Lectura ético-teológica del desarrollo como expansión de la libertad con respecto al problema de la pobreza
| Autor | Jairo Roa |
| Páginas | 249-277 |
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En el capítulo anterior se analizaron las implicaciones de una lectura ético-teológica del desarrollo como expansión de la libertad. El hecho de retomar el tema de la libertad, le ha permitido a la teología recuperar la problemática del desarrollo en la actualidad. Este tema se ha retomado con base en la apertura que el marco antropológico brinda para la discusión sobre el desarrollo y desde las tradiciones teológicas sobre la libertad. En este capítulo se busca analizar un problema específico como la pobreza, a partir de esta propuesta de lectura ético-teológica del desarrollo como expansión de la libertad.
La pobreza ha sido una de las principales preocupaciones para la teología latinoamericana, desde principios de los años sesenta. Esta preocupación ha estado en el centro de interés de la teología de la liberación ya en sus inicios. Desde otro contexto, la pobreza también ha sido uno de los ejes centrales en la obra de Amartya Sen; puesto que gran parte de sus investigaciones y de sus escritos están dedicados al tema de la pobreza y de las hambrunas en diferentes partes del mundo. Actualmente, el tema de la pobreza continúa siendo uno de los problemas más graves que afronta América Latina. Razón por la cual, la problemática de la pobreza se constituye en un punto fundamental para realizar una lectura ético-teológica Page 250 del desarrollo en la actualidad. La primera parte del capítulo estará dedicada a algunos datos sobre la pobreza que permitan ubicar el problema dentro del contexto de América Latina. En la segunda parte se describirán las concepciones de la pobreza en algunos de los teólogos de la liberación que representan distintos momentos de la misma. Finalmente, se analizarán los aportes de Peter Townsend sobre la pobreza relativa y, sobre la pobreza como privación de capacidades de Amartya Sen. Este recorrido permitirá identificar los aportes de Amartya Sen a un problema concreto como es el caso de la pobreza.
De acuerdo al informe preliminar sobre la situación económica de América Latina de la CEPAL, la economía creció en un 1.5% en América Latina, mientras que el PIB per capita se mantuvo estancado en 1.5% por debajo del nivel de 1997. En el 2003 se encuentran 20 millones más de pobres que en 1997377. La tasa de desempleo ha crecido dos puntos durante este período, llegando al 10.7%; se estima que 700 mil personas se sumarán en este año al contingente de desempleados urbanos que hoy alcanza la cifra de 16.7 millones. El deterioro de la cantidad de empleo va unido al deterioro de las condiciones de los obreros y de los empleados y al aumento considerable de la economía informal. Para la CEPAL, de continuar esta trayectoria de escaso crecimiento económico y de mercado laboral, no es de extrañar que aumente la pobreza y la indigencia en América Latina. La existencia de 227 millones de personas que viven por debajo de la línea de pobreza, equivalentes al 44% de la población, revela la gravedad y complejidad del problema.
La situación económica y el aumento de la pobreza van unidos al deterioro de la salud y la nutrición de la población. Page 251
Para la Organización Panamericana de la Salud, 218 millones de seres humanos carecen de protección en salud; 100 millones no cuenta con los servicios básicos de salud y 82 millones de niñas y niños no tienen acceso a los programas de inmunización. Estos datos forman parte de las 30 mil niñas y niños que mueren diariamente por causas relacionadas con la pobreza y de las 500 mil mujeres que mueren anualmente en el mundo al dar a luz en los países en desarrollo378. El panorama de América Latina no es tan alentador si se tiene en cuenta el aumento considerable de enfermedades asociadas con la alimentación y la nutrición. Hay un descenso en el consumo de calorías per cápita promedio en América Latina. Además hay un aumento de las personas que no tienen protección social y millones de personas están sin servicios básicos de salud.
Con respecto a la educación, en América Latina hubo un aumento considerable del número de estudiantes matriculados en primaria, secundaria y en la universidad. El analfabetismo de la población fue reducido de un 34% en 1960 a un 13% en 1995379. Sin embargo, los logros no son tan alentadores si se tiene en cuenta el nivel de deserción y repetición escolar, el cual está en 5.2 años promedio por habitante. Eso significa que el latinoamericano promedio escasamente ha logrado la formación primaria. Por otro lado, los logros a nivel de cobertura son fuertemente contrastados con la calidad de la educación. Al respecto el economista argentino Bernardo Kliksberg dice: "América Latina ofrece indicadores que se están distanciando de los estándares del mundo desarrollado, y de grupos de países del mundo en desarrollo, como los del Sudeste Asiático. En las mediciones internacionales como la Third International Math & Science Study (TMSS), que compara los rendimientos educativos en ciencias y matemáticas de más de medio millón de niños de 13 años de edad, los pocos países latinoamericanos Page 252 participantes ocuparon algunos de los últimos puestos entre los más de 40 que fueron medidos380".
El agravamiento del problema de la pobreza ha llevado a los distintos organismos internacionales a promover un compromiso decisivo en la lucha contra ella. Desde las Naciones Unidas, en el año 2000, se proclamó la Declaración del Milenio381, que reafirma la dignidad y el valor de la persona humana, el respeto a los derechos humanos y a la igualdad de hombres y mujeres, y el compromiso de lograr el progreso social, determinado por mejores condiciones de vida, sin miseria ni temor. La Declaración del Milenio busca asegurar que las políticas y los planes nacionales de desarrollo luchen por la erradicación de la pobreza, además de establecer mecanismos institucionales para eliminar la persistente discriminación contra la mujer, promoviendo la equidad de género y el ejercicio de sus derechos.
No es la intención en este punto señalar los alcances y limitaciones de los datos de la CEPAL382, ni de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, sino enfatizar la importancia que representa la pobreza para la reflexión teológica. En este sentido, tanto los datos de la CEPAL, como los aportes de Bernardo Kliksberg y el documento de la presidencia argentina permiten ubicar las discusiones que se analizarán a continuación. Page 253
Como se ha mencionado anteriormente, los pobres constituyen la razón de ser de exigencia ética expresada por la teología de la liberación. Es precisamente el clamor de los pobres del continente el que encuentra eco dentro de algunos de los teólogos latinoamericanos. Desde sus inicios la teología de la liberación señaló la importancia del pobre como sujeto de la reflexión teológica y la opción preferencial por los pobres como compromiso de la iglesia en América Latina. La preocupación por la pobreza en la actualidad no puede desconocer los aportes de la teología de la liberación al respecto. Sin embargo, para que la opción por los pobres no pierda su contenido efectivo y no quede reducida a una fórmula sin aplicación real, como ha planteado Joseph Comblin383, es necesario preguntarse por la conceptualización de la pobreza en la teología de la liberación. ¿Cuál ha sido la concepción de la pobreza que ha predominado dentro de la teología de la liberación? ¿Cuáles son los alcances y limitaciones de esta concepción? Y ¿Hasta dónde esta concepción sigue siendo válida para la teología en la actualidad en América Latina? En este punto se considerarán los aportes de Gustavo Gutiérrez, Leonardo y Clodovis Boff y Jung Mo Sung, que representan distintos momentos de la teología de la liberación.
El tema de la pobreza es un tema central en el pensamiento de Gustavo Gutiérrez. Desde finales de los años sesenta este autor reconocía que el tema de la pobreza había sido muy poco Page 254 trabajado por la teología. Refiriéndose a la necesidad de una concepción de la pobreza, Gutiérrez afirmaba: "Todo esto lleva a deslizarse en un terreno movedizo, del que se busca salir más por intuiciones que por ideas claras y bien formuladas"384. Puesto que la pobreza se ha prestado a varias ambigüedades, se hace necesario examinar las fuentes de tal ambigüedad. La primera ambigüedad es la que concibe la pobreza en términos de bienes materiales. Se es pobre en la medida que no se cuenta con los bienes materiales económicos necesarios para una vida digna. Una segunda ambigüedad, encontrada por Gutiérrez, tiene que ver con la concepción de la pobreza espiritual, que es vista como una simple actitud interior de desprendimiento frente a los bienes materiales385. Estas ambigüedades con respecto a la pobreza no han permitido clarificar el problema y por el contrario han llevado a caminar por un sendero inseguro y fácil de extraviar386.
Ante las dificultades en la clarificación de la problemática de la pobreza, Gustavo Gutiérrez encuentra en la tradición bíblica algunos aspectos de la pobreza que le permiten una mejor comprensión de la misma. A partir del texto bíblico descubre cómo la pobreza es un tema central tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. La...
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