A modo de resumen

AutorJesús F. Santos Peñalver. Luis Gil Herrera

8. A MODO DE RESUMEN

A lo largo del tema hemos abordado el análisis de la utilidad de los distintos estados financieros y no financieros elaborados por las Administraciones Públicas con el objeto de identificar si los mismos contienen la información necesaria que permita a los usuarios la toma de decisiones.

La naturaleza de la actividad desarrollada por los organismos públicos no permite evaluarlos con un simple indicador como el beneficio o las ganancias por acción. En su lugar, para evaluar la prestación de servicios públicos deben utilizarse estados elaborados bajo criterios económicos, financieros y no financieros, que transmitan si el objetivo de la intervención pública se ha conseguido, esto es, si se ha aumentado la calidad de vida de los ciudadanos.

Dicho objetivo, por tanto, debe reflejarse en las cuentas anuales elaboradas por las Administraciones Públicas, es decir, en la liquidación del presupuesto, el balance, la cuenta del resultado económico-patrimonial y la memoria. Del análisis realizado hasta aquí se desprende que estos estados, aún presentando ciertas limitaciones, contienen información relevante de cara a evaluar distintas parcelas de la actuación económicofinanciera, presupuestaria, así como de la situación patrimonial de los organismos públicos.

El contenido del estado de liquidación del presupuesto y los puntos relativos a éste que se contienen en la memoria, permiten identificar, en grandes líneas, los objetivos fijados por una entidad y su grado de cumplimiento (en términos económicos), la naturaleza y el ámbito de los servicios prestados, la naturaleza de los ingresos percibidos, así como el sometimiento a la legalidad fiscal y presupuestaria.

Aspectos como la viabilidad económico-financiera, la capacidad para prestar y seguir prestando servicios o la equidad intergeneracional, pueden determinarse a través de la información contenida en el balance, la cuenta del resultado económico-financiero y algunos estados financieros contenidos en la memoria, realizando algunos ajustes.

Pero quizá, como señala Anthony (GASB, 1985, pág. 21), los estados financieros no sean más que un punto de partida para poder satisfacer las necesidades de los usuarios. Las necesidades de éstos son frecuentemente tan amplias que ningún conjunto de estados financieros podría satisfacer posiblemente todas las demandas. Este hecho ha provocado que cada vez sean más los Estados que están incorporando información no financiera en las cuentas...

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