Editorial

Páginas7-11

Page 7

LA DEGENERACIÓN ANTISOCIAL Y ANTIDEMOCRÁTICA DE EUROPA: LA PROPUESTA DE MODIFICACIÓN DE LA DIRECTIVA DE TIEMPO DE TRABAJO COMO EJEMPLO

Son extremadamente preocupantes las últimas tendencias que se están apreciando en el panorama europeo y que resultan suficientemente conocidas por todos: el referéndum irlandés que rechaza el Tratado de Lisboa y sus repercusiones en la opinión de los órganos de dirección política de la Unión, la propuesta de reforma de la directiva de tiempo de trabajo, la directiva de retorno de los emigrantes y la afirmación de una línea interpretativa decididamente antisocial en la reciente jurisprudencia del Tribunal de Justicia, todo ello inmerso en la propuesta de la Comisión sobre la modernización del derecho del trabajo en Europa, Libro Verde en el que la idea clave de la flexiseguridad se ha incorporado en la Comunicación de la Comisión en la que se pronosticaba "más y mejor empleo mediante la flexibilidad y la seguridad" (27 de junio de 2007 COM (2007) 359 final).

A partir de los cambios políticos inducidos desde la ampliación al Este, en Europa se ha producido una vigorización acentuada de la construcción del espacio económico, social y político a través del mercado y de las grandes libertades que lo definen -circulación de mercancías y de personas, libertad de establecimiento y de prestación de servicios, libre movimiento de capitales- en la misma medida en que se debilitaba el federalismo solidario que fundamenta un modelo social común a las tradiciones democráticas de sus Estados miembros y la necesaria dimensión política que debería acompañar a ese proceso de unificación mercantil y monetaria de Europa. Los intentos fallidos de fijar en un texto constitucional este desequilibrio estructural han sobrevivido a la re-escritura de la Constitución en el Tratado de Lisboa, como lo atestigua el No obtenido en el referéndum irlandés. Frente a ello, la dirección metagubernamental de la Unión Europea ha reaccionado acentuando su desconfianza hacia la consulta popular como método de aprobación de los tratados fundamentales europeos, quizá con la seguridad de quien piensa -erróneamente- que los pueblos siempre se equivocan en su ignorancia o en su capacidad para ser manipulados por demagogos de todo tipo. Pero lo cierto es que cada vez más es patente un cortocircuito entre los sentimientos de los ciudadanos de Europa y la clase política y económica que dirige el actual proceso de integración.

El sesgo antisocial que va adornando a Europa resulta muy evidente a partir de la movilización -victoriosa- contra la Directiva Bolkestein conducida por la izquierda social y sus aliados políticos en el Parlamento Europeo que, depurada de sus efectos

Page 8

más negativos, se aprobó en diciembre de 2006. Los dos años inmediatamente posteriores han conocido cambios políticos muy significativos en el nivel nacional-estatal, lo que Vidal Beneyto llama el sarkoberlusconismo que pone en peligro una visión democrática y social del devenir europeo. Una manifestación muy preocupante vino con el ya aludido Libro Verde sobre la Modernización del Derecho del trabajo para afrontar los retos del siglo XXI, pero es fundamentalmente la jurisprudencia del Tribunal de Justicia la que a través de una línea continuada en una serie de decisiones impone una interpretación de los derechos sindicales y de las garantías legales y colectivas de las condiciones de trabajo de los trabajadores funcionarizada a -y restringida por- las libertades económicas de mercado. Baste aquí con recordar la restricción del derecho de huelga como arma anti dumping y como respuesta a la deslocalización que llevan a cabo las Sentencias La...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR