La herencia de Bingo

AutorCarmen Pérez-Pozo Toledano
Páginas21-26
1
La herencia de Bingo
Fallecí un 26 de agosto con todos mis asuntos huma-
nos resueltos. Y digo humanos porque, mientras
buscaba casa en la eternidad, me angustiaba el futuro
de Bingo, mi fiel perrito Fox terrier.
Tras dos matrimonios fracasados, un sinfín de
peleas familiares y varias traiciones de amigos, había
hecho mía aquella frase del filósofo cínico Diógenes
de Sínope: «Cuanto más conozco a la gente, más
quiero a mi perro».
Tal vez por haber nacido rica, a lo largo de mis
85 años de existencia he visto cómo las personas lle-
gaban a mi vida para buscar favores o directamente
mi dinero. En cuanto veían que no sacarían nada,

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR