-
INTRODUCCIÓN
Las cuestiones relativas al principio non bis in idem son complejas y rodeadas de polémica. Aceptar, de forma abstracta que nadie debe ser juzgado o condenado dos veces por la misma infracción, es en principio fácil, pero, a partir de ahí cuando se pretende la concreción, comienzan a aparecer matizaciones y teorías que enmarañan la cuestión hasta límites insospechados.
Lo que podría no ser especialmente complejo, se dificulta y se buscan argumentos con los que, en definitiva, aquella conceptuación, clara y sencilla, no se cumple. El «si, pero …» es esencialmente repetido y, merced a dichos «peros» la persona es, finalmente, condenada dos veces por el mismo hecho o, una misma circunstancia del hecho es tomada dos veces en cuenta.
Con esto queremos decir que, en todo...