Introducción

AutorGeofredo Angulo López
Cargo del AutorDoctor en derechos fundamentales por la Universidad de Jaén, Andalucía (España)
Páginas21-31

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El tema de los Derechos Humanos constituye en la actualidad un gran fenómeno social, político, jurídico y cultural actuando como código elemental de una ética universalmente aceptada, la ética del respeto a la dignidad de la persona humana. Los derechos humanos se estudian desde distintas perspectivas y, han adquirido una conciencia cada día más viva, no sólo de la existencia sino de la necesidad de respeto que implica cada uno de ellos. En los últimos años, al menos en México, se ha venido consolidando la tendencia, tanto de la sociedad civil organizada, como del ciudadano común víctima de la marginación y la violencia, a expresar sus inconformidades y sus voces de protesta con el lenguaje de los Derechos Humanos, lo que constituye sin lugar a dudas una prueba de que la expresión «Derechos Humanos» ha logrado afianzarse en la conciencia de la sociedad mexicana. Sin embargo, aún no hemos asegurado instituciones y prácticas que garanticen efectivamente el Estado de Derecho y el acceso de todas las personas a la justicia. En esta tarea los Derechos Humanos en todas sus dimensiones son esenciales. Por eso, más que cualquier otro, el objetivo de la presente obra, es el de contribuir a ese lenguaje compartido, para sumarse a las otras contribuciones que son esenciales en momentos en que la protección y promoción de los derechos humanos requiere de las aportaciones de todos.

En este sentido, a través de este estudio, examinamos parte de la obra científica de varios autores, concretamente, sus aportes a la teoría de los Derechos Humanos, para proponer los elementos teóricos que ayuden a la construcción de un concepto lo más coherente con las exigencias actuales de nuestro tiempo. El análisis se centra en cuestio-

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nes filosófico-lingüísticas de los orígenes, las razones del significado y utilización de una expresión que comúnmente es empleada en el lenguaje jurídico, político y social moderno, la de «Derechos Humanos». El propósito es, en definitiva, facilitar los instrumentos que permitan esclarecer ciertas confusiones que se han venido dando y que contribuyen a limitar el interés y beneficio que de los Derechos Humanos puede lograrse.

Por lo tanto, la obra que a continuación se expone contempla tres aspectos fundamentales, en la Primera Parte, una introducción al Concepto y Fundamento de los Derechos Humanos. En el capítulo I, se toca simultáneamente, el origen y definición general del punto central del trabajo, es decir, los Derechos Humanos como concepto y como razón, partiendo desde su naturaleza ambigua, las causas de indeterminación, vaguedad e imprecisión conceptual. En el Segundo Capítulo abordamos el carácter multidimensional de los Derechos Humanos que se desarrolla desde su aspecto central o punto de partida, generalmente reconocido, que es la custodia de la dignidad humana como valor relevante para orientar el contenido de todo ordenamiento jurídico, concibiéndose estos derechos como demandas reconocidas universal-mente que aspiran a ser contempladas por el mundo jurídico y político. Así proponemos un concepto provisional de Derechos Humanos cuyo contenido mínimo es el elemento de legitimación para todos los sistemas de gobierno, tanto de los de corte liberal, como los de orientación social, que tienen por objetivo la protección jurídica del individuo y que son exigencias éticas de dignidad. Se intenta de esta mane-ra establecer una definición de Derechos Humanos que recoja, por un lado su concepto básico, el de ser un resguardo de las prerrogativas mínimas para alcanzar una vida digna, pero por otra parte que implique también en la definición una consecuencia indispensable en la regulación positiva, es decir, que esta se instituya como una forma de legitimación del poder público, por eso el carácter multidimensional de los Derechos Humanos no son una esencia congelada de la dignidad de la persona, son un elemento activo de la vida pública. A nuestro entender, es a partir de este concepto provisional, desde el que hay que valorar la adecuación de las distintas denominaciones conceptuales dadas a los derechos.

Analizamos los valores en una doble dimensión: como elementos básicos de nuestra cultura jurídica actual y como criterios de modera-

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ción del derecho y del poder de la modernidad. A estos efectos, principalmente la obra del profesor Peces-Barba, nos sirvió de guía inestimable, cuya tesis es aplicable a todo el constitucionalismo moderno, en el sentido de que sostiene que los valores incorporan contenidos materiales a las constituciones, asegurando en este sentido la unidad del ordenamiento, y considera que legitiman al Derecho, complementando la finalidad integradora de la Constitución. En este sentido para el profesor Peces-Barba la Dignidad humana se constituye en el fundamento de la ética pública y raíz propia del paradigma político y jurídico de la modernidad, la cual está conformada por cuatro valores: la seguridad jurídica, la libertad, la igualdad y, la solidaridad. El capítulo tercero sitúa el análisis de los Derechos Humanos como derechos morales, pasando por un examen previo de otras denominaciones que se le han otorgado ya como derechos naturales, derechos del hombre, derechos públicos subjetivos, derechos fundamentales, garantías individuales; (aquí abro un paréntesis para comentar que en México como una respuesta a una larga insistencia de múltiples actores, en el mes de junio de 2011 se publicó una reforma constitucional, en la que se introduce el concepto de Derechos Humanos como eje central de la articulación estatal, sustituyendo la figura arcaica de las «garantías individuales», lo...

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