azaña por la justicia destruye su contrafigura de hombre sectario", y "la juridicidad de la Segunda República española es, en buena medida, fruto de su condición de jurista". Azaña nació en Alcalá de Henares en 1880, estudió la carrera de Derecho con los agustinos en la Universidad de El Escorial, y se doctoró en 1900 con una mediocre tesis sobre la responsabilidad de las multitudes. Tras un brevísimo episodio como pasante del bufete de Díaz Cobeña, entonces el más famoso abogado de Madrid, y en el que conoce a Alcalá-Zamora, es admitido, cuando sólo contaba diecinueve años, como miembro de la Academia de Jurisprudencia y Legislación, donde pronuncia en 1902 su famosa conferencia sobre la libertad de asociación. Entre 1903 y 1909 discurre un período de silencio en la vida de Azaña. Siguiendo la tradición jurídica de la familia, en ese año de 1909 decide opositar al cuerpo de Letrados de la Dirección de los Registros, el mismo órgano de la Administración al que, como notarios, habían pertenecido su abuelo y su bisabuelo. Obtuvo la segunda de las dos plazas convocadas -su ejercicio escrito sobre el estado civil, que ahora se publica por vez primera, es, sin duda, un trabajo meritorio y aceptable-...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR