Gestión de la diversidad y educación
| Autor | Mercedes Vidal Gallardo |
| Páginas | 120-159 |
III. GESTIÓN DE LA DIVERSIDAD Y
EDUCACIÓN
1. PLANTEAMIENTO
1. Introducción. 2. Respuestas educativas a la diversidad
cultural, étnica y religiosa. 2.1. Algunas cuestiones previas. 2.2.
Respuestas educativas y modelos de gestión. 2.2.1. Cultura
dominante. 2.2.2. Integración de culturas. 2.2.3. Pluralidad de
culturas. 2.2.4. Simetría cultural. 2.2.5. Educación intercultural.
2.3. Sucesivas etapas de implantación. 3. Hacia un modelo de
educación intercultural. 3.1. Normativa reguladora. 3.1.1.
Normativa internacional. 3.1.2. Normativa Europea. 3.1.3.
Legislación española. 3.2. Ejes vertebradores de la educación
intercultural. 4. Educación en valores en el contexto intercultural.
2. EJE TEMÁTICO
El derecho a la educación en una sociedad pluralmente diversa
ha pasado por sucesivas etapas hasta el establecimiento de un
modelo de educación intercultural, es decir, un modelo universal de
educación para todos, capaz de generar una conciencia democrática
y conseguir una mayor cohesión social que garantice una
convivencia pacífica. La consecución de estos objetivos viene
asociada a la gestión de una serie de propuestas educativas que
parten del reconocimiento de la diversidad cultural, étnica y
religiosa como instrumento fundamental a partir del cual se
adoptan unas u otras soluciones para resolver las cuestiones que
suscita el derecho a la educación de estos colectivos integrados
fundamentalmente por inmigrantes y minorías étnicas y religiosas.
Derecho y gestión de la diversidad cultural, étnica y religiosa 121
3. DESARROLLO DEL TEMA
3.1. Introducción
En el marco de la gestión pública de la diversidad, la
educación es un elemento fundamental para el éxito de la
integración de inmigrantes y minorías étnicas y religiosas en una
sociedad culturalmente diversa como la nuestra, así como para
promover y proteger su identidad cultural. La formulación
intercultural impide que se produzca un desplazamiento de las
culturas minoritarias por las dominantes y, por consiguiente, se
convierte en una pieza clave para mejorar la igualdad de
oportunidades de las minorías, no sólo en el ámbito económico,
social o cultural, sino también y sobre todo, en la esfera educativa,
poniendo de manifiesto la igualdad de los derechos de todos. Sin
embargo, el derecho a la educación en una sociedad pluralmente
diversa ha pasado por sucesivas etapas hasta el establecimiento de
un modelo universal de educación para todos, capaz de generar una
conciencia democrática y conseguir una mayor cohesión social.
Dentro de la gestión pública de la diversidad cultural, étnica y
religiosa, se han dado importantes avances en el reconocimiento
formal de derechos para las minorías a través de la aprobación de
instrumentos políticos y jurídicos, así como del establecimiento de
mecanismos institucionales para la promoción y protección de
estos derechos. La educación se ha convertido en un elemento
fundamental en las políticas orientadas a conseguir mayor grado de
integración de inmigrantes y minorías en una sociedad
culturalmente diversa como la nuestra, así como para promover y
proteger su identidad cultural. La propuesta intercultural, basada no
sólo en el respeto a la diferencia sino también en el respeto a los
principios por los que se rigen las sociedades de acogida, se
convierte en un elemento clave para mejorar la igualdad de
oportunidades en el ámbito económico, social o cultural y, sobre
122 Mercedes Vidal Gallardo
todo, en la esfera educativa, poniendo de manifiesto la igualdad de
los derechos de todos.
Para generar estas relaciones de igualdad, debemos rescatar
como imprescindibles dos valores que más adelante retomaremos:
el respeto y la tolerancia, sin los cuales, una sociedad plural como
la nuestra, en la que conviven modos de vida sustentados en
valores no siempre compatibles, no podría tener lugar en paz. La
heterogeneidad cultural, étnica y religiosa es una de las claves de
las sociedades actuales y el contexto en el que surge el modelo de
educación intercultural. En este contexto adquiere un papel
decisivo la escuela, uno de cuyos objetivos es la preparación de
futuras generaciones de ciudadanos. Como señala Kymlicka, “la
necesidad de crear una ciudadanía informada y responsable fue una
de las razones principales por la que se estableció un sistema
público de enseñanza y se hizo ésta obligatoria”102. De ahí la
importancia del sistema educativo en la formación de las personas
que van a ser los protagonistas de la vida social y política de la
comunidad en que residen.
3.2. Respuestas educativas a la diversidad cultural, étnica y
religiosa
3.2.1. Algunas cuestiones previas
Con carácter previo a las respuestas educativas que vamos a
analizar, considero necesario efectuar algunas aclaraciones
terminológicas ante el uso indiscriminado que se viene haciendo de
algunos conceptos que pueden inducir a error. Hay una tendencia a
utilizar indistintamente conceptos que no significan lo mismo; así
se habla de multiculturalidad, sociedad multicultural,
multiculturalismo o interculturalismo. Los dos primeros son
102 KYMLICKA, W., “Educación para la ciudadanía”, en El espejo, el mosaico
y el crisol, Colom F. (ed.), 2001, p. 251.
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