Acciones en defensa de intereses supraindividuales de los consumidores

AutorJanet C. Alexander
CargoProfesor of Law and Justice, Stanford Law School Universidad de Stanford (USA)
Páginas100-121

    Ponencia presentada en el Seminario sobre Justicia y Protección de los Consumidores organizado por el Consejo General del Poder Judicial y el Ministerio de Sanidad y Consumo en octubre de 1998


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La acción de clase es uno de los instrumentos legales mas eficaces existentes en Estados Unidos. Permite la defensa de demandas que de otra manera nunca se podrían defender ante los tribunales, con independencia de sus bases procesales. La iniciación de una acción judicial es una decisión económica. Solamente es factible si las indemnizaciones posibles superan el coste, a lo cual se suma que las costas judiciales son considerables No se sigue adelante con las demandas cuya cuantía es demasiado reducida para cubrir las costas judiciales No importa que derechos estén contemplados en el derecho sustantivo, si no existen medios para hacer cumplir dichos derechos, bien podría no existir la ley, ya que es posible infringirla con impunidad. La imposibilidad de exigir el cumplimiento de los derechos que reclaman las demandas de menor cuantía constituye un problema persistente en la protección del consumidor Las demandas individuales suelen ser por una cuantía ínfima-acaso de unos cuantos dólares, o incluso menos, pero, cuando están en juego productos hechos en serie o servicios estandarizados prestados al consumidor estos pequeños perjuicios pueden llegar a arrojar enormes beneficios ilegales. En consecuencia pese a su posible escasa cuantía las demandas individuales no carecen de importancia desde el punto de vista social Las acciones de clase del consumidor pueden ofrecer una solución a este obstáculo económico a la aplicación de la ley, considerando los defensores del consumidor en Estados Unidos que las acciones de clase representan alrededor del 25 por ciento de todos los procesos de acción de clase, y un tercio de todas las acciones de clase interpuestas contra las empresas 1 Las acciones de clase pueden ser asimismo un medio de ofrecer igualdad de oportunidades a los pobres o a los individuos menos favorecidos económicamente. Lo normal es que un individuo, especialmente una persona pobre, se encuentre en gran desventaja en un proceso judicial contra un oponente empresarial bien financiado que se pueda permitir abogados caros. Sin embargo, cuando esas demandas se agrupan bajo la forma de una acción de clase el importe total suele ser muy elevado, suficiente para permitirse contratar los servicios de una defensa letrada igualmente hábi.l La eficacia de las acciones de clase como medio que confiere plenos poderes a los desposeídos económicamente frente a los poderosos económicamente puede ser una razón de que este tipo de acciones se hayan convertido en un blanco casi constante de los intereses empresariales y de los políticos conservadores.

Las acciones de clase pueden permitir llevar a juicio demandas de menor cuantía, sirviendo de esta manera a objetivos de compensación y disuasión (o aplicación de la ley). «Haciendo posible» las demandas, el mecanismo de la acción de clase puede servir de incentivo adecuado a las empresas, garantizando que paguen los verdaderos costes de su propia conducta, en lugar de repercutirlos en los consumidores, al tiempo que se quedan con las ganancias como beneficio. Las acciones de clase pueden también constituir un medio más eficiente de llevar los procesos, eliminando la necesidad de volver a llevar ante los tribunales las cuestiones ordinarias en un gran número de causas individuales. Las acciones de clase son apenas uno de los métodos que permiten responder a estas preocupaciones Constituyen una alternativa tanto a la regulación del Estado como a la autorregulación de la industria. La autorregulación puede ser ineficaz, ya que puede darse el caso de que la industria no este motivada para imponer disciplina entre sus integrantes, o acaso que no sea suficientemente coherente u organizada para garantizar que sus miembros se adhieran a la autorregulación. Puede ser que la regulación del Estado no sea factible o deseable, puesto que exige la creación y financiación, a expensas públicas y de manera continuada, de una burocracia estatal. Los organismos públicos, principalmente aquellos dedicados a la protección del consumidor, no suelen disponer de recursos suficientes para detectar todas las infracciones y procesarlas, no intentado de manera habitual obtener una compensación para los consumidores Incluso en Estados Unidos la Comisión de Bolsa y Valores, respetado órgano regulador, ha manifestado de manera ininterrumpida que las acciones de clase privadas son fundamentales en la exigencia del cumplimiento de la legislación de valores,Page 101 porque este órgano carece de recursos para cumplir este cometido por sí solo Adicionalmente, el nivel de exigencia del cumplimiento de la ley por parte del Estado es variable, dependiendo de las prioridades de los grupos políticos que dotan de personal a este órgano lo financian y establecen su política. La existencia de un procedimiento con fuerza ejecutiva privada de cara a un grupo de demandas crea incentivos que llevan a un mercado de observancia forzosa de la ley Un mayor cumplimiento obligatorio crea, a su vez, mejores incentivos para que las empresas cumplan la ley y adopten el grado adecuado de diligencia razonable.

Este instrumento ejecutorio responde a incentivos del mercado y no a prioridades políticas. A esto se suma que es posible que las acciones de clase sean más eficaces que la acción del Estado en lo que al ofrecimiento de una compensación a los consumidores perjudicados se refiere, al igual que en materia de una disuasión más exhaustiva, que las demandas individuales por ilícitos civiles, incluso en el caso de que éstas fuesen factibles. Las acciones de clase actúan creando incentivos para que los letrados interpongan procedimientos coercitivos privados Pese a que los daños individuales sean de cuantía demasiado reducida para hacer que una demanda judicial valga la pena, una acción de clase puede reunir muchas demandas, de tal manera que el importe total en juego sea importante -suficiente para que un procedimiento judicial sea económicamente factible. La recuperación potencial derivada de una acción de clase es suficientemente elevada para cubrir honorarios de letrado razonables Para los abogados es rentable especializarse en litigios de acción de clase Emerge un cuerpo de «abogados empresariales» del demandante. Los intereses de los abogados están puestos en la acción, siendo sus honorarios suficientemente cuantiosos para buscar demandas de clase potenciales y entablar un juicio en nombre de dicha clase. Es así como la existencia del mecanismo de acción de clase puede crear un mercado de protección del consumidor que atraiga a los abogados, que se afanan por encontrar infracciones de los derechos del consumidor y defenderlos ante los tribunales. La creación de esta alternativa de mercado a la exigencia del cumplimiento de la ley hace necesario que el derecho procesal autorice las acciones de clase, que un suministro de avezados abogados empresariales se hagan cargo de las demandas, que exista un medio de financiar los procesos, y que el derecho sustantivo reconozca las demandas de los consumidores y lo haga de una manera eficiente que permita procesar cientos, por no decir miles o millones de demandas juntas. En Estados Unidos, tenemos establecida una regla de acción de clase que rige las acciones de clase en todas las áreas sustantivas 2 Sin embargo, 30 años de práctica bajo la regla moderna de acción de clase nos han enseñado que existen varias categorías amplias de causas, cada una de ellas con su característica distintiva que plantea problemas distintivos y que exige un tratamiento procesal diferente Estas categorías de acciones de clase incluyen:

1 Derechos del consumidor. Estas demandas se re fieren a pérdidas económicas individuales (y no a lesiones personales) y son por una cuantía demasiado reducida para justificar procesos individuales La mayoría de estas demandas implican denuncias de honorarios excesivos o prácticas mercantiles fraudulentas, defectos de producto, y demandas antimonopohstas (Podríamos definir las causas de «derechos del consumidor» en términos más amplios que incluyesen las causas de valores bursátiles o de lesiones personales, en las cuales estuviesen implicados defectos de producto, pero esta utilización ocultaría características importantes de estos tres tipos de causas). 2 Valores bursátiles y causas antimonopolistas. Estas causas se podrían considerar como de menor cuantía, pero de hecho suele haber demandas por una cuantía bastante importante entre las de esta clase El derecho sustantivo está en gran medida especializado, implicando estas causas grandes sumas de dinero, siendo por ello muy lucrativas. 3 Medioambientales. Estas causas o se podrían considerar como una forma de acción de clase del consumidor, pero es relativamente poco frecuente que el cumplimiento de la legislación medioambiental se exija por me dio de acciones de clase, debido en parte a que el desagravio deseado suele ser por naturaleza de mandato judicial, en lugar de daños monetarios.

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4 Derechos civiles, por ejemplo, segregación en los centros escolares, derechos de los reclusos en centros penitenciarios, derechos de voto, y derechos laborales de los empleados públicos. Los procesos por discriminación laboral contra empresarios privados son similares, aun que la utilización de las acciones de clase en el derecho laboral parece estar en descenso. 5 Ilícitos civiles colectivos.Ésta es la categoría de acciones de clase de crecimiento más rápido y en la actualidad la más...

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