González Pérez, J.: La ética en la Administración pública, Cuadernos Civitas, Madrid, 1996.
| Autor | José María Chico y Ortiz |
| Páginas | 1699-1702 |
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GONZÁLEZ PÉREZ, J.: La ética en la Administración pública, Cuadernos Civitas, Madrid, 1996.
Cuando los juristas nos llaman la atención a través de sus escritos de que existe una especie de «crisis de valores morales», creo que hay que ponerse en guardia con un doble fin: tratar de evitar el perjuicio que de ello puede producirnos y hacerse fuerte para rechazar el contagio. ¿Por quién doblan las campanas? Las campanas tocan a muerto porque la moral ha desaparecido en esta etapa histórica en que nos ha tocado vivir. Urge cambiar el lento doblar de las campanas y hacer que repiquen en signo de retorno a la moralidad
Hace poco recensionaba en estas mismas páginas el trabajo de otro gran jurista y administrativista. García de EnterrIa. Ahora Jesús González Pérez golpea sobre el concepto de la ética en la Administración pública. A estos dos trabajos -que se me antojan punteros- se unen infinidad de artículos y comentarios sobre el tema. Personalmente me ha llamado mucho la atención la relación que la «ética» tiene con la «estética», pues es muy frecuente ver gente que antepone lo segundo a lo primero, aunque la crisis de la «estética» también se nota. Hace poco, hablando de ello, José Antonio Marina titulaba uno de sus artículos: de la «Glorificación de la zafiedad». Por su parte, Antonio Gala decía que «lo ético siempre ha estado muy mezclado con lo estético» en su vida. Menos mal que a la muerte del poeta, traductor y catedrático José María Valverde, alguien haya dicho que «supo unir la ética con la estética».
El trabajo de González Pérez es un estudio que inicialmente fue ponencia y luego conferencia y ahora se ha convertido en libro. Se divide en cuatro apartados o capítulos y va seguido de un epílogo. Se incluyen muchas citas, se acompaña de una clave de abreviaturas y de cuatro índices: de disposiciones legales, de sentencias, de autores y el analítico de conceptos. Aunque el título de la obra ya anuncia su contenido, la esencia del mismo reside en la puntualización de la quiebra de los valores éticos que se proyecta «con máxima crudeza» en el ámbito de las Administraciones públicas, no siendo su única manifestación la corrupción. El autor, en su introducción, con un gran sentido del humor cita la obra de Rico y Amat del año 1855, que es un Diccionario para divertimento de los políticos que ya lo han sido y de enseñanza de los que aún Page 1700 quieren serlo. Elige la palabra «moralidad» que el Diccionario define como «Señora estraviada...
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