Anuario de Derecho Marítimo. Director: Profesor Ignacio Arroyo.
| Autor | Luis Fco. J. Cortés Domínguez |
| Páginas | 1151-1152 |
Page 1151
ANUARIO DE DERECHO MARÍTIMO. Director: profesor Ignacio Arroyo. Volumen I, XXVII + 1, 1984 págs. Editorial Karpos, S. A. Hermosilla, número 21. Madrid, 1981.
Pienso que no me confunde el deseo, si señalo un creciente y saludable dinamismo en el panorama actual de nuestros estudios jurídicos. No es preciso concretar sus causas, bastándonos constatar una de sus manifestaciones más relevantes: la continuada aparición de nuevas publicaciones periódicas.
Una nueva revista constituye un hecho que siempre debe acogerse positivamente, sea porque, respondiendo a nuevas ideas y a distintas personas, suponga planteamientos diferentes; sea porque pretenda dedicar atención preferente a sectores concretos cuyo crecimiento cuantitativo y desarrollo cualitativo aconsejan un tratamiento específico. En el caso del Anuario de Derecho Marítimo, que constituye la última y más llamativa manifestación del fenómeno que comento, la acogida positiva no sólo se debe por responder a aquellas premisas, sino también se impone, ante todo, por las necesidades o carencias que viene a colmar. En efecto, en un país marítimo como España, con rancia tradición en el Derecho marítimo y con una doctrina que, pese a todo, no ha dejado de ocuparse del mismo, supone un acusado contraste el hecho de que. como bien se dice en la presentación del volumen fundacional, «las aportaciones fundamentales de algunos autores, a veces de singular valor y siempre obligada cita de consulta, permanecen dispersas por falta de un cauce común; los estudios universitarios en esta área se repliegan a medida que avanza el contenido de las disciplinas generales en que se integran; las sentencias de los tribunales invocan con frecuencia normas civiles, reconduciendo el supuesto de hecho al Derecho general y arrinconando así las razones de la especialidad; la deseada reforma del Derecho positivo, reclamada desde las más variadas instancias, se sigue haciendo esperar; los profesionales en ejercicio tropiezan con el obstáculo de la información parca y desactualizada, pues no existen fuentes especializadas de consulta, y el lenguaje en fin, se empobrece, porque se recurre, cómodamente quizá, a términos giros y expresiones extranjeras con el consiguiente descuido del idioma».
Es ésta la situación ciertamente precaria, que el Anuario de Derecho Marítimo quiere afrontar, partiendo de unos presupuestos expresamente declarados y que, pienso, encontrarán una generalizada aceptación. En primer término...
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