Políticas Sociales en la España de las Autonomías
| Autor | Carmen Alemán, Jorge Garcés y Antonio Gutiérrez |
| Páginas | 143-144 |
El presente estudio brinda al conjunto de los trabajos realizados sobre políticas sociales en España una extraordinaria y rica aportación, tanto a nivel teórico como empírico, de la situación de las diferentes Comunidades y Ciudades Autónomas en esta materia. Como punto de partida de todo este entramado se hace referencia al llamado Estado de Bienestar, ciertamente consolidado, a pesar de los contínuos debates, en el momento presente. Entre sus logros, dentro de la relevante institucionalización de los derechos sociales, se resaltan la implantación de un sistema universal de seguridad y protección social y de otro de garantía de recursos para quienes tienen dificultades de inserción o de mantenimiento en el proceso productivo, y en la provisión, también universal, de un conjunto de servicios y equipamientos colectivos para la salud y para la obtención de unos niveles educativos mínimos.
A su vez, se recuerda su papel integrador, gracias a su colaboración en la disolución de la conflictividad social, canalizando las diferentes problemáticas a través de un poder situado por encima de determinados intereses y en beneficio de la armonía social. Con el paso del tiempo, las mejoras sociales conseguidas han sido considerables, rasgos que han posicionado a nuestro país como un marco de referencia en cuanto al tamaño, funciones y efectividad de las políticas públicas desarrolladas para la consecución del Estado de Bienestar.
En este contexto, si se tienen en cuenta el diseño constitucional de competencias y la descentralización administrativa del Estado de las Autonomías que nos caracteriza, resaltan las amplias atribuciones sobre bienestar y servicios sociales otorgadas a las Comunidades Autónomas. Sin embargo, todas estas iniciativas han de coordinarse adecuadamente en los diferentes niveles (central, autonómico y local), con el fin de evitar duplicidades o vacíos e integrarse en el conveniente desarrollo de esta política, con el fin de articular una respuesta coherente y conjunta ante los problemas.
Entrando de lleno en la investigación, se aporta una valiosa reflexión y análisis minucioso de las políticas sociales y el bienestar en cada una de las Comunidades españolas. De manera más concreta, pasando a describir con mayor profundidad los diferentes apartados tratados en la obra, en cada diagnóstico pormenorizado de las diferentes Comunidades, se hace alusión en la mayoría de éstas, tal es el caso de Andalucía, Castilla-La Mancha, Ceuta, Melilla, Extremadura, Galicia, Baleares, Madrid, Murcia, Navarra, País Vasco y Valencia, en primer lugar, a una serie de consideraciones sobre su peculiar situación territorial y sociodemográfica, como punto de partida para el estudio posterior. Por ejemplo, se muestran cuestiones como los movimientos y densidad de la población y diversos índices (natalidad, morbilidad, pobreza, dependencia, etc.), entre otros elementos.
A continuación, se trata el tema de los sistemas de bienestar social. En este marco, se hace un recorrido general por sus distintos componentes, específicamente los servicios sociales, distinguiendo entre los generales, -comunitarios o de atención primaria- y los especializados (dirigidos a colectivos concretos como la familia, la infancia, los mayores, la mujer, los inmigrantes y otras poblaciones determinadas); sanidad; educación; empleo; vivienda; justicia y los destinados a las personas con discapacidad. En relación con este último sector es frecuente encontrar cómo responden el resto de sistemas ante este grupo.
En cada uno de ellos, se entra en una descripción puntualizada sobre sus precedentes, evolución, marcos normativos o legislación, competencias, estructuras u organigramas, recursos, planes y programas, mecanismos de participación y los problemas y avances alcanzados. Asimismo, se exponen una serie de amplias consideraciones metodológicas y datos globales relativos al presupuesto, en general, y, en particular, a las partidas económicas con las que cuenta cada sistema de bienestar social mencionado anteriormente. En este último sentido, es habitual hallarlo desglosado, a través de numerosas fuentes estadísticas, en función de diferentes criterios, generalmente por años, entidades encargadas, áreas de actuación, programas y recursos específicos.
Una vez consideradas las características más destacables de los sistemas de bienestar social y los presupuestos mediante los que se han financiado los mismos, se puede afirmar que la presente investigación, en definitiva, permite obtener un riguroso análisis de la situación de las políticas sociales en la España de las autonomías. Gracias a ello, se pueden sustraer los principales puntos fuertes y débiles de la situación actual, así como los retos de cara a un futuro. Entre los principales problemas, se han puesto de manifiesto, por ejemplo, que mientras algunos de estos sistemas están plenamente desarrollados, otros están todavía en pleno proceso de asunción de transferencias o a la espera del mismo y las limitaciones de competencias.
Además, la necesidad de mejorar los sistemas de coordinación en los diferentes niveles (favorecer el conocimiento mutuo, la distribución de funciones, el desarrollo de métodos de comunicación, etc.); la insuficiencia de recursos humanos, materiales y económicos; la falta de investigación, formación continua y dinamización de equipos multidisciplinares; mayores necesidades de evaluación de los resultados y análisis de los costes; la presencia de algunos sectores específicos más vulnerables que sufren, entre otras dificultades, la exclusión social o determinadas carencias (jóvenes inmigrantes, gitanos, minusválidos, etc.) y el gran reto pendiente en relación al aumento de la corresponsabilidad y participación social.
No obstante, haciendo un balance global, en los últimos años han sido muchos los logros alcanzados. Principalmente, hay que destacar, además de un gran esfuerzo presupuestario y un amplio desarrollo normativo (leyes, planes integrales, programas, etc.), un significativo avance general en los sistemas de protección social en todo el territorio, contando con una cobertura cada vez más amplia y con servicios de mayor calidad. En conclusión, todos los aspectos y cuestiones señaladas anteriormente, han sido tratados y descritos con el máximo detalle y exactitud a lo largo de las páginas del libro, por lo que suscita una crítica de lo más positiva.
Por último, alabar, en primer lugar, la riqueza de fuentes, referencias bibliográficas y estadísticas aportadas en el transcurso de los diferentes capítulos, que dotan a la obra de un excelente rigor científico y que suponen una contribución al desarrollo y progreso de la investigación sobre las políticas sociales en España, en general, y en las Comunidades, en particular. En segundo término, aplaudir la idea de tratar esta materia en los diferentes ámbitos autonómicos, lo que favorece la aportación de una visión de conjunto ciertamente novedosa en la sociedad española, desde el punto de vista del análisis comparado y de la investigación.
Junto con ello, como bien se pone de manifiesto en el prólogo de la obra, se puede considerar como una herramienta de trabajo muy útil para las Administraciones Públicas, de cara a la potenciación y mejora de los servicios prestados a los ciudadanos; para especialistas en la materia y, en general, para todos los interesados en los temas de Estado de Bienestar, protección social, Seguridad Social y servicios sociales.
