De la tragedia de saida al drama del heliópolis. El «problema migratorio» en España (1881-1907)
| Autor | María José Fernández Vicente |
| Páginas | 247-271 |
Cualquier estudio relativo a la emigración masiva española iniciada en la
década de 1880 ha de tener en cuenta que esta corriente migratoria no fue
un hecho aislado, sino que se insertó en el marco mucho más amplio de las
grandes migraciones que, desde los continentes europeo y asiático, se dirigie-
ron a los vastos y despoblados territorios americanos. Iniciadas en la década
de 1840, estas grandes migraciones fueron consecuencia directa de las grandes
transformaciones demográficas y socioeconómicas que tuvieron lugar en am-
bos espacios geográficos 1. Del mismo modo, se vieron favorecidas por el im-
portante desarrollo de la movilidad que se produjo como resultado de la
mecanización de los desplazamientos humanos. El desarrollo de las redes
ferroviarias y la generalización de la propulsión a vapor en la navegación
permitieron la realización de viajes de más larga distancia de manera más
rápida, segura y menos costosa, lo cual acabó facilitando e incluso favorecien-
do la movilidad 2. Alrededor de 55 millones de europeos abandonaron el
Viejo continente por el Nuevo entre 1821 y 1924, de los cuales 33 millones lo
hicieron con rumbo a los Estados Unidos 3.
Pero si este movimiento migratorio alcanzó tan elevadas proporciones, fue
también en gran parte debido a que los Estados europeos eliminaron la pro-
hibición que pesaba sobre las salidas, sustituyendo en la práctica estas inter-
dicciones por una especie de «negligencia benigna» 4. En España, la prohibición
de emigrar se mantuvo en vigor hasta mediados del siglo XIX, apuntalada por
1 RUEDA HERNANZ, Germán, Españoles emigrantes en América (siglos XVI-XX), Madrid,
Arco/Libros, 2000, p. 21.
2 RYGIEL, Philippe, Le Temps des migrations blanches. Migrer en occident, du milieu du XIXe
siècle au milieu du XXe siècle, Paris, Publibook, 2010, p. 43.
3 THISTLETHWAITE, Franck, «Migration from Europe Overseas in the Nineteenth and
Twentieth Centuries», VECOLI, Rudolph J., SINKE, Suzanne M., (eds.), A century of European
Migrations, 1830-1930, University of Illinois Press, 1991, p. 20.
4 ZOLBERG, Aristide R., «La Révolution des départs», GREEN, Nancy, WEIL, François
(coords.), Citoyenneté et émigration. Les politiques de départ, Paris, EHESS, 2006, p. 38.
De la tragedia de Saida al drama del Heliópolis.
El «problema migratorio» en España (1881-1907)
María José Fernández Vicente
Université de Bretagne Occidentale-HCTI
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una esfera política que consideraba que la emigración hacia las colonias era
responsable del despoblamiento y la decadencia que venía acusando España
desde el siglo XVII 5. Una disposición legal de septiembre de 1853 permitió
por primera vez la emigración hacia las colonias americanas así como hacia
México y las Repúblicas sudamericanas 6. En una época marcada por la cons-
trucción en España de un modelo de Estado liberal, esta orden supuso el
inicio de un proceso de liberalización creciente de los movimientos de pobla-
ción 7.
Aunque también contó con otro destino importante —el de la Argelia
francesa— la mayor parte de la emigración española marchó hacia las colonias
y antiguas posesiones coloniales de América. Durante los tres siglos de colo-
nización, alrededor de un millón de españoles se instalaron en los territorios
americanos; volumen a todas luces modesto si se lo compara con el aluvión
de la etapa de la «emigración masiva», en virtud del cual más de cuatro millo-
nes de españoles emigraron a estos mismos territorios, ahora independientes,
en las cinco décadas que duró esta etapa (1880-1930) 8. Si tenemos en cuenta
el conjunto de los destinos de la corriente migratoria española, y no solamen-
te el continente americano, las cifras se elevarían a 5,5 millones para la etapa
de 1860 a 1936, de los cuales alrededor de 900 000 marcharon a Argelia 9.
A pesar del aumento progresivo de las salidas a partir de mediados del
XIX, la esfera política española mostró un escaso interés por la cuestión. Si
exceptuamos algunas medidas destinadas a limitar los abusos e irregularidades
vinculados al acto migratorio, ningún debate político ni ley abordó el fenó-
meno de la emigración en su conjunto. Hubo que esperar a que se produjese
la llamada «tragedia de Saida» para que por fin se insertase en la agenda po-
lítica la cuestión migratoria.
El objetivo de este trabajo es analizar el proceso de institucionalización
del llamado «problema migratorio» en la esfera política española, haciendo
5 RIEUCAU, Géraldine, «Émigrants et salariés. Deux catégories nouvelles en Italie et en
Espagne (1861-1975)», Dossier du Centre d’Études de l’Emploi, nº 12, La Documentation Française,
1997, p. 60.
6 PÉREZ-PRENDES, José M., El marco legal de la emigración española en el constitucionalismo
(un estudio histórico-jurídico), Colombres (Asturias), Júcar-Archivo de Indianos, 1993, p. 47.
7 PÉREZ-PRENDES, José M., El marco legal..., p. 38, RUEDA HERNANZ, Germán, Españo-
les emigrantes..., p. 40.
8 La importante emigración clandestina, la salida por puertos extranjeros, etc. dificultan
el cómputo exacto de las salidas reales efectuadas. Sobre la cuestión, véase NARANJO OROVIO,
Consuelo, «Análisis cuantitativo », VIVES, Pedro A., VEGA, Pepa, OYAMBURU, Jesús (coords.),
Historia general de la emigración española a América, Madrid, Historia 16, 1992, vol. 1, pp. 177-200,
SÁNCHEZ ALONSO, Blanca, Las causas de la emigración española, 1880-1930, Madrid, Alianza
editorial, 1995, pp. 94-133 y YÁÑEZ GALLARDO, César, La emigración española a América, siglos
XIX y XX. Dimensión y características cuantitativas, Colombres (Asturias), Júcar-Archivo de Indianos,
1994.
9 Las cifras para Argelia corresponden al periodo entre 1872 y 1930. Véase YÁÑEZ GA-
LLARDO, César, «La emigración española a la Argentina en la época de las grandes migraciones»,
ALTED, Alicia, ASENJO, Almudena (coords.), De la España que emigra a la España que acoge,
Madrid, Fundación Francisco Largo Caballero, 2006, p. 81.
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