Analítica digital para Administraciones Públicas
| Autor | Sergio Jiménez |
| Cargo del Autor | Consultor especialista en ayudar a las AA. PP. a avanzar en su propia transformación digital |
| Páginas | 134-165 |
Innap Innova134
Ya tenemos una idea aproximada de cómo y qué se
puede medir en un espacio digital y cómo ponerlo en
marcha. Esto es solo el primer paso (y el más mecáni-
co) del trabajo del análisis digital. La verdadera analítica digi-
tal no es tanto lo que hemos visto hasta ahora, como lo que
viene a partir de este momento: saber qué mirar y quién
tiene que observarlo para entender la realidad. Es el momen-
to de aclarar quién debe saber qué para tomar las decisiones
que le corresponden. Para ello, vamos a explicar la diferencia
entre análisis y monitorización, cómo se crean los planes de
medición y qué necesidades de información tienen los dife-
rentes perfiles de la organización.
4.
Los planes de medición
4.1.
¿Analizas o monitorizas?
Lo primero que tenemos que considerar es que no todo lo
que se refiere a la medición de datos para comprobar el fun-
cionamiento de un espacio digital es análisis. Podemos hablar
de dos caras de esta metodología: el monitoreo y el análisis.
Monitorear consiste en buscar el comportamiento conti-
nuo de las cosas respecto a alguna cosa. Se trata de obtener
datos que sean fácilmente capturables y organizables para
poder comparar elementos. Esta comparación se puede hacer
con el mismo elemento a lo largo del tiempo, o con diferen-
tes elementos en un momento determinado.
El análisis es la continuación natural de la monitorización.
Con el análisis se pretende comprender en profundidad qué
es lo que explica las pautas de comportamiento que son in-
teresantes. Estos análisis pueden requerir diferentes métodos:
desde un análisis de datos en profundidad sobre un fenóme-
¿Funciona bien la web de mi Administración? 135
no concreto, al testeo experimental de hipótesis. La elección
del instrumento obedece a la naturaleza del estudio y a las
posibilidades de obtener y manejar los datos para la investi-
gación.
Ambos procesos son diferentes por estos elementos:
•
Aportación: El primer factor se refiere a lo qué espe-
ramos obtener con cada herramienta. El monitoreo es
una herramienta de contexto. Con él tratamos de ver
los parámetros de la realidad de la organización o el
servicio. ¿Cuántos servicios presto? ¿Cuánta gente me
visita? ¿Cuánto contenido se consume? Realmente lo
que nos aporta es un vistazo rápido de la realidad. El
análisis trata de obtener explicación. No se trata de
una ubicación de lo que hacemos en el mundo, sino
de por qué pasa lo que pasa. ¿Por qué la gente accede
o no a un servicio? ¿Qué le interesa a la gente que me
visita?
•
Temporalidad: El monitoreo es (o debe ser) algo con-
tinuo y constante. El contexto será mejor cuanto más
grande sea la base de ese monitoreo. A través de esa
continuidad podemos definir los límites de lo que es
normal o no. En el caso del análisis, la temporalidad no
tiene tanta importancia. Esto no significa que tenga
una base diaria. Hay elementos en los que podemos
encontrar contexto semanal o mensualmente. Por
ejemplo, el número de plazas de guardería solicitadas
es algo que monitorizamos de manera continua, pero
con base anual. El monitoreo es algo que hacemos
constantemente. El análisis por definición es algo que
tiene un principio y un fin en el tiempo. Empiezas el
análisis y lo terminas. Lo que aprendes, lo incorporas a
tu manera de entender el mundo.
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•
Orientación: ¿Qué esperamos hacer con los resulta-
dos de cada una? En el caso del monitoreo buscamos
no solo tener una base de comparación, sino, además,
tener elementos para decidir. Monitorizar sirve para
tomar decisiones cotidianas. El análisis no tiene una
relación directa con la acción, sino con la comprensión.
Un análisis no te dice qué debes hacer o qué es lo que
debe atraer la atención, sino qué es lo que pasará con
las decisiones que tomas. ¿Si mejoro el formulario para
liquidar un impuesto, tardará menos la gente en ha-
cerlo?
Ilustración 44.
Comparativa entre monitoreo y análisis
Visto esto, ¿qué utilizamos para monitorear? Básicamente,
dos instrumentos y medio.
•
Cuadros de mando. Los cuadros de mando están
orientados a prestar información ejecutiva de manera
visual para tomar decisiones rápidamente. Aunque
consideramos generalmente que se trata de algo bási-
camente gráfico, se pueden incluir algunos elementos
numéricos. En todo caso, se trata de herramientas que
ofrecen información de una posición concreta dentro
de un contexto. Generalmente incluye las KPI y datos
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