La negociación de la informalidad dentro de la formalidad: suelo y vivienda en las «colonias» de Texas

AutorJane E. Larson
Páginas128-144
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6.1. Introducción
Entre las manifestaciones evidentes del fenómeno amorfo llamado «globa-
lización» se encuentra la intensificación y la difusión de la informalidad en el
interior de muchas de las prácticas económicas y sociales. La informalidad, reco-
nocida y estudiada desde hace largo tiempo en el mundo en vías de desarrollo,
comienza a ser cada vez más visible dentro de los Estados Unidos. La mayoría de
los estudios sobre informalidad en los Estados Unidos se han enfocado en el tra-
bajo, la producción y la distribución de bienes, y ha estudiado, en consecuencia,
las maquilas,* la fabricación de productos individualmente en la casa o los vende-
dores callejeros. En este país, no suele reconocerse la existencia del fenómeno de
la vivienda informal y, ciertamente, la política estatal no la considera un medio
legítimo de producción de vivienda. El trabajo o la vivienda informales no son un
objeto del sistema jurídico formal de los Estados Unidos, ni existe una política
coherente, y mucho menos productiva, en torno a las desviaciones de la norma-
tividad jurídica, que son las que definen la actividad económica informal.
Sin embargo, en la franja fronteriza de Texas entre Estados Unidos y México,
más de medio millón de personas vive en asentamientos de viviendas informales
conocidos regionalmente como «colonias». Aunque existen asentamientos simila-
res a las colonias en otros estados fronterizos estadounidenses, la gran mayoría
de estos asentamientos se encuentran en Texas (LBJ School 1997: 1).1
En la región de Texas, la palabra «colonia» se refiere a una subdivisión del
suelo semirrural con infraviviendas que carecen de alguna o todas las infra-
estructuras físicas básicas y de servicios públicos. En concreto, suelen carecer de
agua potable, alcantarillado o carreteras adecuadas. (Es evidente que estamos
ante un uso local de la palabra «colonia». En español, la palabra significa simple-
Capítulo VI
La negociación de la informalidad
dentro de la formalidad: suelo y vivienda
en las «colonias» de Texas
Jane E. Larson
* Véase nota del traductor en p. 7.
1. Más de la mitad de la larga línea fronteriza que une Estados Unidos con México cruza el
estado de Texas, y es la franja más poblada y económicamente activa, con grandes áreas urba-
nas transfronterizas como Brownsville-Matamoros, McAllen-Reynosa, Laredo-Nuevo Laredo y
El Paso-Ciudad Juárez.
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mente «vecindario».) Este capítulo se ocupa de los asentamientos informales de
vivienda en Texas, aunque existen también miles de esos asentamientos en el lado
mexicano de la frontera (Dwyer 1994). A ambos lados de la frontera, casi todas las
personas se congregan en «ciudades gemelas», áreas urbanas que se encuentran
físicamente contiguas la una a la otra en lados opuestos de la línea fronteriza. Las
colonias rodean estas florecientes ciudades de frontera a ambos lados de esa lí-
nea. Una perspectiva integrada demográfica o sociológica examinaría los asenta-
mientos de viviendas a ambos lados de la frontera, en México y los Estados Uni-
dos, pero puesto que este capítulo se ocupa de la legalidad y de sus relaciones con
la informalidad, los límites que se usan son aquellos de la nación y del Estado,
que delimitan a su vez el alcance del derecho.
Este capítulo describe las «colonias» como asentamientos compuestos por «vi-
viendas informales». La actividad económica informal tiene lugar por fuera del
dominio de la reglamentación estatal y, en particular, por fuera de las leyes labo-
rales, de salud y seguridad sobre uso del suelo y protección medioambiental. En
todo el mundo, existe una forma común de «vivienda informal», que es la ocupa-
ción ilegal de edificios o suelo como práctica ilegal de producción de vivienda. Pero
las colonias en Estados Unidos se describen mejor como extralegales. Cuando los
residentes y los promotores crearon las colonias existentes, la subdivisión y venta
de suelo rural para construcción residencial, sin dotaciones de infraestructura
básica o de acceso a los servicios públicos, era legal y no existían códigos de
edificación que establecieran estándares de vivienda. Sin embargo, cuando el Es-
tado deja de regular las actividades que en otros contextos sí lo están mediante
reglas de conducta establecidas, se desarrolla un tipo de informalidad que se
establece a partir de la no conformidad jurídica y material, más que de la ilegali-
dad (Castells y Portes 1989: 12).
En la región fronteriza de los Estados Unidos, las colonias vinieron de la mano
de la economía globalizada. Es ahí donde el país atisbó, a inicios de los años
ochenta, un modelo de lo que podría llegar a ser el nuevo paradigma económico.
Las políticas de liberalización del comercio y la localización estratégica de la fron-
tera crearon una economía basada en la mano de obra barata, que atrajo nuevos
inmigrantes y alejó a los residentes habituales de la actividad tradicional del tra-
bajo agrícola para ponerlos a trabajar en la fabricación y ensamblaje, el transpor-
te, las tareas de almacenaje y la construcción. En estos mismos años, los Estados
recortaron una y otra vez el gasto social (algo que forma parte del programa polí-
tico de la globalización en el mismo grado que el libre comercio) y terminaron
recortando los programas de subsidios y de vivienda económica que proporciona-
ban los diferentes niveles de la administración. Las familias de trabajadores po-
bres que constituían la fuerza de trabajo y permitían el desarrollo económico de la
frontera debieron satisfacerse por sí mismos esas necesidades, negociándolas en
un mundo de normas sociales privatizadas, y contaban para ello con los recursos
económicos limitados que provenían de sus bajos salarios, además de verse suje-
tos a la inseguridad en relación con sus puestos de trabajo.
El crecimiento explosivo de las colonias en Texas durante esos mismos años
es la prueba de que estos trabajadores recurrieron a la vivienda informal como
una estrategia de supervivencia económica (Larson 2002: 142). Esta dinámica
también explica el círculo más general de actividad económica informal que sur-
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