González Pérez, J.: El derecho a la tutela jurisdiccional. Cuadernos Civitas, 1984.

AutorJosé María Chico y Ortiz
Páginas595-598

    GONZÁLEZ PÉREZ, J.: El derecho a la tutela jurisdiccional. Cuadernos Civitas, 1984.

La recensión de esta monografía se me quedó quieta, a pesar de que su autor me ha preguntado varias veces por ella. Creo, sin embargo, que aquel retraso podía ofrecernos una ocasión auténticamente propicia para brindar un estudio sobre un problema del que diariamente se ocupa la prensa y del que varias veces el autor de la monografía ha escrito con firme pulso y gran valentía. Es necesario, imprescindible, como señala el autor, «una efectiva tutela jurisdiccional, de que todo aquel que cree tener derecho a algo pueda acudir a un órgano estatal que le atienda, verificando su razón y, en su caso, haciendo efectivo el derecho». Es la traducción de esa vertiente que ofrece el principio de la «seguridad jurídica» (la seguridad del Derecho, la seguridad del tráfico jurídico) y que como tal viene reconocida en la Constitución española vigente desde 1978.

Claro que el gran problema que pesa sobre «la búsqueda desesperada de la justicia» es el mismo que afecta al poder que representan las armas, al que intenta invadir la competición deportiva, al que presiona sobre los Page 596 medios de difusión, etc. En todos aquellos países en los que la fuerza del poder es arrolladora todos esos poderes quedan subordinados al superior. Por eso no sólo basta, como apunta el autor, impedir el ejercicio de la fuerza privada como modo de satisfacer las pretensiones y el reconocimiento de los derechos, sino que es preciso librarse de esa tentación del poder, para que así pueda asegurarse el imperio de la justicia. «La historia de la sustitución de la autodefensa por el proceso ha sido, en definitiva, la historia de la sustitución de la ley de la selva por la civilización». Volver a enterrar a Montesquieu puede ser una tentación ibérica en ese afán de trasegar cadáveres, pero eso, a mi entender, supondría acentuar lo que he llamado «la gran tristeza del ejercicio del Derecho». Y así como «recordar es morir un poco», estar triste es prepararse a recordar;...

El arranque de la monografía se basa en una cita de un libro de Alcalá-Zamora y Castillo (Proceso, autocomposición y defensa, México, 1972), en el cual se reproducen unas frases de una obra clásica de nuestro Derecho procesal, Instituciones prácticas de los juicios civiles, así ordinarios como extraordinarios, en todos sus trámites, según que empiezan, continúan y acaban en los Tribunales reales, del conde de la Cañada. Resumir...

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