Fuentes Bodelón, F.: Derecho Administrativo de los bienes. Dominio público y Patrimonio. Estudios Administrativos. Escuela de Administración Pública. Madrid, 1977
| Autor | José María Chico y Ortiz |
| Páginas | 601-603 |
Page 601
FUENTES BODELÓN, F.: Derecho Administrativo de los bienes. Dominio público y Patrimonio. Estudios Administrativos. Escuela de Administración Pública. Madrid, 1977.
El autor de este estudio sobre el aspecto administrativo del dominio de los bienes, Doctor en Derecho y Profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense, hace una afirmación en el prólogo de su libro que puede justificar toda la razón de la publicación. Habla de la «necesidad de un Código de dominio público», eliminando esa dualidad legislativa que parece desprenderse de la regulación civil y la regulación administrativa de tan importante materia como es la propiedad de las cosas. El autor confiesa al final de su prólogo que es «el primer intento de reducir a unidad el Derecho administrativo de las cosas, en su doble vertiente demanial y patrimonial».
Quizá tenga razón el autor al patrocinar ese criterio de unidad, pero se me hace «cuesta arriba» que esto pueda lograrse teniendo en cuenta la peculiar manera de entender las instituciones por parte del funcionario español. Simultáneamente a la lectura de este libro estoy realizando la de la última obra de González Pérez y al comentar la tendencia «unificadora» que se pretendió con la Ley de Procedimiento Administrativo, dice lo siguiente: «La repugnancia innata de los distintos Departamentos ministeriales a ser regulados por normas jurídicas uniformes y la incomprensión más absoluta hacia el nuevo texto que se está elaborando, determinaría tan importantes excepciones al mismo que han permitido dudar a la doctrina sobre la realidad de la unidad legislativa pretendida».
El autor, que dedica una gran parte de su obra al problema de las aguas, se quedaría asombrado de un hecho en el que intervino accidentalmente. Había que pasar las aguaspara abastecer a una población por un campo de prácticas militares y estuvo a punto de estallar la guerra. Cuando se enfrenta el funcionario de obras públicas con el militar en activo, la teoría del poder se pone a prueba. Si para unos puede ser preferenteconforme a leyel abastecimiento de aguas, para otros, por razones de defensa, es trascendental el ejercicio de tiro y la maniobra militar. Por buenas componendas se autorizó el paso del agua, pero con condiciones: sólo por unos años y sometido a la posibilidad de que por encima del acueducto pasasen los tanques, los vehículos pesados, pudiese ser bombardeado con fuego de mortero y cañones y bombas de aviación... Todo ello...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba