Innovación y política agrícola común: el mercado europeo de los edulcorantes

AutorAnette Schmitt
CargoVDI-TZ

Análisis

Azúcar

Los efectos de una ingesta elevada de azúcar sobre el estado de salud de la población son objeto de un gran debate. La justificación de las recomendaciones de eliminar el azúcar de la dieta requiere una evidencia clara de que la ingesta de azúcar es perjudicial para la salud. También debería probarse que la sustitución del azúcar por otra sustancia, tal como los edulcorantes potentes, no es igual o más perjudicial. Sin embargo, el papel específico del azúcar y de los edulcorantes en la etiología de varias enfermedades ha sido tema de enorme consideración por muchas organizaciones nacionales de política alimentaria. Estas han sido unánimes en concluir que, mientras el azúcar contribuye a una ingesta excesiva de energía en el obeso, junto con las grasas de la dieta, no es causa específica o independiente de ninguna enfermedad, excepto quizá la caries dental.

No obstante, numerosos organismos han hecho recomendaciones en relación con el consumo de azúcar y la salud. La mayoría aboga por una reducción en el consumo de azúcar hasta un 10% o menos de la ingesta calórica total y aunque muchos proponen directrices cuantitativas, pocos ofrecen propuestas constructivas para su implantación. En términos del rendimiento del mercado azucarero europeo actual, la reducción recomendada representaría alrededor del 30% del consumo humano de azúcar (3,5 millones de toneladas de azúcar blanco).

Mientras que la demanda de azúcar ha caído sólo ligeramente, el consumo de edulcorantes fuertes ha aumentado mucho, principalmente como consumo indirecto. Esto implica que se han consumido adicionalmente productos sin azúcar o con poca azúcar, pero no a expensas de la ingesta usual de azúcar.

La estructura del consumo de azúcar se ha desplazado considerablemente hacia el consumo indirecto ( esto es, como ingrediente alimentario) y actualmente representa unos dos tercios del consumo total. Este creciente consumo indirecto de azúcar puede explicarse como una demanda cada vez mayor de alimentos y bebidas endulzados más que de azúcar como edulcorante "de mesa". Las ventas de azúcar a la industria alimentaria fueron un 6,7% más bajas en el primer trimestre de la campaña 1993/1994 en comparación con el año anterior. Al mismo tiempo, las cuotas de mercado de los edulcorantes fuertes aumentaron sustancialmente.

Los edulcorantes potentes han sido un producto familiar desde hace casi 100 años. Se han identificado como sucedáneos no calóricos del azúcar con un poder endulzante ( o intensidad endulzante) que es mucho mayor que el del azúcar. Por definición, el término "potente" implica que proporcionan un dulzor 10-2.000 veces superior al del azúcar, por lo que su consumo está limitado a cantidades muy pequeñas. Los edulcorantes potentes son, por definición, "aditivos alimentarios", en oposición a "alimentos", y están clasificados como tales en el código industrial.

Muy a menudo los compradores se han visto espantados por noticias que sugieren que los edulcorantes potentes son cancerígenos2. Esta aprensión ha tenido su origen en el resultado de ensayos en los que las ratas sufrían cáncer de vejiga después de la ingestión de dosis excesivas de edulcorantes potentes, aunque los estudios en humanos a gran escala no han confirmado este hallazgo.

La Directiva de Edulcorantes de la UE permite la utilización en Europa de los edulcorantes acesulfamo, aspartamo, ciclamato, sacarina, taumatina, neohesperidina y los polioles sorbitol, manitol, isomalt, maltitol, lactitol, xilitol.

Tabla 1: Edulcorantes potentes permitidos en la UE

borderColorLight=#e8e8e8 border=1>

size=2>Nombre

Número de

aditivo
alimentario de la UE

Valor

calórico

Acesulfamo

K

size=2>E950

size=2>0

size=2>Aspartamo

size=2>E951

size=2>4

size=2>Sacarina

size=2>E954

size=2>0

size=2>Ciclamato

size=2>E952

size=2>0

size=2>Taumatina

size=2>E957

size=2>4

size=2>Neohesperidina DC

size=2>E959

size=2>0

En 1987, el Comité Científico para Alimentos (SCF) de la UE definió un límite superior de ingesta diaria de sacarina de 2,5 mg/kg/peso corporal, para el ciclamato de 11mg/kg/peso corporal, para el aspartamo de 4 mg/kg/peso corporal, para el acesulfamo K de 9 mg/kg/peso corporal, y para NHDC de 5 mg/kg/peso corporal.

La Directiva de Edulcorantes es también una definición de seguridad alimentaria y puede ser uno de los mejores ejemplos de cómo la cantidad de riesgo tolerado por la sociedad se decide por un proceso político. Solamente se pueden emplear los edulcorantes reseñados en el apéndice de la Directiva propuesta y sólo a niveles predeterminados en productos alimenticios especificados. Se prohibe, excepto bajo circunstancias especiales, el uso de edulcorantes en alimentos para uso nutricional específico de bebés y niños pequeños. También se estipulan los requisitos específicos de etiquetado de los edulcorantes en los productos alimenticios y para el uso directo por los consumidores.

Capacidad de sustitución de los edulcorantes

La industria alimentaria hace uso del azúcar no sólo para su función endulzante: también sirve para fines tecnológicos. Por ejemplo, ayuda a preservar los alimentos, aumenta el punto de ebullición y reduce el punto de congelación, actúa como agente voluminizante, sirve para potenciar el sabor, propiedades que son de importancia considerable para muchos tipos de productos alimenticios.

La sustitución del azúcar está por tanto determinada en buena parte por la conveniencia técnica de un edulcorante. Los edulcorantes potentes se usan especialmente en la producción de bebidas no alcohólicas donde la simple adición de más agua compensa el volumen de azúcar perdido.

La posibilidad técnica de sustitución del azúcar en alimentos y bebidas se calcula que es:

100% para las bebidas no alcohólicas, helado, yogur, dulces congelados, postres de gelatina, conservas de fruta, encurtidos, judías secas, salsas y productos cárnicos;

50% para los productos enlatados

10% para confitería con azúcar,

y 5% para galletas, chocolate, rellenos de tartas y mermeladas.

Basándose en esta evaluación, una sustitución del azúcar equivalente a unos 3 millones de toneladas de azúcar blanco (aproximadamente 25 por ciento del consumo total de azúcar en 1992/1993), es factible técnicamente.

La industria del azúcar consigue grandes ventajas comerciales cuando sustituye el azúcar por edulcorantes potentes en la producción alimentaria. En la industria de las bebidas, por ejemplo, la sustitución del azúcar por edulcorantes potentes puede dar lugar a un ahorro de hasta el 75% de los costes de inversión.

Una de las ventajas comerciales más importantes de la utilización de edulcorantes potentes en la producción alimentaria está relacionada con el hecho de que su combinación (mezcla) proporciona a menudo un dulzor total superior al que se consigue con la suma del dulzor proporcionado por cada elemento individualmente. Este efecto sinérgico permite menores niveles de dosificación de los edulcorantes y, según la industria alimentaria, un descenso en el coste de los edulcorantes en la fabricación de bebidas no alcohólicas de hasta el 40 por ciento (Tuley, 1991). Además, la mezcla puede ayudar a superar problemas de inestabilidad del dulzor y conducir a mejoras del sabor. También se sostiene, principalmente por los que promueven la práctica, que la mezcla ofrece beneficios sanitarios a los consumidores al reducir su exposición a un único edulcorante.

Panorama de la sustitución bajo los acuerdos de la CAP

Los niveles de producción de azúcar en la UE permanecen sólidamente por encima del consumo. Esto es parcialmente atribuible a la política azucarera de la UE que garantiza a los productores mercados seguros y los protege de la competencia extranjera por medio de impuestos a la importación.

La Política Agrícola Común (CAP) sobre el Azúcar (Régimen del Azúcar) incluye varias garantías de producción mediante precios mínimos, cuotas de producción, sistemas de restitución para importaciones y exportaciones, y acceso al mercado, medidas que han mantenido generalmente los precios del azúcar europeo por encima del precio del mercado mundial.

Figura 1: Precio de Intervención de la UE y precio del Mercado Mundial

(Gráfico Omitido)

(Bolsa de París: 100 kg de azúcar blanco)

El sector de producción del azúcar fabrica sólo el 2,2 por ciento de la producción agrícola total europea. Las asignaciones presupuestarias para el excedente de azúcar, sin embargo, suponen el 6 por ciento aproximadamente de los Fondos de Garantía de la UE. La carga del aumento de los excedentes de azúcar (que supone como promedio alrededor de 400 ECU por tonelada) tiene que ser soportada por los consumidores europeos que financian el excedente de azúcar a través de precios al por menor mayores y de su contribución al presupuesto de la UE.

La implantación de recomendaciones nutricionales sobre la ingesta de azúcar reduciría el consumo en la UE en un 30%. Dadas las distintas reglamentaciones sobre cantidad y precios bajo el Régimen del Azúcar, la carga presupuestaria para este desarrollo sería de 2,7 mil millones de ECU, más una carga de exportación para el excedente de azúcar adicional de aproximadamente 2,1 mil millones de ECU (Schmidt, 1992).

Esta situación representaría una caída en la facturación anual de los productores de azúcar desde los 12,4 mil millones de ECU actuales hasta alrededor de 7,4 mil millones de ECU, distribuidos en la proporción de 60:40 entre los cultivadores (4,4 mil millones de ECU) y los fabricantes (3 mil millones de ECU). Basados en esta situación de ingresos, los cultivadores estarían un 13-16 por ciento por debajo de su punto crítico, por lo tanto los ingresos no cubrirían los costes fijos y variables de la producción de la remolacha azucarera11. Con esta pérdida del 33 por ciento en los ingresos actuales de los cultivadores, la producción de remolacha azucarera comparada con un uso alternativo de la tierra (en este caso, la producción de cereales) ya no sería competitiva, y serían necesarios más subsidios de la UE para mantener a los cultivadores en sus tierras.

Las reacciones a este desarrollo del mercado podrían ser más fuertes en el sur de Europa (Grecia, Italia, España, Portugal), el sur de Francia, Baviera (Alemania) e Irlanda, en comparación con las reacciones en el norte de Europa (Alemania, norte de Francia, Bélgica, Dinamarca, Holanda, el Reino Unido).12

Asumiendo una tendencia lineal de producción y de consumo, la producción excedente podría ser aproximadamente el 70 por ciento para el año 2000, una situación aún peor que la que aquí se ha discutido.

Bajo el supuesto de ceteris paribus y de una tendencia lineal, el consumo de edulcorantes potentes13 podría fijarse en el año 2000 en aproximadamente el equivalente de 1,8 millones de toneladas de azúcar blanco, es decir, aproximadamente el 19 por ciento de todos los edulcorantes para consumo humano dentro de la UE. Otras investigaciones confirman este aserto. Nótese que este valor ignora la sustitución técnicamente posible (¡aproximadamente 30 por ciento por término medio!)

Figura 2: Tendencias del consumo de edulcorantes en la UE

(Gráfico Omitido)

Basándose en las recientes tendencias del consumo en la UE, debería desarrollarse una perspectiva más completa del cambio agrícola, ya que resulta cuestionable que el mercado del azúcar pueda persistir a largo plazo bajo tales factores conflictivos.

Conclusiones

Los cambios dietéticos, ya sea accionados por el consumidor o como resultado de una intervención gubernamental, entrañan inevitablemente efectos de redistribución en términos de asignación de recursos dentro de la sociedad. Los fabricantes de productos alimenticios sin azúcar han acogido las directrices dietéticas con gran entusiasmo, mientras que los productores de azúcar han intentado defender su posición, en ocasiones cuestionando los informes oficiales.

La industria alimentaria es capaz de sustituir en los productos alimenticios hasta el equivalente a 3 millones de toneladas de azúcar blanco por edulcorantes potentes, lo que representaría una cuota de mercado de un 30 por ciento. Ya en 1992/1993, cantidades de aproximadamente el equivalente a 1,3 millones de toneladas de azúcar encontraron salida en los mercados alimentarios europeos.

Figura 3: Presión sobre el mercado azucarero de la UE

(Gráfico Omitido)

La tendencia del consumo de edulcorantes indica estancamiento en la demanda de azúcar y fuerte crecimiento en el sector de edulcorantes potentes en todos los países europeos. Aunque los precios de venta al por menor de los productos sin azúcar son generalmente más altos que los de los mismos productos con azúcar, los edulcorantes potentes han aumentado su cuota de mercado.

Sin embargo, lejos de ser un sustituto directo del azúcar, parece que los edulcorantes potentes también constituyen una categoría de demanda separada.

El Régimen del Azúcar está enviando señales a los productores nacionales que no reflejan cambios en los mercados mundiales. En el año comercial 1992/1993, la producción fue el 34% por encima del consumo nacional.

La implantación de recomendaciones dietéticas sobre la ingesta de azúcar implicaría una transferencia monetaria del consumidor al productor a través del efecto de redistribución a expensas de los contribuyentes gravados con la financiación de las inversiones presupuestarias.

La experiencia de mercado del sector de los edulcorantes puede abrir el camino para el desarrollo de otros sustitutos alimentarios.

El hecho de que el mercado actual de alimentos bajos en grasa ha aumentado mucho rápidamente en la UE podría dar una indicación sobre las lecciones a aprender de la experiencia del sector de los edulcorantes.

La industria alimentaria está desarrollando nuevas líneas de producto para satisfacer las necesidades de sustitutos de la grasa, ingredientes naturales, agentes ligantes del agua, ingredientes con pocas calorías, agentes voluminizadores y productos biológicos.

Cualquiera que sea la auténtica naturaleza de una dieta óptima nutricionalmente, una política de nutrición debe tener en cuenta explícitamente lo que se puede conseguir en términos de los hábitos de comida de la población y del entorno económico de los mercados. Por ejemplo, si hay evidencia absoluta de que el consumo de un alimento determinado es probablemente perjudicial para la salud, los responsables de la política europeos tienen el deber de situar las cuestiones nutricionales en el primer puesto de la lista de objetivos de la política de agricultura, nutrición y alimentos.

Además, debe prestarse especial atención al papel de los grupos interesados en asegurar un suministro adecuado de alimentos. Frecuentemente se sugiere que los intereses de la cadena de suministro alimentario (agricultores, fabricantes de alimentos, vendedores minoristas), dominan sobre los intereses sanitarios y del consumidor.

Una comunicación más estrecha entre los expertos dietéticos y los productores de alimentos, los responsables de la política agrícola y alimentaria y los consumidores, así como una mejor comprensión de las conexiones intersectoriales en la cadena alimentaria podría mejorar la calidad y fiabilidad de la información dietética.

--------------------------------------------------------------------------------

Palabras clave

Directiva de Edulcorantes de la UE, edulcorantes, política sanitaria, perspectivas nutricionales, Régimen del Azúcar de la UE

Notas y Referencias

Netherlands Nutrition Council, 1973; US Congress. Committee on Nutrition and Human Needs. Washington D.C., 1977; US Department of Health, Education and Welfare. The Surgeon General's Report. Washington D.C., 1979; US National Research Council. Food and Nutrition Board. Washington D.C., 1980; Swedish National Food Administration. Uppsala, 1981; Norwegian Royal Ministry of Health and Social Affairs. Oslo, 1981/82; New Zealand Nutrition Advisory Committee, 1982; Canada's Department of National Health and Welfare. Ontario, 1982; Public Health Bureau and the Japanese Dietetic Association. Tokyo, 1983; UK National Advisory Committee for Nutrition Education. Londres, 1983; Netherlands Food and Nutrition Council, La Haya, 1983/84; Food Advisory Committee of the Irish Department of Health. Dublin, 1984; Commonwealth Department of Health. Canberra, 1984; US Department of Agriculture/Department of Health and Human Services. Washington D.C, 1985; Swedish Expert Group for Diet and Health, Uppsala, 1985; German Society of Nutrition. Frankfurt, 1985; World Health Organisation, 1986; Netherlands Nutrition Board, 1986; Commonwealth Department of Health. Canberra, 1987; US National Research Council, Washington D.C, 1989; UK Department of Health. Londres, 1989; World Health Organisation. Regional Office for Europe, 1989; US Department of Agriculture/Department of Health and Human Services. Washington D.C, 1990; UK Committee on Medical Aspects of Food Policy (COMA. Londres, 1991; Commission of the European Union. Bruselas, 1994.

Oser, et al., 1968, y Price, et al. 1970.

Lorke, 1991, 1989; Inhorn/Meisner, 1970; Armstrong/Doll, 1975;

Burbank/Fraumeni, 1970 (CEC: OJ, 1991b).

Aspartame and Thaumatine están compuestos por dos aminoácidos naturales que aportan 4 kcal/g a la dieta. Sin embargo, a causa de su elevado poder endulante y de la pequeñisima cantidad de edulcorante requerida, la cantidad calórica relativa del aspartamo y de la taumatina se aproxima a cero.

El organismo SCF se fundó en 1974 para ayudar a la Comisión en las cuestiones relativas a la salud en el sector alimentario. Las evaluaciones sobre los límites de ingesta para un consumo seguro de edulorantes, preparadas por el SCF están sobre todo basadas en informes realizados a nivel nacional.

El límite máximo actual de ingesta de sacarina es 5 mg/día/kg/peso corporal (en forma de ácido)

Para una persona de 70 kg de peso esto corresponde, por ejemplo, a 21 comprimidos de la combinación ciclamato/sacarina.

SCF 1989, Consejo de la UE, 1993; CEU: OJ, 1994.

Heasman, 1989

Fuente: Banco Mundial, 1990; EEC: CAP, 1994.

Supuesto un punto crítico entre 5,08 and 5,28 miles de millones de ECU.

CEC: Grupo Mac, 1992; Europa en Cifras, 1992.

Incluyendo sacarina, ciclamato, aspartamo, acesulfamo.

Young, 1989.

Por ejemplo: "N"Oil, Instant "N"Oil, Maltrin M040, Paselli SA2, Polydextrose, Sta-Slim, Snowflake 01906, NutriFat C, NutriFat PC, Simplesse, Crema de Tapioca, Yogalait, Avicel, Trailblazer, Instant NutriFat PC, NutriFat PC Supreme, Olestra, poliésteres de Sacarosa, proteina Finesse Ultrafiltered, Polisiloxanos, Oatrim, Tatca, EPG, Prolestra, Olestrin, Colestra, y muchos otros.

Agradecimientos

El autor agradece enormemente los provechosos comentarios y contribuciones del Dr. M. Rader, ITAS y del Dr. Francisco Girio, INETI

Contactos

Anette Schmitt, VDI-TZ,

Tel: +49 211 62 14 491, fax: +49 211 62 14 484, correo electrónico: schmitt@vdi-de

Sobre el autor

--------------------------------------------------------------------------------

Anette Schmitt es Economista y Consultora sobre Salud en el Centro de Tecnología VDI en Düsseldorf (Alemania). Es licenciada en Ciencias Políticas y Macroeconomía (Dipl.-rer.pol.) por la Universidad de Frankfurt am Main, 1988, y doctora en Economía Sanitaria (Dr.rer.nat.) por la Universidad Católica de Lovaina, Bélgica, 1995.

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR