Restauración borbónica y reinado de Alfonso XII. Regencia de María Cristina de Habsburgo y primer período del reinado de Alfonso XIII
| Autor | Noelia Corral Maraver |
| Páginas | 75-90 |
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El 1 de diciembre de 1874 Alfonso de Borbón, hijo de Isabel II, había proclamado a través del Manifiesto de Sandhurst su voluntad de convertirse en un monarca liberal y constitucional de España. El 29 de diciembre de ese mismo año se produce el golpe de estado del general Martínez Campos por el que se restablece a la dinastía de los Borbones en el trono de España en la persona de Alfonso XII125.
Gran influencia en estos acontecimientos tuvo Cánovas del Castillo, redactor del manifiesto, quien estaba tratando de llevar a cabo la restauración monárquica sin recurrir a pronunciamientos militares, cosa que no consiguió. Cánovas había sido miembro de la Unión Liberal durante el sexenio democrático y, más tarde, durante la I República, el líder de la oposición conservadora126. El régimen
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de la Restauración fue posible gracias al apoyo de la nobleza, la alta burguesía y también gran parte de las clases medias urbanas.
El sistema político diseñado por Cánovas se denominó turno dinástico y se basaba en la alternancia en el poder de los dos grandes partidos127, el partido conservador presidido por él mismo y el partido progresista de Sagasta. Dicho sistema estuvo caracterizado por el caciquismo, que aportaba estabilidad a base de restringir la participación ciudadana. Las clásicas relaciones de dominación, especialmente en el campo, garantizaban el control de los resultados electorales. Así, el cacique actuaba como mediador, proporcionando trabajo y otros beneficios a los ciudadanos que votaban la opción política que éste señalaba. En realidad las elecciones no hacían sino legitimar el triunfo del partido que ya había sido acordado de antemano. Dicho sistema político estaría en uso entre 1875 y 1890128.
Se promulgó en 1876 una nueva Constitución, la más longeva de la historia de España, vigente hasta 1932, aunque suspendida en 1923. Este texto establece la soberanía compartida entre el rey y las Cortes, que son bicamerales, limita los derechos y libertades y restablece la confesionalidad católica del Estado. Se establece un sufragio censitario.
En 1885 se produce la muerte de Alfonso XII. Su esposa, María Cristina de Habsburgo, estaba embarazada y daría a luz poco tiempo después a un varón, siendo la regente del reino hasta su mayoría de edad. Para evitar una crisis sucesoria y la inestabilidad política, los líderes de los dos partidos dinásticos firmaron el Pacto del Pardo, por el que se acordó continuar con el turno de partidos129.
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Otros acontecimientos que marcaron este periodo histórico fueron las guerras de Cuba130. En 1895 estalló la última guerra de Cuba y en 1896 estalló una sublevación en Filipinas. Estados Unidos, con un enorme interés económico en los territorios españoles, declaró la guerra a España. El 10 de diciembre de 1898, ante la derrota española en esta contienda y con la firma del Tratado de París, España perdía definitivamente sus últimas colonias americanas131. Esto afectó profundamente a la opinión pública al transmitir una imagen de decadencia del país. Muchos discursos de diferente signo ideológico propugnaban la necesidad de cambios en la estructura social y política. Algunas de estas doctrinas se denominaron regeneracionismo y defendían, entre otras ideas, eliminar el caciquismo, favorecer la formación de la clase media a través de la instrucción pública y el impulso de la actividad agraria132.
El restablecimiento del sufragio universal masculino se produjo en 1890 durante el gobierno de Sagasta. En las siguientes elecciones de 1891 y 1893 las coaliciones republicanas consiguieron representación parlamentaria y un notable éxito en las principales ciudades donde las redes caciquiles eran más débiles133.
En esta época se produce el auge del movimiento obrero en nuestro país: surge el socialismo (el PSOE se funda en 1879 y la UGT en 1888), se produce la consolidación del anarquismo134, que fue desde el principio duramente reprimido. Los partidos de corte anarquista se negaban a entrar en los cauces políticos y adoptaron la estrategia de la acción directa, incluso a través de atentados violentos. Como veremos, para su represión se aprobarán leyes penales especiales. Surgen también en este periodo los modernos partidos republicanos, como el Partido Radical de Alejandro Lerroux, fundado en 1908.
La organización estatal de la Restauración tenía un marcado carácter centralista, lo cual contribuyó también a la extensión y desarrollo de los nacionalismos periféricos.
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La situación política española a principios del siglo XX era desastrosa. Cánovas había muerto asesinado por un anarquista en agosto de 1897 y Sagasta muere en 1903. Tras la desaparición de ambos líderes, los dos grandes partidos comenzaron a desmembrarse. Se rompe el turno pacifico, pues el caciquismo seguía existiendo pero ya no era tan efectivo135. Por ello se hizo necesaria una renovación en el seno de los dos grandes partidos. En el partido conservador el liderazgo recayó en Silvela, regeneracionista, y tras la dimisión de éste en 1902136, en Maura, mientras que tal puesto lo ocupó en el partido liberal Canalejas137.
Alfonso XIII fue declarado por las Cortes mayor de edad a los 16 años el día 17 de mayo de 1902, poniendo fin a la regencia de su madre.
En aquella época tiene lugar la expansión colonial en África, aspirando España y Francia a ejercer su control sobre Marruecos. A través de las campañas en el norte de África se mantiene ocupado al Ejército. En 1909, tras una derrota en Marruecos –batalla de Barranco del Lobo– la decisión de Maura de movilizar a los reser-vistas para preparar un contraataque produjo numerosas protestas, especialmente en la ciudad de Barcelona (hechos conocidos como la Semana Trágica), que adquirieron tintes revolucionarios138. La dura represión provocó la dimisión de Maura139, quien fue sustituido por el liberal Canalejas.
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Bajo el mando de Canalejas se iniciaron en la Conferencia de Algeciras negociaciones con Francia para repartir Marruecos, lo que desembocaría tiempo después en la creación del Protectorado español en Marruecos. El 12 de noviembre de 1912 Canalejas moría asesinado en un atentado anarquista y esto provocaba la división de su partido140.
En 1914 estalla en Europa la Primera Guerra Mundial, permaneciendo España neutral ante la contienda. Los años siguientes fueron de una gran conflictividad, sucediéndose varios gobiernos de diverso signo, todos incapaces de hacer frente a la inestabilidad. Esta situación desembocó en una crisis en 1917, año en el que se produjeron muchas revueltas. Primero, el Ejército formó juntas de defensa, reivindicando una subida salarial y el fin de los ascensos por méritos de guerra. Además, ya en diciembre de 1916, los grupos de izquierda habían iniciando una huelga revolucionaria, inspirada por los acontecimientos del mismo carácter que estaban teniendo lugar en Rusia. El objetivo era provocar la abdicación de Alfonso XIII141. Si bien los huelguistas llegaron a un acuerdo con el Conde de Romanones (liberal), meses después, con Dato (conservador) en el poder, el gobierno se negó a reconocer dicho acuerdo y reprimió duramente la huelga. A pesar de ello, las manifestaciones revolucionarias se sucedieron durante los dos años siguientes, conociéndose este convulso periodo como Trienio Bolchevique.
Tras la Gran Guerra, Francia quiso consolidar sus posiciones en el norte de África y España no quiso ser menos. De ahí que se emprendieran nuevas campañas bélicas y se conquistaran nuevos territorios. Esta guerra contó con el apoyo de algunas élites y del monarca, pero no tuvo ningún respaldo social. El día 22 de julio de 1921 se produjo una gran derrota española en Marruecos, conocida como el Desastre de Annual, en el que fallecieron más de 14.000 soldados españoles. Se formó entonces una gran oposición a la presencia española en Marruecos y la prensa empezó a destapar ciertos intereses económicos detrás de dicha contienda, señalando una trama de corrupción que implicaba a muchos militares y que parecía alcanzar al propio rey Alfonso XIII142.
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En medio de esta crisis del sistema de la Restauración, el 13 de septiembre de 1923 el general Primo de Rivera llevó a cabo un pronunciamiento militar143que terminó con el muy debilitado sistema parlamentario vigente durante casi 50 años. Se suspendió la Constitución de 1876 y se prohibieron los partidos políticos, otorgándose el gobierno a un directorio militar.
Durante todo este periodo histórico siguió vigente el código penal reformado de 1870. Según Cobo del Rosal, a pesar de estar dictado en una época progresista, su carácter represor y su poco respeto hacia los derechos individuales provoca que no sea sustituido durante la Restauración144. Pero lo cierto es que en estos años hubo numerosos proyectos y anteproyectos para crear un nuevo código penal adaptado a los dictados de la nueva Constitución de 1876145.
De la existencia de tal cantidad de proyectos se desprende el gran interés por adaptar la legislación...
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