Legitimación y comunicación política. La campaña de las elecciones generales de 1996 en Cataluña

AutorMikel Barreda/Maria Galofré
CargoEscuela Universitaria de Gestión y Administración Pública. Fundación Universitaria del Bages
Páginas101-117
LEGITIMACIÓN Y COMUNICACIÓN POLÍTICA.
LA CAMPAÑA DE LAS ELECCIONES GENERALES
DE 1996 EN CATALUÑA*
Mikel Barreda y Maria Galofré
Escuela Universitaria de Gestión y Administración Pública
Fundación Universitaria del Bages
Sumario
I. Introducción
Si desde un punto de vista teórico es significativa la relación entre legitimación
y comunicación política, llama la atención la escasez de estudios empíricos en torno
a este tema.1El trabajo que presentamos tiene precisamente como objeto de estudio
la legitimación política presente en los discursos de los partidos en uno de los mo-
mentos estelares de su comunicación con los ciudadanos: las campañas electorales.
Constituye un análisis de la relación entre comunicación y legitimación política
desde una vertiente eminentemente empírica. Para ello, se ha elaborado un sistema
de categorías que posibilita examinar los criterios de legitimación desarrollados por
los partidos políticos (sección II); sistema que se ha aplicado en el estudio de la
campaña de las elecciones generales de 1996 en Cataluña (sección III); para, de este
modo, comprobar su validez y plantear qué factores explicativos de la legitimación
política se desprenden del análisis efectuado (sección IV).
Partimos, pues, de los conceptos teóricos de legitimación y comunicación políti-
ca. El término legitimación cuenta con una amplia difusión en la literatura de las
* Este artículo es producto de una investigación del Departamento de Ciencias Políticas y Socia-
les de la Universidad Pompeu Fabra, financiada por la CICYT (SEC-94-0358-C02-01). Agradece-
mos tanto a F. Requejo como a R. Zapata sus comentarios y críticas.
1. Una referencia general al estado de la investigación de los procesos de legitimación puede en-
contrarse en Luckmann (1987: 112-114). Por lo que se refiere al caso español, cabe destacar los traba-
jos empíricos de Del Águila y Montoro (1984) y Del Águila (1992) centrados en el análisis del discurso
político durante la transición, y los de Requejo (1989; 1995), Barreda y Galofré (1999) concernientes
a la legitimación política en las decisiones legislativas de diversos parlamentos autonómicos.
Autonomies, núm. 26, diciembre de 2000, Barcelona.
I Introducción.
II. Categorización de los enunciados
legitimadores.
III. Aplicación a la campaña de las elecciones
generales de 1996 en Cataluña.
1. El contexto político de las elecciones
generales de 1996.
2. Los mensajes electorales analizados.
3. Los resultados obtenidos.
PSOE/PSC.
PP.
IU/IC-Els Verds.
CiU.
ERC.
IV. Observaciones finales.
1. Factor contextual.
2. Factor institucional: ubicación del
partido en el Gobierno o en la oposición.
3. Factor ideológico: tipología de
partidos.
ciencias sociales. En términos generales presenta dos acepciones fundamentales. Por
un lado, es entendido como una exigencia de cualquier institución social o política
de una colectividad. A través de la legitimación se pretende asegurar la aceptación de
la institución por parte de los miembros de esa colectividad y su transmisión a las ge-
neraciones futuras (Berger y Luckmann, 1989; Luckmann, 1987). Se trata de un
proceso complejo, en el que intervienen criterios o «estrategias» de tipo cognoscitivo
(explicaciones concernientes a la institución) y normativo (justificaciones valorati-
vas).2Por otro lado, se utiliza el término legitimación para referirse al apoyo o acepta-
ción de un determinado sistema político y sus instituciones (parlamento, gobierno,
partidos, etc.) por parte de los miembros de ese sistema, especialmente los ciudada-
nos (Weil, 1989; Beetham, 1991: 18-20; Garzón Valdés, 1993: 842-843).3De las
dos concepciones planteadas, nos ocuparemos en este trabajo de la primera de ellas.
En concreto, de los procesos de legitimación desarrollados por los partidos políticos.
Por lo que se refiere a la comunicación política, suele ser concebida como el espa-
cio en el que interactúan los discursos políticos de tres actores: los políticos, los me-
dios de comunicación y la opinión pública (Wolton, 1992: 31; McNair, 1995: 4).
Constituye un espacio de varias dimensiones, que orienta líneas de investigación
muy diversas. Siguiendo a Gerstlé (1992: 14-21) podemos destacar tres: i) dimen-
sión pragmática, relativa a la relación que se establece mediante el proceso comuni-
cativo entre el emisor y el receptor; ii) dimensión simbólica, que se refiere a la utili-
zación de símbolos en el proceso de la comunicación, siendo el lenguaje el
instrumento simbólico más importante de difusión de los contenidos comunicati-
vos; y, por último, iii) dimensión estructural, que concierne a los canales de transmi-
sión de los mensajes políticos (canales organizacionales, mediáticos, etc.). La di-
mensión simbólica de la comunicación política guarda una estrecha relación con el
proceso de legitimación. Ciertamente, en los contenidos comunicativos de los líde-
res y partidos políticos ocupan un lugar privilegiado los criterios de legitimación
que despliegan con vistas a lograr el apoyo o, cuando menos, la aquiescencia de los
ciudadanos.4Ello es especialmente apreciable en cualquier campaña electoral: los
partidos desarrollan un intenso proceso de legitimación para convencer y obtener el
respaldo del electorado. En definitiva, la dimensión de comunicación política que
aquí nos interesa es la simbólica y dentro de ella la lingüística.
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2. La legitimación se desarrolla, según Luckmann (1987: 112-114) en tres «niveles»: i) nivel «su-
perior», que corresponde al ámbito de las ideologías y los «universos simbólicos»; ii) nivel «intersubje-
tivo», en el que las estrategias de legitimación están presentes en la comunicación oral cotidiana (máxi-
mas, proverbios, etc.); iii) nivel «intermedio» en el que las estrategias legitimadoras elaboradas en el ni-
vel superior se traducen a un «lenguaje cotidiano», apareciendo, por ejemplo, en los libros de texto o
en las discursos parlamentarios. En el primer nivel hay que situar las distintas teorías normativas sobre
la legitimación del poder político que han aparecido desde los años setenta. Estas teorías suelen agru-
parse en cuatro grandes bloques: liberal-social (Rawls, Dworkin), neoliberal (Hayek, Nozick), dialógi-
ca (Habermas, Apel) y comunitarista (Walzer, Taylor). Al respecto veánse algunas clasificaciones en,
entre otros, Kymlicka (1990), Mardones (1994) y Requejo (1996).
3. Esta concepción tiene sus raíces en la noción weberiana de legitimidad, basada en la creencia
de los sometidos a una dominación política (Weber, 1992: 170).
4. Los criterios de legitimación presentes en la comunicación política son de dos tipos: lingüísti-
cos e iconográficos. En este artículo nos centraremos exclusivamente en los lingüísticos.
II. Categorización de los enunciados legitimadores
Basándonos en la técnica de análisis de contenido,5hemos elaborado una cate-
gorización de los diferentes enunciados legitimadores que utilizan los partidos polí-
ticos en la campaña electoral. Por «enunciado legitimador» entendemos todo con-
tenido lingüístico utilizado con una finalidad justificadora, ya se trate de frases (por
ejemplo, «vamos a garantizar las pensiones en España», «se debe reformar el Sena-
do», «debe cambiarse el Código civil») o de palabras concretas (por ejemplo, «igual-
dad», «regeneración ética», «libertad»).
Para ello, hemos partido de un sistema de categorías elaborado en un estudio
sobre legitimación política en el ámbito legislativo (Requejo, 1995), adaptándolo al
contexto empírico propio de nuestra investigación. En efecto, el discurso electoral
presenta unas características distintivas frente al discurso legislativo. En primer lu-
gar, se trata de un discurso menos estructurado que el legislativo. En segundo lugar,
tiene un carácter dinámico, que incorpora la posibilidad de diálogo y crítica entre
diferentes actores políticos. Por último, tiene un carácter abierto, esto es, suscepti-
ble de ser modificado a lo largo del proceso de comunicación política.6
El sistema de categorías de enunciados legitimadores que hemos elaborado se
estructura en dos niveles básicos. Por un lado, se clasifican los enunciados legitima-
dores según dos dimensiones analíticas: descripción/prescripción y crítica/defensa. Por
otro lado, se tiene en cuenta el contenido temático de dichos enunciados, clasifi-
cándolos en diecisiete categorías.
Respecto al primer nivel, combinando las dos dimensiones analíticas mencio-
nadas resultan cuatro tipos posibles de enunciados legitimadores: descriptivo-críti-
co, descriptivo-defensa, prescriptivo-crítico, prescriptivo-defensa. Detallamos a
continuación el contenido de cada uno considerando como referencia a los de tipo
descriptivo y prescriptivo:
a) Enunciados legitimadores descriptivos: se trata de enunciados basados en des-
cripciones de hechos o acciones (presentes o pasados) emprendidos por los partidos
políticos en relación con determinados issues de la agenda electoral, dotados de una
implícita intencionalidad legitimadora. Este tipo de enunciados hacen referencia al
universo de lo que existe, de la realidad; son enunciados de facto. Estos enunciados
pueden ser, además, críticos o de defensa. Cumplen la primera condición cuando la
justificación se dirige a criticar las acciones y/o comportamientos de los otros parti-
dos; y son enunciados descriptivos de defensa cuando conciernen a acciones y/o
comportamientos del propio partido.
b) Enunciados legitimadores prescriptivos: son enunciados propiamente norma-
tivos, puesto que su análisis nos permite ver cómo los diferentes partidos introdu-
cen referencias a valores, expectativas, objetivos, promesas, y no a hechos, acciones
y/o comportamientos que tienen o han tenido lugar. Por tanto, a diferencia de los
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 103
5.
Técnica explicada, entre otros, por Weber (1985), Krippendorff (1990) y Ruiz Olabuénaga (1996).
6. El sistema de categorías que proponemos puede ser utilizado como base para el análisis de otros
discursos que cumplan con estas características, tales como los debates parlamentarios, las discusiones de
los comités ejecutivos o las discusiones de los magistrados de un tribunal antes de dictar una sentencia.
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Categoría Referencias a…
Sistema legal-constitucional El marco constitucional del Estado, referencias explícitas a la Consti-
tución, las leyes que se derivan de ella y las instituciones y estructura
básicas del Estado, así como su defensa frente al terrorismo.
Desarrollo constitucional El desarrollo concreto de algunas partes de la Constitución, como la
reforma del Senado, del sistema electoral o de instituciones del Esta-
do, así como referencias a temas vinculados al desarrollo de la política
antiterrorista en todas sus dimensiones.
Liberal-protectivo Las «libertades negativas», los derechos civiles en general, la esfera
privada y la protección de la individualidad.
Democrático-participativo Las «libertades positivas», los derechos políticos, todos los canales
existentes en el sistema político de participación y comunicación en-
tre la sociedad y el Estado.
Económico El mercado, la «mercantilización» de la vida social, el desempleo y los
problemas económicos de la sociedad en general.
Bienestar Los derechos sociales, la «desmercantilización» del ciudadano, los di-
ferentes sectores de servicios sociales, las políticas públicas de bienes-
tar social.
Posmaterialista Los valores defendidos por los nuevos movimientos sociales, también
llamados «posmaterialistas», como los movimientos ecológicos, femi-
nistas, pacifistas, de objeción de conciencia, etc.
Nacional estatal La cultura estatal española o la identidad nacional española.
Nacional no estatal La identidad cultural diferenciada de una determinada nacionalidad
dentro de la estructura estatal española.
Plurinacional El carácter pluricultural y plurinacional del Estado.
Técnico-funcional La «racionalidad instrumental», justificaciones técnicas procedimen-
talistas, como el carácter eficiente y eficaz de determinadas políticas
públicas o de la misma Administración, la necesidad de modernizar
las administraciones estatales
Gobernabilidad La estabilidad del gobierno y del sistema político, el funcionamiento
correcto de las instituciones, y la posibilidad y necesidad de alternan-
cia de poder.
Convivencia social El valor de la comunidad como marco de referencia, la unión de las
personas, su sociabilidad, la paz social en general.
Unión Europea El proceso de construcción de la Unión Europea en todas sus dimen-
siones (económicas, políticas, etc.).
Política comparada Otros estados, tomados como ejemplos para confirmar ciertos aspec-
tos del propio proyecto político o criticar el de los otros.
Identidad y estilo de partido La identidad ideológica diferenciada del propio partido (de acuerdo con
los clásicos cleavages derecha/izquierda, nacionalista, etc.) y el propio es-
tilo del partido frente al de los demás (dialogante, moderado, etc.).
Ética pública La necesidad de regenerar la práctica política y el espacio público frente
a la corrupción y otros usos privados de lo público, referencias a valores
y virtudes públicas (honradez, transparencia, responsabilidad, etc.).
descriptivos, estos enunciados corresponden al universo del deber ser. Como en el
caso anterior, pueden ser usados o bien para criticar a los otros partidos, o bien para
defender el propio proyecto político.
En un segundo nivel clasificamos los enunciados legitimadores según hagan re-
ferencia a los siguientes aspectos:
Metodológicamente esta clasificación satisface los requisitos formales de cual-
quier análisis basado en un sistema de categorización.7Entre los más importantes,
podemos citar los requisitos de exhaustividad (todos los enunciados legitimadores de
los distintos discursos políticos se incluyen en algunas de las categorías) de exclusivi-
dad (no pueden aparecer enunciados en más de una categoría) y de simplicidad (no
deben aparecer apartados vacíos en las aplicaciones del sistema de categorías).
III. Aplicación a la campaña de las elecciones generales de 1996 en Cataluña
A continuación, analizamos los resultados obtenidos al aplicar el sistema de ca-
tegorías anterior a la campaña de las elecciones generales de 1996 en Cataluña. En
primer lugar, y para enmarcar la aplicación empírica, esbozamos brevemente el
contexto político en el que se desarrollaron dichas elecciones; después, presentamos
los criterios seguidos para determinar el material empírico utilizado; y finalmente,
exponemos los resultados obtenidos.
1. El contexto político de las elecciones generales de 1996
Las elecciones legislativas de marzo de 1996 se producen en un marco de tensión
política.8No en vano se convocan anticipadamente, un año antes del final de la le-
gislatura. Al romperse el pacto con CiU, el PSOE prefiere presentarse de nuevo ante
el electorado a seguir gobernando en un ambiente que no le es en absoluto propicio.
El Gobierno se encuentra en una posición débil, con un proyecto de presupues-
tos generales del Estado para 1996 rechazado por el Parlamento, y se ve obligado a
prorrogar los del año anterior. Esta debilidad se debe no sólo a su posición de mayo-
ría relativa en el Congreso, sino también, y muy especialmente, a los problemas de
credibilidad política causados por los escándalos relacionados directamente con su
partido y su gestión al frente del Gobierno. Las acusaciones sobre financiación ile-
gal del PSOE y del PSC, y casos de corrupción como el de Mariano Rubio o Rol-
dán dañan la imagen pública del PSOE, al igual que lo hacen el asunto de las escu-
chas del CESID o la presunta implicación de altos cargos de anteriores gobiernos
del PSOE (incluido el ex ministro Barrionuevo) en la trama del GAL.
Todos estos casos serán utilizados de forma asidua por parte del PP para justificar
la necesidad de un cambio al frente del Gobierno de España, dotando a toda la legisla-
tura, pero en especial a sus últimos momentos, de un cariz marcadamente electoral.
Los escándalos relacionados con el PSOE son también noticia constante en los me-
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 105
7. Véase, por ejemplo, Requejo (1995: 245) o Ruiz Olabuénaga (1996: 205-206).
8. Para una información más detallada del contexto de la campaña electoral, véanse Cotarelo
(1996), Pallarés y Soler (1997) o Wert (1996).
dios de comunicación, especialmente en algunos, a los que el Gobierno acusa de for-
mar parte de una conspiración que va mucho más allá del puro ataque partidista, al
intentar socavar los fundamentos en los que se basa el Estado democrático español.
Pero no sólo el PP someterá al PSOE a una crítica implacable a lo largo de la le-
gislatura. IU, en un intento de arrebatar al PSOE el espacio político de la izquierda,
le acusará de haber traicionado sus principios y de haber hecho una política perfec-
tamente asimilable a la que llevaría a cabo un partido de derechas. Asimismo, el
pacto que unía al PSOE con los nacionalistas, y que le permitió gobernar hasta que
se rompió, será también utilizado como elemento crítico contra este Gobierno, al
considerarse que se está cediendo a intereses particularistas contrarios al interés ge-
neral de España, iniciándose también una campaña de ataque y de desprestigio de
los nacionalismos no estatales, especialmente del catalán.
Los sempiternos problemas de España (el paro y el terrorismo de ETA) segui-
rán siéndolo todavía en suficiente grado a la llegada de la campaña electoral como
para que se hable del fracaso del PSOE al frente del Gobierno. La crisis económica
iniciada en 1992 todavía no ha llegado a su fin, y ETA ha realizado de forma muy
reciente en el tiempo varios atentados mortales de fuerte impacto político y popular
(con los asesinatos de Francisco Tomás y Valiente, y Fernando Múgica), sin olvidar
el atentado fallido contra Aznar.
El PSOE, a pesar de todo, sigue contando con un fuerte capital político, gra-
cias, entre otras cosas, a la presencia de Felipe González al frente del Gobierno y del
partido, y a su buena imagen en Europa. González sigue siendo un líder carismático
que ha sabido mantenerse al margen de todos los escándalos políticos en los que se
han visto envueltos muchos de sus principales colaboradores. Además, la presiden-
cia española en la UE ejercida durante el segundo semestre de 1995 ha sido consi-
derada un éxito por todos los países miembros.
En Cataluña, las elecciones generales de marzo de 1996 cuentan con el preceden-
te casi inmediato de los comicios autonómicos catalanes de noviembre de 1995. En
ellos el PP había mejorado considerablemente sus resultados, triplicando el número
de escaños conseguidos, aunque siguiera lejos todavía de poder convertirse en una au-
téntica alternativa de gobierno en esta comunidad. La notoria ampliación de su éxito
electoral en una comunidad tradicionalmente desfavorable a esta fuerza política se in-
terpretó por parte de muchos analistas como la prueba de que el PP tenía posibilida-
des de ganar unas elecciones generales por amplia mayoría a nivel estatal. Por su parte,
IC-Els Verds mejoraba también sus resultados electorales, lo que revalidaba la tesis de
sus socios en el ámbito estatal (IU) sobre sus posibilidades de crecer para convertirse
en una alternativa creíble de gobierno desde una perspectiva de izquierda o, al menos,
de pasar a ocupar el papel de tercera fuerza decisiva en las labores de gobierno.
El clima de tensión y duro enfrentamiento al que hemos hecho referencia se reflejará
en el estilo de la campaña electoral. En su inicio, el PSOE evitará en lo posible la autocríti-
ca, para buscar relacionar a su principal contendiente electoral con la imagen antidemo-
crática y contraria a los intereses de los trabajadores de la derecha tradicional española.
Recuérdese el famoso vídeo electoral del PSOE en el que se equiparaba la actitud del PP
con la de un dóberman amenazante. Reflejo de la falta de acuerdo existente entre los con-
tendientes electorales es también la imposibilidad de llegar a un consenso para la celebra-
ción de un debate televisado en el que se enfrentasen José María Aznar y Felipe González.
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2. Los mensajes electorales analizados
Hemos establecido un procedimiento de muestreo de los mensajes políticos de
la campaña electoral teniendo en cuenta tres componentes básicos del proceso co-
municativo: a) los emisores; b) el tipo de mensajes; c) los canales de difusión.
a) En relación con los emisores, nuestra atención se ha dirigido hacia los líde-
res políticos de los cinco partidos con representación parlamentaria en Cataluña
(CiU, ERC, IU/IC-Els Verds, PP y PSOE/PSC). Al hablar de líderes políticos nos
referimos a aquellos que ocupan la primera posición en la estructura organizativa
de un partido (secretario general o presidente) o los primeros puestos en las listas
electorales.
b) De la diversidad de mensajes políticos nos hemos centrado en los emitidos
directamente por los líderes políticos y, concretamente, en las entrevistas realizadas
en medios de comunicación y en los debates electorales. La selección de estos tipos
de mensajes ha estado motivada básicamente por dos razones: por un lado, su im-
portancia intrínseca en cualquier campaña electoral; por otro lado, las característi-
cas del formato de estos mensajes (su nivel de extensión y profundidad) los hace
idóneos para analizar los criterios de legitimación.
c) No cabe duda de que en las sociedades occidentales actuales los medios de
comunicación constituyen el canal de difusión más relevante de información polí-
tica de los ciudadanos (Swanson, 1995: 10-11; Benedicto, 1995: 261 y ss.). He-
mos considerado los mensajes electorales difundidos a través de los dos canales
mediáticos más importantes, a saber, la televisión y la prensa. En concreto, hemos
analizado todas las entrevistas y debates entre los líderes políticos aparecidos en
las cadenas de televisión que emiten en sistema abierto en Cataluña, ya sean de
ámbito autonómico (TV3, C33 y circuito catalán de TVE) o estatal (TVE-1,
TVE-2, Tele 5 y Antena 3), así como las entrevistas aparecidas en los cinco perió-
dicos de mayor tirada en Cataluña (El Periódico,La Vanguardia, El País, Avui y El
Mundo).
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 107
Tabla 0:Mensajes de las elecciones generales de 1996 en Cataluña
Entrevistas Entrevistas Debates
televisión* prensa** televisión Total
CiU 6 7 6 19
ERC 3339
IU/IC-Els Verds 4 8 7 19
PP 49720
PSOE/PSC 5 8 7 20
Total 22 35 30 87
* Cadenas de ámbito autonómico (TV3, C33 y circuito catalán de TVE) y estatal (TVE-1, TVE-2, Tele 5 y
Antena 3).
** El Periódico,La Vanguardia, El País, Avui yEl Mundo.
Combinando los criterios anteriores ha resultado una muestra de 87 unidades
comunicativas,9correspondientes a entrevistas en televisión y prensa, y debates en
televisión. La siguiente tabla recoge la distribución de las unidades comunicativas
analizadas, por partidos y tipo de mensajes.
Nótese que la presencia de todos los partidos en los medios de comunicación
considerados es muy similar, a excepción de ERC, con una presencia considerable-
mente menor y, por lo tanto, con una capacidad también menor de hacer llegar su
discurso a los ciudadanos en relación con sus contrincantes.
3. Los resultados obtenidos
En el primer apartado presentamos la descripción de la intensidad defensiva/
crítica de la campaña (3.1); en el segundo, la intensidad descriptiva/prescriptiva
(3.2); en el tercero establecemos los tipos de enunciados legitimadores más emplea-
dos (3.3); y por último, dibujamos el perfil legitimador de cada uno de los partidos
políticos (3.4).
3.1. La intensidad defensiva/crítica de los mensajes electorales
Los resultados globales indican un predominio claro de los enunciados legiti-
madores de carácter defensivo (72,7 %, frente al 27,3 % de enunciados de carácter
crítico). En otras palabras, los líderes políticos de los cinco partidos con representa-
ción parlamentaria en Cataluña dedican mayor atención a exponer la labor realiza-
da o su proyecto político que a criticar la actuación o las propuestas de otros parti-
dos. A la luz de estos datos no puede afirmarse que el estilo de estos mensajes sea
especialmente crispado, como intuitivamente se había supuesto. Máxime si se com-
para con otros tipos de mensajes de la campaña electoral que aquí no hemos anali-
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9. Por «unidad comunicativa» nos referimos a cada una de las intervenciones comunicativas de
los líderes políticos durante la campaña.
Gráfico 1. Intensidad defensiva/crítica de los mensajes electorales por partidos (en %)
Defensa Crítica
PSOE/PSC
PP
IU/IC-Els Verds
ERC
CiU
0 % 20 % 40 % 60 % 80 % 100 %
zado, sobre todo la propaganda audiovisual, en los que se detecta un clima de fuerte
crispación y confrontación entre partidos.10
Por partidos políticos (véase gráfico 1), sobresale IU/IC-Els Verds por el tono
crítico de sus intervenciones (34,4 %), mientras que el PP es el que en menor medi-
da realiza críticas a otros partidos (20,5 %). Puede resultar sorprendente este último
dato, habida cuenta de la intensiva labor de oposición que realizó el PP durante la
legislatura. Sin embargo, llegada la campaña, el PP adopta una estrategia típica de
«ganador»,11 por la que renuncia, entre otras cosas, a basar la campaña en una críti-
ca y descalificación dura hacia su principal competidor, el PSOE (Wert, 1996: 38).
En los tres partidos restantes cabe destacar su similitud con respecto a la proporción
de enunciados críticos y defensivos: los críticos, concretamente, representan el 25,6 %
del conjunto de enunciados legitimadores de CiU, el 27,7 % de los de ERC y el
28,3 % de los del PSOE/PSC.
3.2. La intensidad descriptiva/prescriptiva de los mensajes electorales
El recuento final de esta segunda dimensión analítica indica, para el conjunto de
mensajes electorales, una distribución bastante similar entre enunciados legitimado-
res descriptivos y prescriptivos, despuntando ligeramente los de carácter prescriptivo
(52,6 %). De los cinco partidos (véase gráfico 2), el PP destaca en la utilización de
enunciados legitimadores prescriptivos (65,7 %), al contrario del PSOE/PSC (38,5 %).
Esta diferencia puede ser explicada a tenor de la posición en el gobierno o en la opo-
sición de ambos partidos. Así, la amplia experiencia de gobierno en el caso del
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 109
10. Sobre la propaganda audiovisual y, en particular, sobre las técnicas de publicidad negativa
utilizadas por el PSOE y el PSC durante la campaña véanse Wert (1996) y Cotarelo (1996, cap. 9).
11. El eslogan escogido, Con la nueva mayoría, es una señal clara de esta estrategia de campaña.
70
60
50
40
30
20
10
0
Gráfico 2. Intensidad descriptiva/prescriptiva de los mensajes electorales (en %)
CiU
ERC IU/IC-Els Verds PP PSOE/PSC
Prescriptivos Descriptivos
53,6
46,4
58,4
41,6
51,5 48,5
65,7
34,3 38,5
61,5
PSOE/PSC le lleva a privilegiar en sus mensajes electorales la labor realizada y, en
este sentido, a enfatizar las referencias de carácter descriptivo. En cambio, el PP, en
tanto que partido en la oposición, hace hincapié en los aspectos programáticos y de
acción futura de gobierno, recurriendo de manera especial a enunciados legitimado-
res de tipo prescriptivo. Por su parte, los mensajes electorales de CiU, ERC e IU/IC-
Els Verds se asemejan bastante en la distribución entre contenidos descriptivos y
prescriptivos. Así, los enunciados legitimadores descriptivos constituyen el 46,4 %
en el caso de CiU, el 41,6 % en ERC y el 48,5 % en IU/IC-Els Verds.
3.3. Los enunciados legitimadores más utilizados en la campaña, según su
contenido temático
La frecuencia de uso de los enunciados legitimadores, según su contenido te-
mático, por los partidos políticos con representación en Cataluña es la siguiente:
De los cinco enunciados legitimadores utilizados con más frecuencia, tres están
relacionados con los principales cleavages que estructuran el sistema de partidos espa-
ñol: el socioeconómico (enunciados económicos, 19,1 %, y de bienestar, 11,6 %) y el
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Tabla 1: Frecuencia de los enunciados legitimadores en la campaña electoral
general de 1996 en Cataluña por partidos
Els Verds
Enunciados PSOE/PSC PP IU/IC- CiU ERC Total**
1. Sistema legal constitucional 3,0 % 4,8 % 4,2 % 2,2 % 6,6 % 3,8 %
2. Desarrollo constitucional 10,0 % 13,1 % 8,0 % 7,6 % 9,0 % 9,8 %
3. Liberal- protectivo 0,5 % 2,8 % 0,0 % 0,2 % 0,0 % 0,9 %
4. Democrático participativo 2,9 % 4,4 % 2,1 % 1,5 % 1,8 % 2,7 %
5. Económico 16,5 % 22,9 % 23,6 % 18,4 % 4,8 % 19,1 %
6. Bienestar 18,1 % 9,0 % 13,5 % 4,6 % 12,7 % 11,6 %
7. Posmaterialista 1,3 % 0,0 % 4,0 % 0,4 % 1,2 % 1,4 %
8. Nacional estatal 1,8 % 2,8 % 0,4 % 0,0 % 3,6 % 1,5 %
9. Nacional no estatal 4,5 % 5,0 % 2,1 % 21,5 % 33,7 % 9,9 %
10. Plurinacional 1,4 % 1,5 % 0,6 % 2,6 % 3,0 % 2 %
11. Técnico-funcional 2,9 % 7,2 % 3,8 % 2,2 % 0,6 % 3,8 %
12. Gobernabilidad 5,5 % 11,1 % 4,2 % 10,8 % 6,0 % 7,8 %
13. Convivencia social 3,6 % 1,7 % 0,0 % 1,3 % 0,0 % 1,6 %
14. Unión Europea 4,3 % 4,4 % 10,3 % 6,3 % 1,8 % 5,9 %
15. Política comparada 7,2 % 1,8 % 2,1 % 3,3 % 0,6 % 3,5 %
16. Identidad y estilo partido 12,3 % 3,9 % 12,2 % 14,8 % 7,8 % 10,4 %
17. Ética pública 4,3 % 3,7 % 8,6 % 2,4 % 6,6 % 4,9 %
Total* 25,4 % 24,6 % 21,5 % 20,9 % 7,5 % 100,0 %
* % de enunciados correspondiente a cada partido sobre el total de enunciados analizados.
** % de enunciados correspondiente a cada categoría temática sobre el total de enunciados analizados.
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 111
Tabla 2: PSOE/PSC
Enunciados Descriptivos Descriptivos Total Prescriptivos Prescriptivos Total Total*
defensa crítica descriptivos defensa crítica prescriptivos
2. Desarrollo
constitucional 23,2 % 10,7 % 33,9 % 60,7 % 5,4 % 66,1 % 10,0 %
5. Económico 47,8 % 15,2 % 63,0 % 27,2 % 9,8 % 37,0 % 16,5 %
6. Bienestar 42,6 % 11,9 % 54,5 % 33,7 % 11,9 % 45,5 % 18,1 %
9. Nacional
no estatal 64,0 % 20,0 % 84,0 % 16,0 % 0,0 % 16,0 % 4,5 %
12. Gobernabilidad 25,8 % 35,5 % 61,3 % 25,8 % 12,9 % 38,7 % 5,5 %
14. Unión Europea 45,8 % 8,3 % 54,2 % 29,2 % 16,7 % 45,8 % 4,3 %
16. Identidad -
estilo de partido 11,6 % 69,6 % 81,2 % 13,0 % 5,8 % 18,8 % 12,3 %
Tabla 3: PP
Enunciados Descriptivos Descriptivos Total Prescriptivos Prescriptivos Total Total*
defensa crítica descriptivos defensa crítica prescriptivos
2. Desarrollo
constitucional 4,2% 5,6 % 9,9 % 84,5 % 5,6 % 90,1 % 13,1 %
5. Económico 21,8 % 20,2 % 41,9 % 57,3 % 0,8 % 58,1 % 22,9 %
6. Bienestar 16,3 % 22,4 % 38,8 % 59,2 % 2,0 % 61,2 % 9,0 %
9. Nacional
no estatal 18,5 % 25,9 % 44,4 % 55,6 % 0,0 % 55,6 % 5,0 %
12. Gobernabilidad 16,7 % 13,3 % 30,0 % 68,3 % 1,7 % 70,0 % 11,1 %
14. Unión Europea 4,2 % 41,7 % 45,8 % 54,2 % 0,0 % 54,2% 4,4 %
16. Identidad -
estilo de partido 19,0 % 61,9 % 81,0 % 14,3 % 4,8 % 19,0 % 3,9 %
Tabla 4: IU/IC-Els Verds
Enunciados Descriptivos Descriptivos Total Prescriptivos Prescriptivos Total Total*
defensa crítica descriptivos defensa crítica prescriptivos
2. Desarrollo
constitucional 10,5 % 28,9 % 39,5 % 57,9 % 2,6 % 60,5 % 8,0 %
5. Económico 14,3 % 29,5 % 43,8 % 50,0 % 6,3 % 56,3 % 23,6 %
6. Bienestar 15,6 % 25,0 % 40,6 % 50,0 % 9,4 % 59,4 % 13,5 %
9. Nacional
no estatal 30,0 % 20,0 % 50,0 % 50,0 % 0,0 % 50,0 % 2,1 %
12. Gobernabilidad 15,0 % 45,0 % 60,0 % 35,0 % 5,0 % 40,0 % 4,2 %
14. Unión Europea 14,3 % 55,1 % 69,4 % 22,4 % 8,2 % 30,6 % 10,3 %
16. Identidad -
estilo de partido 19,0 % 39,7 % 58,6 % 36,2 % 5,2 % 41,4 % 12,2 %
nacional o territorial (destacan los enunciados nacionales de ámbito no estatal con un
9,9 %). Los otros dos se refieren a la identidad o al estilo de los partidos (10,4 %) y al
desarrollo constitucional (9,8 %). Por el contrario, otros cinco enunciados legitima-
dores cuentan con una ínfima presencia dentro de los mensajes electorales; a saber: los
enunciados liberal-protectivos, posmaterialistas, nacionales de ámbito estatal y pluri-
nacional, así como los relativos a la convivencia social (ninguno supera el 2 %). Ade-
más, destacan los enunciados referidos a la UE (sobre todo por parte de IU/IC-Els
Verds: 10,3 %) y a la gobernabilidad (de especial interés para el PP: 11,1 %). En con-
junto, los siete enunciados más utilizados conforman el 74,5 % del total (véase tabla 1).
En las tablas de las páginas anteriores mostramos las posiciones de cada partido
con respecto a estos siete enunciados; tablas que nos servirán para describir, en el si-
guiente apartado, el discurso legitimador de cada uno de ellos.
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112
* % de enunciados correspondiente a cada categoría temática sobre el total de enunciados analizados
para cada partido.
Tabla 5: CiU
Enunciados Descriptivos Descriptivos Total Prescriptivos Prescriptivos Total Total*
defensa crítica descriptivos defensa crítica prescriptivos
2. Desarrollo
constitucional 22,9 % 17,1 % 40,0 % 57,1 % 2,9 % 60,0 % 7,6 %
5. Económico 30,6 % 8,2 % 38,8 % 56,5 % 4,7 % 61,2 % 18,4 %
6. Bienestar 14,3 % 0,0 % 14,3 % 81,0 % 4,8 % 85,7 % 4,6 %
9. Nacional
no estatal 21,2 % 20,2 % 41,4 % 48,5 % 10,1 % 58,6 % 21,5 %
12. Gobernabilidad 46,0 % 30,0 % 76,0 % 22,0 % 2,0 % 24,0 % 10,8 %
14. Unión Europea 51,7 % 3,4 % 55,2 % 44,8 % 0,0 % 44,8 % 6,3 %
16. Identidad -
estilo de partido 17,6 % 32,4 % 50,0 % 26,5 % 23,5 % 50,0 % 14,8 %
Tabla 6: ERC
Enunciados Descriptivos Descriptivos Total Prescriptivos Prescriptivos Total Total*
defensa crítica descriptivos defensa crítica prescriptivos
2. Desarrollo
constitucional 13,3 % 6,7 % 20,0 % 73,3 % 6,7 % 80,0 % 9,0 %
5. Económico 0,0 % 62,5 % 62,5 % 37,5 % 0,0 % 37,5 % 4,8 %
6. Bienestar 4,8 % 19,0 % 23,8 % 76,2 % 0,0 % 76,2 % 12,7 %
9. Nacional
no estatal 25,0 % 16,1% 41,1 % 57,1 % 1,8 % 58,9 % 33,7 %
12. Gobernabilidad 10,0 % 20,0 % 30,0 % 60,0 % 10,0 % 70,0 % 6,0 %
14. Unión Europea 33,3 % 33,3 % 66,7 % 33,3 % 0,0 % 33,3 % 1,8 %
16. Identidad -
estilo de partido 30,8 % 46,2% 76,9 % 23,1 % 0,0 % 23,1 % 7,8 %
3.4. Perfil del discurso legitimador de los partidos
a) PSOE/PSC
El PSOE/PSC basa su discurso en la temática económica y social (suma de ca-
tegoría económica y de bienestar: 34,6 %), para defender, sobre todo, las políticas
realizadas en estos ámbitos durante su período de gobierno. A diferencia de lo que
ocurre con los partidos nacionalistas, y siguiendo el mismo patrón de comporta-
miento que el resto de las formaciones políticas de ámbito estatal, a la cuestión na-
cional no se le concede apenas relevancia. En cambio, sí son de cierta importancia
las referencias al desarrollo constitucional, donde se incluyen no sólo las propuestas
de cambio constitucional o desarrollo de la legalidad vigente (reforma del senado,
por ejemplo), sino también las referidas a la lucha antiterrorista. Destacan también
las menciones, generalmente negativas, a la trayectoria de actuación y a los valores
que conforman la identidad del resto de los partidos.
b) PP
Como corresponde a un partido que se presenta como alternativa de gobierno,
la gran mayoría de los enunciados legitimadores esgrimidos por el PP son prescrip-
tivos. Además, y como ya se ha comentado, el PP es el partido menos crítico. Los ti-
pos de argumentos en los que el PP hace más hincapié son los referidos a la situa-
ción económica y los relativos al desarrollo constitucional, fundamentalmente para
mostrar sus propuestas en estos ámbitos. Destacan también las llamadas a la necesi-
dad de que el PP llegue al poder con una mayoría suficientemente amplia como para
garantizar la gobernabilidad (el 68,3 % de los enunciados clasificados como gober-
nabilidad son de tipo prescriptivo-defensa).
c) IU/IC-Els Verds
Es el partido que elabora un discurso más crítico, aunque también en este caso
siga predominando el uso de argumentos de índole defensiva (34,4 % de enuncia-
dos críticos). Centra todavía más que el PSOE/PSC sus mensajes en las áreas de po-
lítica económica y social (37,1 %), aunque su uso sea distinto. Fundamentalmente
se utilizan para defender las líneas de actuación propias y, en segundo lugar, para
criticar las medidas llevadas a cabo por el gobierno del PSOE, en colaboración con
CiU. Es el único partido en el que las referencias a la Unión Europea cuentan con
una presencia significativa; referencias que, a diferencia del resto de partidos, tienen
un cariz crítico, especialmente en relación con el proceso de convergencia económi-
ca acordado en Maastricht. Además, es el único que menciona de forma mínima-
mente destacable los valores posmaterialistas —ecologismo, pacifismo, etc.—
(4 %). Por último, cabe subrayar que es el partido que con mayor frecuencia apela a
la ética en la esfera pública, mientras que es el que menos aborda cuestiones relacio-
nadas con el nacionalismo (sólo un 3,1 % de su discurso).
d) CiU
CiU concede mucha importancia a la temática económica en su discurso elec-
toral (18,4 %), mientras que es el partido que menor atención dirige a las políticas
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 113
sociales (4,6 %). En ambos casos se tratan de referencias que básicamente defien-
den la política económica realizada, en consonancia con su papel de socio del go-
bierno durante la legislatura anterior. Esta colaboración explica a su vez la impor-
tancia de las alusiones a la gobernabilidad (para destacar su contribución a la
gobernabilidad de España). De todas formas, el tema estrella del discurso de CiU
es, como no era menos de esperar, la cuestión nacional, enfatizando particularmen-
te la «defensa de los intereses de Cataluña» (24,1 %). Cabe destacar también las re-
ferencias a la identidad política y el estilo de actuación de los restantes partidos.
Este tipo de referencias se utilizan por igual para criticar a las demás formaciones
políticas que para defender la propia.
e) ERC
Si en los mensajes de CiU el nacionalismo catalán es el criterio legitimador más
utilizado, en el caso de ERC esta importancia es aún mayor: un 33,7 % de los enun-
ciados legitimadores usados por este partido se refieren a esta categoría. Básicamen-
te se trata de referencias a valores y aspiraciones políticas relativas a la «construcción
nacional» que defiende este partido. A mucha distancia, el segundo tipo de enun-
ciados más utilizados son aquellos que conciernen a cuestiones relacionadas con el
Estado del bienestar (12,7 %), con el ánimo de mostrar cuáles son las propuestas de
esta formación en este ámbito (un 76,2 % son argumentos de tipo prescriptivo-
defensa). En cambio, la temática estrictamente económica desempeña un papel
muy marginal en el discurso de ERC.
IV. Observaciones finales
Del análisis efectuado se desprende que las tendencias y diferencias de los dis-
cursos legitimadores desarrollados por los partidos políticos que se presentaron en
la campaña electoral de 1996 en Cataluña pueden explicarse a partir de tres facto-
res: el contextual, el institucional y el ideológico.
1. Factor contextual
El contexto político en el que se produce la campaña nos ayuda a explicar por
qué ciertos temas ocupan un lugar destacado en la agenda electoral, y el diferente
uso de enunciados de defensa o crítica y descriptivos o prescriptivos por parte de
cada partido en sus respectivos mensajes electorales. Concretamente, cabe subrayar
la influencia de dos aspectos contextuales:
a) La actualidad política
En el caso de esta campaña electoral, por ejemplo, las frecuentes referencias a la
ética en la vida pública acaban dotando a esta temática de suficiente entidad como
para ser considerada un tipo específico de criterio legitimador. Sin duda, el uso rei-
terado de este recurso legitimador está relacionado con los escándalos políticos de-
satados con especial virulencia en el periodo previo a las elecciones. Por otro lado,
estas circunstancias también influyen en una mayor utilización de la categoría refe-
AUTONOMIES · 26
114
rida a la identidad y estilo de partido, tanto para criticar el «mal hacer» de los con-
tendientes electorales, como para defender el «buen hacer» propio.
b) Expectativas de éxito electoral
Las encuestas periódicas y los resultados en campañas electorales previas inci-
den, sin duda, en las expectativas de éxito electoral y orientan la planificación estra-
tégica de la campaña de cada partido. En concreto, hemos comprobado cómo en el
caso del PP sus expectativas de triunfo electoral le llevan a variar su estrategia de ata-
que directo hacia el PSOE (desarrollada a lo largo de la legislatura y, sobre todo, en
sus últimos meses), diseñando una campaña basada en la defensa de su proyecto
político. Una campaña, pues, en positivo, para intentar convencer de que estaba
preparado para gobernar.
2. Factor institucional: ubicación del partido en el Gobierno o en la oposición
Este factor nos permite comprender las diferencias de uso de los enunciados
descriptivos y prescriptivos. Esta tendencia se ha manifestado especialmente cuan-
do comparamos los resultados del PSOE/PSC y el primer partido de la oposición,
el PP. Con los datos obtenidos, se observa cómo el partido que se presenta a la ree-
lección utiliza un mayor porcentaje de enunciados descriptivos, con el objeto de
justificar la gestión política realizada, mientras que el primer partido de la oposi-
ción utiliza principalmente enunciados prescriptivos, para presentar sobre todo su
proyecto alternativo de gobierno.
3. Factor ideológico: tipología de partidos
La dimensión ideológica de los partidos nos permite entender por qué algunas
categorías de enunciados son más utilizadas en unos casos que en otros. Así, si aten-
demos a la posición de los partidos en relación con los dos principales cleavages que
estructuran el sistema de partidos en España (izquierda-derecha; territorial o nacio-
nal), aparecen diferencias significativas en el discurso legitimador de los mismos.
a) Cleavage izquierda/derecha: Los partidos ubicados en la izquierda ideológica
tienden a utilizar con más frecuencia los enunciados legitimadores referentes al Es-
tado de bienestar.
b)Cleavage territorial o nacional: Los partidos que se proclaman como nacio-
nalistas catalanes hacen de los enunciados legitimadores vinculados a este tema el
núcleo de su discurso legitimador, mientras que el resto de los partidos, los de ám-
bito estatal, prácticamente ignoran este tema.
Como hemos indicado, el nuestro es uno de los pocos estudios que ha aborda-
do empíricamente la relación entre legitimación y comunicación política, por lo
que presenta, sin duda, lagunas importantes, susceptibles de ser superadas en futu-
ros trabajos. En especial, creemos necesario desarrollar nuevos estudios que com-
plementen y amplíen la información relativa a los factores que influyen en la legiti-
mación política, a efectos de elaborar un modelo explicativo.
Mikel Barreda y Maria Galofré, Legitimación y comunicación política... 115
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