¿Puede un símbolo de nuestra tradición convertirse en un hito de innovación? Sabotaje de discursos, prácticas y materialidades en un dispositivo modelizante
| Autor | Susana Herrera Lima |
| Cargo | Iteso, Guadalajara, Jalisco, México |
| Páginas | 129-146 |
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«¿Puede un símbolo de nuestra tradición convertirse
en un hito de innovación?». Sabotaje de discursos,
prácticas y materialidades en un dispositivo modelizante
SUSANA HERRERA LIMA
ITESO, GUADALAJARA, JALISCO, MÉXICO
La llegada a Shanghai
La imagen del Pabellón Chino aparecía entre brumas desde el puente Nanpu, en la
madrugada del 15 de julio de 2010, el taxista señalaba entusiasmado hacia el recin-
to repitiendo «Expo, Expo» y nosotras inaugurábamos nuestra propia forma de rela-
ción con el majestuoso símbolo que más tarde encontraríamos representado en todo
Shanghai y veríamos acercarse a nosotros desde la travesía por el río Huangpu. Así
empezaba el viaje de trabajo hacia la Expo Shanghai 2010, y también el contacto con la
vivencia estética de las edificaciones del presente en una ciudad que magnifica el es-
pectáculo en la diversidad de su arquitectura: la versión china de los rascacielos des-
1. Todas las fotografías fueron tomadas por Lucila Patricia Sandoval Herrera en la Expo Shanghai 2010.
FIGURA 1. El pabellón chino de la Expo Shanghai 2010
desde el río Huangpu.15 de julio de 20101
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130 LA CRÍTICA COMO SABOTAJE, METODOLOGÍA Y APLICACIÓN
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comunales y la estructura solemne de La Corona de Oriente, el Pabellón Chino, ofre-
cido al mundo como un lugar para enriquecer la experiencia espiritual de las personas.
Naturaleza, sociedad y discurso en las Exposiciones Universales
El acercamiento a la crítica como sabotaje que aquí se emprende se inserta en un
proyecto de largo aliento que busca comprender la constitución y configuración
del discurso dominante actual sobre las relaciones sociedad/naturaleza, particu-
larmente sobre el problema medioambiental contemporáneo, a través de una in-
dagación arqueológica y genealógica en las transformaciones de las propuestas
discursivas sobre las relaciones sociedad/naturaleza de los actores participantes
en las Exposiciones Universales, desde 1851 en Londres, hasta la más reciente,
realizada en 2010 en Shanghai.2
Las Exposiciones Universales se constituyen y se configuran como dispositi-
vos modelizantes que se transforman, reconfiguran, modifican y ajustan en el
tiempo y en el espacio para dar cuenta —entre otras muchas cuestiones— de las
transformaciones en los discursos sobre las relaciones entre sociedad y naturale-
za; con el objetivo de legitimar un orden simbólico, mediante la elaboración y
colocación, por parte de los actores participantes, de un discurso dominante que
está condicionado por factores externos a las Exposiciones, que abreva de diver-
sos ámbitos discursivos, que confiere a la ciencia y la tecnología un papel media-
dor protagónico en la relación sociedad/naturaleza, y que absorbe, uniformiza y
normaliza —con el fin de desactivarlos— los discursos de resistencia.
Del texto como máquina modelizante a la articulación de discursos,
prácticas no discursivas y materialidades como dispositivo modelizante
A partir de una de las afirmaciones centrales de la crítica como sabotaje: «Todo
texto comporta un modelo de mundo con una fuerza performativa potencial ca-
paz de determinar la subjetividad y las acciones de los que entran en contacto con
2. La primera Exposición Universal se celebra en Londres, en el año 1851: The Great Exhibition of the Works
of Industry of All Nations, en el Cry stal Palace de Hyde Park, edificio construido expresamente para esta
Exposición, que tuvo una duración de cinco meses y medio y recibió 6 millones de visitantes. Es el comien-
zo de la historia de un evento que ha mantenido su presencia a través de más de 160 años, que nace como
escenario privilegiado para el gran relato de la modernidad y que se desarrolla con rupturas y discontinui-
dades, con despliegues espectaculares y grandes dispendios, dando lugar a la representación creativa y
majestuosa, contradictoria y controvertida, de proyectos de mundo y de nación, de conflictivas relaciones
de poder y dominación, de cosmovisiones dominantes y de formas de conocimiento, control y transforma-
ción del mundo. «Las exposiciones mundiales de fines del siglo XIX eran, pues, los más abarcadores y
escandalosos intentos por retratar en miniatura una imagen moderna del mundo» (Tenorio Trillo, 1996).
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