Prólogo

AutorAntonio Salas Carceller
Páginas17-19
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Prólogo
Antonio Salas Carceller
Magistrado TS. Sala Primera
Al muy loable propósito de esta obra colectiva, se une la solvencia intelec-
tual y buen hacer de quienes participan en ella aportando su conocimiento y
experiencia en la materia, lo que sin duda ha de suscitar el interés de quienes
se han preocupado de estas cuestiones desde el punto de vista jurídico o,
simplemente, desde el convencimiento sobre su trascendencia en la socie-
dad actual.
Siempre se ha dicho, y es verdad, que el Derecho –en el sentido de
regulación o noma positiva– va detrás de una realidad que reclama –incluso
exige– una normativa que la regule y que, en denitiva, determine las solu-
ciones justas para cada problema en orden al bien de todos, con la creación
de las condiciones necesarias para que exista seguridad jurídica. Son los -
nes del Derecho como instrumento para la convivencia ordenada y pacíca:
justicia, bien común y seguridad jurídica.
Especial atención se presta en la obra a la Ley Orgánica 1/1982, de
5 de mayo, sobre derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la
propia imagen. Dicha ley viene a desarrollar la Constitución Española en
cuanto a la protección de tales derechos, recogidos en su artículo 18; los que
tantas veces entran en conicto con los del artículo 20, libertad de expresión
y de información.
Cuando el texto constitucional nos dice que estos últimos aparecen
limitados por los primeros, no hace otra cosa que invitar al jurista a hacer
un serio juicio de ponderación sobre cuál de tales derechos ha de prevalecer
en cada caso en atención a las particularidades de toda índole que concu-
rran en el mismo, pues cuando se atribuye a otro una actuación deshonrosa,

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