Una cuestión de tacto

AutorGianfrancesco Zanetti
Páginas145-169
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5. UNA CUESTIÓN DE TACTO
Devils can be driven out of the heart
by the touch of a hand on a hand.
TENNESSEE WILLIAMS
1. TRES CARACTERÍSTICAS DEL TACTO
Las imágenes y los sonidos pueden ser digitalizados. El
olfato, el gusto y el tacto, sin embargo, no pueden, o al menos
todavía no. Se puede ver muy lejos, como saben alpinistas y
marineros, astrónomos diletantes y jinetes de camellos. Se pue-
de escuchar de lejos, como en una conferencia universitaria,
con el micrófono que (como a menudo ocurre) no funciona.
Para oler, en cambio, es necesaria cierta proximidad: sólo algu-
nos olores superan las distancias, y aun así no se trata de dis-
tancias comparables con aquellas necesarias para los sonidos
ni mucho menos para las imágenes 1. Para el gusto y el tacto,
sin embargo, hace falta algo más.
1 En la literatura, no se encuentran muchas excepciones a esta regla.
Una acción que se desprende de un olor olido de lejos es difícil que ocurra,
pero no imposible: vid., por ejemplo, el íncipit del cuento «Il bruciaprofumi
del piviere fa rivivere un amante», SAIKAKU, I., Del dovere dei guerrieri, Luni,
Firenze, 2006, pp. 27-30; vid. ivi, p. 27: «Entre otros placeres, al señor le gus-
taba sobre todo el olor de los mejores inciensos, y de todas las provincias
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Ya que luego, como ya se ha subrayado, no se puede esperar
ejercer el sentido del gusto sobre un ser humano, por el tabú
del canibalismo, el sentido que implica la mayor proximidad
posible es justo el tacto: «e vicino non è ancora abbastanza» 2.
Veo los demás desde lejos, para escucharles tengo que acer-
carme, y el olfato también implica cercanía: pero el quinto sen-
tido implica, por definición, contacto —cerca no es bastante.
Se trata de un punto máximo de proximidad.
Se trata, además, de un sentido fundamentalmente primiti-
vo, que se desarrolla en la primera parte de la vida del embrión,
cuando por dimensiones y formas no se parece ni siquiera a un
ser humano 3. Juega un papel fundamental en el bienestar y en
el crecimiento del bebé a través de la relación con la madre 4. Se
ejerce a través de un órgano de gran extensión: la piel. La filo-
sofía oriental ha sido siempre consciente de la especificidad del
había hecho traer sesenta tipos diferentes, de los que siquiera los nombres
eran mágicos. Después de haberse entretenido conversando sobre dichos
inciensos hasta tarde en una noche helada, hacia el amanecer un fuerte viento
trajo un aroma desconocido que refrescó el corazón de toda la asamblea».
2 F. De Gregori, Buonanotte fiorellino, en Rimmel, RCA, 1975.
3 «En el feto humano, con casi sesenta días de vida y con una largura
ligeramente superior a los dos centímetros, la piel ya está bastante desarrolla-
da; y a pesar de que es indispensable para la supervivencia, es el órgano mas
ignorado, excepto por sus enfermedades: frente a la multiplicidad de institutos
de investigación para la vista y el oído existentes en todo el mundo, para el
tacto y la estimulación de la piel el número es totalmente exiguo»: GIUSTI, E.,
GERMANO, F., Etica del con-tatto fisico in psicoterapia e nel counseling, Sove-
ra Multimedia, Roma, 2003, p. 15.
4 He encontrado muchas informaciones útiles en el libro de E. Giusti y
F. Germano citado en la nota anterior, sobre todo (para lo que aquí resulta
útil) en el cap. 1, Il contatto fisico nel processo evolutivo, en donde se recuer-
dan los «ya muy conocidos estudios de Harlow». Los pequeños monos rhesus,
teniendo que elegir entre dos madres sustitutas, una de tela, la otra de hierro,
pero con disponibilidad de leche, prefieren la primera, lo cual confirma el rol
de la sensibilidad táctil en el apego madre-hijo; severas son las consecuencias
en los comportamientos de los monos por razón de falta de interacción táctil
con la madre.

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