Reacciones al caso «Jakob von Metzler» en la opinión pública y en la doctrina científica

AutorMiguel Ángel Cano Paños
Páginas57-74
CAPÍTULO IV
57
Reacciones al caso «Jakob von Metzler»
en la opinión pública y en la
doctrina científica
1. Introducción
Teniendo en cuenta los acontecimientos acaecidos en relación al caso
«Jakob von Metzler», no puede desde luego sorprender la polémica, seria
e incluso emocional discusión que se desató en los medios germanos, en
la propia sociedad e incluso en círculos políticos y cientícos con ocasión
del proceso penal iniciado para enjuiciar la conducta llevada a cabo por
Wolfgang Daschner y Ortwin Ennigkeit. Desde entonces, la tortura ha
vuelto a ser un tema objeto de debate. Así, una forma de proceder por parte
de la policía, la cual se venía considerando como proscrita de una vez para
siempre tras la traumática experiencia vivida en Alemania con ocasión de la
dictadura nacionalsocialista, surgió de repente como una conducta ligada a
la actividad policial, apareciendo incluso voces que defendían su admisión.
La ciencia jurídica, los medios de comunicación, los políticos de todos los
partidos, incluso miembros del Gobierno y ministros, asociaciones profe-
sionales y la población alemana en general dieron su opinión sobre la causa
penal abierta contra el Vicepresidente de la Policía de Frankfurt, sin que
en algunos casos se conociesen los detalles de los hechos. Algunas voces
llegaron incluso a reclamar la regulación legal de los requisitos que debían
cumplirse para utilizar la tortura en casos excepcionales. Y si bien dicha
discusión debería haber concluido con la rmeza de la sentencia dictada el
20 de diciembre del año 2004 contra Daschner y Ennigkeit, lo cierto es que
el 26 de septiembre de 2005 fue publicada en Alemania una declaración de
Amnistía Internacional a la que se adherían personalidades importantes de
EN LOS LÍMITES DE LA EXCLUSIÓN DE LA RESPONSABILIDAD PENAL Miguel Ángel Cano Paños58
la vida alemana y que llevaba por título «No a la tortura – sí al Estado de
Derecho».56
Opiniones controvertidas procedentes de algunos sectores políticos, así
como comentarios de muy distinta naturaleza por parte de periodistas y exper-
tos en Derecho pusieron en gran medida de maniesto la incertidumbre que
existía a la hora de juzgar la conducta llevada a cabo por los agentes Daschner
y Ennigkeit. Todo parece indicar que en algunos casos ni siquiera existía un
rudimento de sólidos conocimientos sobre la cuestión. Así, las valoraciones de
la conducta del Vicepresidente de la Policía de Frankfurt iban desde aquéllas
que exigían la imposición al agente de una pena privativa de libertad hasta
las propuestas que solicitaban condecorar a Daschner con la Cruz del Mérito
Federal.57 Y es que tan pronto como se hizo pública la actuación de Daschner
y uno de sus subordinados en la noche del 30 de septiembre al 1 de octubre del
año 2002, se inició en Alemania un debate vigente hasta el día de hoy sobre
la cuestión relativa a si puede resultar admisible amenazar o incluso aplicar la
tortura contra un sospechoso durante un interrogatorio policial para con ello
proteger bienes jurídicos de gran valor, como sin duda era la vida de un niño de
once años en el caso «Jakob von Metzler».58
56 A I (): Nein zur Folter. Ja zum Rechtsstaat. Für den
Schutz des absoluten Folterverbotes. El citado memorándum fue rmado por más de
180 destacados cientícos, políticos y artistas y está considerado como la toma de
posición política central contra cualquier intento de relativizar la prohibición de la
tortura. Véase al respecto la nota núm. 19.
57 K, Jörg (2003): «Not kennt kein Gebot? Die strafrechtlichen Konsequenzen
von Folterhandlungen an Tatverdächtigen durch Polizeibeamte mit präventiver
Zielsetzung», Zeitschrift für die gesamte Strafrechtswissenschaft, núm. 115, p. 791.
58 Hay que decir que el caso «Jakob von Metzler» causó sensación más allá incluso de
las fronteras del país germano. Así, el entonces Enviado especial de las Naciones
Unidas sobre el tema de la tortura, eo van Boven, exigió a Alemania en una
carta redactada el 20 de septiembre de 2004 que se pronunciara sobre el supuesto
maltrato policial inigido al imputado Magnus Gäfgen. Para el Enviado especial
resultaba de capital importancia saber si –y en caso armativo, de qué naturaleza– se
habían decretado medidas de carácter penal o disciplinario contra los funcionarios
de policía presuntamente responsables de dichos actos de maltrato; y en caso con-
trario por qué no se habían impuesto dichas medidas. Con respecto a la mencionada
carta hay que decir sin embargo que el 11 de febrero de 2004 ya se había formulado

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR