Solo ante el peligro

AutorCarmen Pérez-Pozo Toledano
Páginas63-69
7
Solo ante el peligro
Soy de Madrid, y bailo el chotis como nadie. Bueno,
bailaba. Era yo de pura cepa, ya les digo. Y les asegu-
ro que mi Pepe es un bendito, porque para aguantar-
me a mí hay que comer cocido madrileño todos los
domingos y fiestas de guardar. Al pobre lo liberé de
mi carga el mes pasado, y se ha quedado solo y asus-
tado ante el mundo.
Bueno, solo, lo que se dice solo, no lo he dejado.
Tenemos tres hijos que son como pirañas. Se lo co-
men todo y no aportan nada. Yo conseguía manejar-
los y mantenerlos a raya, pero ahora que se ha que-
dado «solo ante el peligro», a mi pobre Pepe se lo van
a comer vivo. Ahora verán por qué se lo digo.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR