La eficacia y la eficiencia como causas para la gestión indirecta de servicios públicos
| Autor | Francisco José Trillo Párraga |
| Cargo del Autor | Profesor de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. Universidad de Castilla-La Mancha |
| Páginas | 21-32 |
EXTERNALIZACIÓN DE SERVICIOS PÚBLICOS Y SU IMPACTO EN LOS DERECHOS LABORALES
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3. La eficacia y la eficiencia como causas para la
gestión indirecta de servicios públicos
Una vez realizadas las precisiones correspondientes al volumen y
composición del empleo público en los distintos ámbitos territoriales
y sectoriales conviene adentrarse en los motivos por los que el orde-
namiento jurídico autoriza la gestión indirecta de servicios públicos.
Cabe hacer una llamada de atención que con carácter general afecta al
entendimiento de este epígrafe, como es la carencia relevante de datos
al respecto. Esto es, resulta muy llamativo que no existan datos oficia-
les acerca de la eficacia y eficiencia de la gestión indirecta de servicios
públicos respecto de la prestación directa de los mismos.
La decisión de externalizar la prestación de un servicio público al
sector privado se ha argumentado y legitimado en base a la mayor
eficiencia, reducción de costes, y eficacia, mayor calidad del servicio,
como consecuencia de una mejor especialización del sector privado.
Es decir, la eficacia y la eficiencia se obtendrían, pues, a través del ma-
yor grado de especialización que lleva aparejada la contratación de la
producción del servicio a una organización de carácter privado, con o
sin ánimo de lucro, que más competitiva sea en cuanto a costes y cali-
dad. Además, continúa esta línea de explicación, la externalización se
suele desarrollar en condiciones de competencia que no tienen lugar
en la prestación o gestión directa de servicios públicos, ya sea por la
existencia de un mercado dedicado a la prestación de dicho servicio
o por el propio acontecer administrativo que obliga a que diversas
empresas concurran a la convocatoria pública de externalización. En
resumidas cuentas, existe una valoración apriorística que concede al
sector privado ambas cualidades: trabajar mejor y de forma más eco-
nómica.
Externalizar debería implicar, entonces, la optimización de la gestión,
dada una determinada especialización de la empresa que le otorga una
ventaja competitiva, al mismo tiempo que se asiste a una reducción
de costes en la Administración Pública como consecuencia de que los
costes fijos devienen variables. A este respecto, cabe llamar la atención
sobre el hecho de que los recursos humanos suelen erigirse como el
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