El valor del linaje
| Autor | Dámaso de Lario |
| Páginas | 160-189 |
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EL VALOR DEL LINAJE
Muy buen estudiante, hombre de juicio y toda virtud.
Así describía un documento de mediados del siglo XVI al burgalés Alon-
so Núñez Cachupín, colegial de San Bartolomé, quien, a pesar de sus cuali-
dades y de su doctorado en Teología, no pasó de ser cura en la diócesis de
Toledo. La vida no le alcanzó para tomar posesión del obispado de Popayán
(Perú), para el que había sido elegido1. Otros colegiales, sin embargo, como
Juan de Córdoba y Centurión, que no había “[h]echo acto de letras en la
Universidad, pero la capacidad y cordura la tiene con estimacion”, o como
Gabriel de Chaves y Sotomayor, “de pocas letras y la capacidad corta”2, ha-
rían carreras de mayor vuelo. Córdoba era hijo natural del marqués de Es-
tepa y, tras pasar diez años como colegial del Arzobispo, inició su carrera en
la Real Chancillería de Valladolid y la culminó como consejero de Indias3.
Gabriel de Chaves, colegial de Oviedo, pertenecía a las primeras familias de
Trujillo, su hermano Gregorio Antonio era colegial de Cuenca y un primo
1 BUSA, Ms. 1925, f. 167r. “Memoria de los collegiales actuales que [h]oy se hallan
en Salamanca, menos Doctores de la Vniversidad, con las Catedras y antigüedades de cada
uno” [años 1640].
Alonso Núñez Cachupín ya era cura de Alcorcón (Toledo), cuando fue elegido cole-
gial el 4.8.1639. Fue rector de San Bartolomé en 1643 y catedrático de Artes en la Univer-
sidad de Salamanca entre 1644 y 1646. Dejó el colegio en 1645 tras obtener el benecio
curado de El Casar (Toledo); en 1648 pasó a ser cura de Orche. Falleció en 1658. AUSA,
lib. 2245, ff. 271 y ss.; Ruiz de Vergara, p. 580, Carabias Torres y otras, p. 208, y Espe-
rabé, pp. 452 y 454.
2 BUSA, Ms. 1925, f. 170 r.
3 Había ingresado en 1637 en una beca de Cánones en el Colegio del Arzobispo, donde
que fue rector en 1638-1639 y 1641-1642. Salió 10 años después, con el título de licenciado
solamente, para tomar posesión como alcalde de hijosdalgo de la Chancillería de Vallado-
lid (nombramiento el 4.10.1647). Fue después oidor de la Audiencia de Sevilla (11.2.1649),
oidor de Valladolid (29.5.1651), auditor general del Ejército en Flandes (21.6.1658) y nal-
mente consejero de Indias (17.6.1661). Falleció en Madrid el 21 de febrero de 1665. AHN,
CS, leg. 7138; Ferrer-Misol, p. 73; Schäfer, I, p. 362, Martín Postigo-Domínguez Rodrí-
guez, p. 75; y Domínguez Rodríguez (a), p. 95. También Javier Barrientos Grandón, “Juan
de Córdova Centurión y Castro” en DB~e.
ESCUELAS DE IMPERIO
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hermano suyo del Arzobispo; terminó su carrera como oidor del Consejo
Real4.
Porque, para obtener una beca de colegial, especialmente si se trataba de
un colegio mayor, no bastaba con que los candidatos se mantuvieran den-
tro de los niveles de pobreza tolerados. Como señalan los primeros estatutos
que nos han llegado del San Clemente, los candidatos debían ser “discretos
y fáciles de educar, y aptos para el estudio, y que demuestren que sus vidas
y costumbres son dignas de elogio”5. Pero, sobre todo, era muy conveniente
que sus linajes y sus apoyos fueran los adecuados. En el Colegio de Cuenca
lo dejaron incluso normado: “dada paridad entre los opositores, se elija el de
mejor linaje”6.
Esos candidatos, de los que muchos iban a convertirse en colegiales des-
pués, debían ser jóvenes, laicos célibes o clérigos, pero en ningún caso frai-
les; debían poseer también un determinado nivel de estudios –la ambición
se daba por supuesta– y proceder del ámbito de la “geografía sentimental”
de los fundadores de las instituciones7. Hasta nales del Cuatrocientos la
4 Gabriel de Chaves y Sotomayor –que aparece también como Chaves y Mendoza–
era hijo del corregidor de Plasencia Cristóbal de Chaves y Mendoza, e ingresó en el colegio
de Oviedo el 14.6.1633. Fue catedrático de Instituta (5.12.1645), desempeñó la cátedra cur-
satoria de Código (1646) y fue catedrático de Vísperas de Leyes (26.4.1648) en Salamanca.
Inició su carrera burocrática como oidor de la Audiencia de Sevilla (20.7.1648), pasando
luego a ser oidor supernumerario de la Chancillería de Valladolid (8.5.1653), scal (1659)
y consejero del Consejo de Órdenes, y consejero del Consejo Real de Castilla (3.5.1664). En
1659 fue nombrado caballero de la Orden de Santiago. BSC, Ms. 174, f. 64 r. y Caja 40, f.
16; BNE, Ms. 949, f. 128 v.; Ms. 1369, f. 127 v. y Ms. 10878, f. 16; Fernández Catón, p. 304;
Esperabé, pp. 441, 444 y 445; Fayard, pp. 47, 320 y 556; y Domínguez Rodríguez (a) p. 148.
Su hermano Gregorio Antonio era colegial de Cuenca desde 1628 y su primo hermano
Melchor de Chaves y Mendoza ingresó en el colegio del Arzobispo en 1633, el mismo año
que Gabriel de Chaves lo hiciera en el de Oviedo. RAH, leg.9/1017, f. 167 v. y Ferrer-Misol,
p. 70. Entre 1632 y 1637 el clan extremeño de los Chaves colocó a seis de sus miembros
entre los colegios mayores de Cuenca (4), Arzobispo (1) y Oviedo (1).
5 qui sint discreti et dociles, et ad studia bene apti et uita et moribus commendabi-
les demonstrentur, cfr. BO 1375-1377 st. 4 y 1488 st. II.3.
6 “porque Aristóteles ex bestiis bestiam, et ex bonis bonum putat generari”, cfr.
“… capítulos de cartas del… fundador de esta santa casa, por los cuales se declaran dudas
que pueden ocurrir, que por constituciones no están declaradas”, st. 4, en Sala Balust, III,
p. 234.
7 Vid. Kagan (a), pp. 112-124 para diócesis de procedencia de los escolares de los
colegios mayores castellanos. Carabias Torres (a), II, pp. 525 y ss. para los salmantinos, y
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