El futuro del trabajo que queremos y el derecho del trabajo

AutorJoaquín Nieto
CargoDirector Oficina OIT España
Páginas1-4
IUSLabor 3/2017
1
El futuro del trabajo que queremos y el derecho del trabajo
Joaquín Nieto
Director de la Oficina de la OIT para España
Más que una época de cambios, estamos asistiendo un cambio de época. La globalización
ha abierto una nueva era para la economía, el trabajo y la sociedad; una época turbulenta,
de rápidas transformaciones que generan desafíos sin precedentes para el mundo del
trabajo.
El mundo enfrenta hoy dificultades económicas, ambientales y sociales muy severas.
Después de la extraordinaria expansión económica conocida a finales del siglo XX e
inicios del XXI y los considerables avances en todo el mundo términos de escolarización
y de reducción de la pobreza, del hambre y de la mortalidad infantil; la crisis financiera
llegó para desvelar la fragilidad de aquellos avances. La pobreza y la desigualdad parecen
difíciles de eliminar, hay un recrudecimiento de las tensiones geopolíticas y una
exacerbación de los conflictos. Todo ello en una situación de crisis climática y
medioambiental que de no resolverse podría llevar al planeta a un colapso socio ambiental
de proporciones inimaginables.
El mundo está conociendo a la vez unas transformaciones tecnológicas de nuevo tipo de
la mano de la digitalización y de la inteligencia artificial que generan oportunidades, pero
que también se presentan como una amenaza a buena parte de los empleos y profesiones
tradicionales. Los cambios en el mundo del trabajo no son sólo muy profundos sino
también muy rápidos. La velocidad y amplitud del impacto de las nuevas tecnologías es
mucho mayor que en las anteriores revoluciones industriales, debido a la combinación
entre automatización, digitalización y globalización. Cambian las formas de organización
de la producción y del trabajo dando lugar a una producción cada vez más fragmentadas,
que ha expandido las cadenas globales de suministro -que emplean ya a más de 600
millones de trabajadores- y nuevas relaciones de trabajo mucho más desreguladas, como
las dependientes de las plataformas tecnológicas.
Todo ello en un contexto de envejecimiento de la población con un desempleo juvenil
generalizado; de crecientes flujos migratorios en un escenario de desigualdad entre países
y en cada país; y de transición energética hacia una economía baja en emisiones de
carbono, que tendrá impactos enormes sobre los empleos y las profesiones de unos
sectores claramente en declive como las energías convencionales y otros sectores
emergentes como las energías renovables y la economía verde.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR