Crédito agrario. Compilación legislativa.
| Autor | Francisco Corral Dueñas |
| Páginas | 498-500 |
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BANCO DE CRÉDITO AGRÍCOLA: Crédito agrario. Compilación legislativa. Editado por el Ministerio de Economía. Madrid, abril de 1980. Un tomo de 381 págs.
Con decir que el crédito agrario es el destinado a la agricultura, aparte de parecer una soberana perogrullada, no habríamos expresado casi nada de lo que realmente le caracteriza.
En efecto, su naturaleza y elementos son tan especiales que hacen rechazar de plano la idea de que se trata tan sólo de un crédito más, normal y corriente, pero aplicado a finalidades de la esfera rural. A fuerza de repetirse puede sonar a monserga, pero es cierto que el mundo del campo es desde luego especial, distinto, diferente; merece ayuda, mucha ayuda; pero, sobre todo, necesita ser conocido, pues al conocerlo se le toma afecto con toda seguridad. El hombre del campo es de tal calidad humana que capta inmediatamente a quienes de verdad comprenden sus necesidades.
Precisamente una de las más imperiosas necesidades del campo es recomponer su cada vez mayor descapitalización y apuntalar su anémica economía. Sería suicida para la sociedad abandonar a su suerte al sector agrario en los avatares de su Jucha con otros sectores, que llevan la mejor parte en una economía de mercado libre.
La idiosincrasia de los agricultores antiguos, sobre todo de Jos modestos, que son los más numerosos, acostumbrados a una economía de subsistencia por su modo parquísimo de vivir, ha hecho que el crédito científico no pudiera profundizar ni se haya extendido demasiado en su ámbito. En cambio, aunque cada vez menos, aún quedan, por desgracia, en comarcas deprimidas, algunos casos de usura de tipo local que se concreta en ventas simuladas, pactos de retro, compras de esperanza y préstamos con altísimo interés encubierto bajo Jetras de cambio.
En cambio, para el agricultor moderno y emprendedor ya no es degradante ni vergonzoso pedir préstamos, porque se ha alejado la idea de que el crédito sólo sirve para tapar agujeros producidos por falta de una buena administración. Las actuales empresas agrarias, tanto individuales como colectivas, tienen una economía abiertamente ordenada a la competitividad y al mercado, tratando de obtener los máximos beneficios que ahora sean dables dentro de esta situación de crisis casi general. Por ello el crédito es una institución cada vez más vivida que se utiliza para obtener mejoras estructurales productivas, maquinaria, semillas, fertilizantes y, en general, todos los elementos precisos para la puesta en marcha o modernización de las explotaciones con vista a unos mayores rendimientos. Se...
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