El proyecto de ley fiscal del suelo de don luis valero bermejo.

AutorJose Luis Gonzalez-Berenguer Urrutia
CargoAbgogado. Técnico Urbanista

Hace poco (RDU núm. 175) publiqué una nota dedicada a don JOSE GARCIA HERNANDEZ, a quien tanto debe el urbanismo español. Hoy voy a hacer lo mismo con la memoria de don LUIS VALERO BERMEJO, insigne promotor de un proyecto de ley que hubiera acabado con la especulación del suelo.

Desde hace casi medio siglo cuantos se ocupan del tema en España vienen diciendo que nuestras realizaciones urbanísticas no desmerecen en absoluto de lo que hace fuera, salvo en un punto desde luego importante: la carestía del suelo, y por consiguiente, la de los pisos.

Este es un problema que tiene causas extraurbanísticas. El suelo es utilizado en España considerándolo como un bien inmune a los efectos de la inflación, lo que crea una enorme demanda añadida. Independientemente de ello se piensa que la oferta de suelo aumenta por el hecho de levantar las restricciones del planeamiento. Esto es falso, ya que levantadas éstas quienes compran son los Bancos, con lo cual el del suelo es el menos transparente de los mercados. El problema es este: la oferta final sólo aumenta si el intermediario está obligado a vender en plazo. Pero esto no lo hará si no tiene comprador. En el atípico mercado del suelo hay que desconexionar la oferta de la demanda.

Consciente de ello, un grupo de estudiosos de la materia fuimos convocados durante los años 1966 y 1967, siete lustros ya, Dios mío, cómo pasa el tiempo, por el entonces Subsecretario del Ministerio de Hacienda, don LUIS VALERO BERMEJO, para celebrar un simposio en el que hubo intervenciones sencillamente memorables. Fruto de ello fue el Proyecto de «Ley sobre fiscalidad especial del suelo», publicado en el B. O. de las Cortes de 19 de febrero de 1968.

El objeto de estas líneas es doble: a) recordar a los estudiosos del urbanismo en España que hace bastantes (pero no demasiados) años un grupo de personas -la mayoría desaparecidas- tuvo el coraje (o quizá sólo el buen humor) de acometer la solución del problema y lograr que el suelo estuviera en oferta, aun sin presión de la demanda. Es el problema del precio del suelo, ahora más vivo que entonces y que está siendo objeto hoy de un tratamiento disparatado y absurdo; y b) rendir homenaje al convocante de aquel equipo e inspirador de su trabajo, don LUIS VALERO BERMEJO, que con autoridad y sabiduría supo llevarlo a término.

Sin duda es pertinente recordar que, aparecido el proyecto en el B.

O. citado, fue inmediatamente objeto de la enemiga, de los Bancos, que veían en él un bajonazo en el precio de los terrenos y con ello un descenso en el negocio de los préstamos hipotecarios. Por lo visto en este país, que se dice cristiano, para que la Banca pueda tener un gran negocio los pisos tienen que ser tres veces más caros que en los países similares al nuestro. Ni que decir tiene que el proyecto fue retirado.

Es útil recordar también que después ha habido cuatro leyes (dos en la línea de una suave izquierda en 1976 y 1992, y dos en la línea de la extrema derecha, 1996 y 1998) que han dicho que...

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