Antes de la primera guerra mundial
| Autor | Alfredo Liñán Lafuente |
| Páginas | 25-29 |
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Durante el siglo XIX pueden encontrarse algunos ejemplos en los que, si bien no existe un concepto claro de crimen contra la humanidad, si aparece una conciencia internacional para intentar evitar que se llevaran a cabo hechos atroces, que se manifiestan en forma de protestas diplomáticas, demostraciones de fuerza e intimidaciones militares y alguna que otra intervención armada, llevadas a cabo con el fin de que el país que estaba cometiendo determinados crímenes dejara de cometerlos.
En esta época se identifica con claridad la lucha de fuerzas entre la obligación moral de los Estados de intervenir ante una violación grave de los derechos inalienables de las personas y el principio de no intervención en los asuntos internos del Estado3. En este panorama de equilibrio de fuerzas entre la intervención humanitaria y el respeto al principio de soberanía se puede encuadrar la iniciativa de Gran Bretaña, Francia y Rusia en 1827 para intentar acabar con la cruel guerra que enfrentaba a los griegos contra los turcos. O la protesta que llevó a cabo el gobierno de los de los Estados Unidos en 1840 contra el Estado turco por la persecución de judíos en Damasco y Rodas. Asimismo, las representaciones diplomática de Gran Bretaña y Francia en 1856 anunciaron el cese de de las relaciones internacionales contra el rey de Sicilia y movilizaron sus tropas frente a las costas de la isla para presionar al monarca con la intención de poner fin a la política de crueldad y arbitrariedad de su gobierno. En 1860, Francia mandó una expedición militar a Turquía y presentó una protesta diplomática contra el gobierno turco por las masacres cometidas contra los cristianos en Siria. Varios países europeos mandaron a sus representaciones diplomáticas a protestar contra el gobierno de Rusia por el trato inhumano que se cometía con los polacos en 18634.
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En este ambiente comienza a nacer un concepto indispensable para la posterior creación de la figura criminal: las “leyes de humanidad”5. La declaración de San Petersburgo de 1868 para la prohibición del uso de ciertos proyectiles en tiempos de guerra utiliza términos como “requisitos de humanidad”6. En esta declaración se observa el espíritu presente en los tratados de guerra tendentes a prevenir el innecesario sufrimiento de la población civil durante un conflicto armado.
Respecto al concepto de leyes de humanidad, en el preámbulo de la Cuarta Convención de la Haya de 1907 se incluyó una cláusula conocida por el nombre propio de aquel que propuso su inclusión, la cláusula Martens. En ella se utilizaba la expresión “leyes de humanidad y por las exigencias de la pública conciencia”7en el siguiente contexto:
Mientras que se forma un Código más completo de las leyes de la guerra, las Altas Partes Contratantes juzgan oportuno declarar que en los casos no comprendidos en las disposiciones reglamentarias adoptadas por ellas, las poblaciones y los beligerantes permanecen bajo la garantía y el régimen de los principios del Derecho de Gentes preconizados por los usos establecidos entre las naciones civilizadas, por las leyes de la humanidad y por las exigencias de la conciencia pública.
A partir de esta Convención el “interés de la humanidad” fue concebido como un propósito hacia el cual las leyes y las costumbres de la guerra deben servir y las “leyes de humanidad” como una de las fuentes en las que deberían basarse las legislaciones nacionales8. No obstante, como advierte QUINTANO RIPOLLÉS, la denominación de lois d’ Humanité de los Convenios de la Haya no podía entenderse como apta para crear por sí misma un nuevo crimen, sino meramente una forma de reforzar la idea del Derecho de Gentes9.
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Será el 28 de mayo de 1915 cuando, en referencia a la política de deportaciones y exterminio que estaba llevando a cabo el gobierno turco se utilice por primera vez el término “crimen contra la humanidad” en un instrumento internacional oficial10. El gobierno francés, el británico y el ruso presentaron una declaración conjunta en la que denunciaban al gobierno otomano por las masacres cometidas contra los armenios y los señalaba como responsables de la comisión de “crímenes contra la humanidad”11. En dicha declaración se condenaba la connivencia y la asistencia de las autoridades otomanas a la masacre, de acuerdo a estos nuevos crímenes de Turquía contra la humanidad y la civilización, continuaba la declaración, los gobernantes de los países aliados anuncian públicamente… que serán considerados personalmente responsables … todos los miembros del gobierno otomano y todos sus agentes que hayan estado implicados en la masacre12.
Esta declaración tenía determinadas características en las que reside su importancia. En...
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