Capítulo VIII

AutorCarlos Elbert
Páginas311-397
311
CAPÍTULO VIII
1).- El “parlamentarismo” alemán y el desempeño del Reichs-
tag hasta 1918.
2).-La actuación del diputado Liszt en el Reichstag (1912-
1918).
1).- El “parlamentarismo” alemán y el desempeño
del Reichstag hasta 1918
La opinión más generalizada sobre la historia del parla-
mento alemán durante la monarquía de los Hohenzollern
sostiene que estuvo sometido a un sistema muy restrictivo y
autoritario, que en alemán se dene como “Obrigkeitsstaat”,
mientras que la opinión disidente sostiene que el Kaiser
(Emperador) —y el poder ejecutivo que dominaba— fueron
llevados por la práctica parlamentaria a una creciente de-
pendencia del legislativo318.
Seguramente lo complejo es evaluar “cuanta” importancia
tuvo el poder legislativo, como para jar posición en el pri-
mero o segundo sentido apuntado. Se señala también que
los partidos políticos alemanes de esa etapa permanecieron
muy encerrados en la defensa de los intereses de los sectores
particulares que cada uno representaba, (de clase, religio-
318-Wehler,H.U.“DeutscheGesellschsgeschichte“,obracitada,tomo3,Pág.361yss.
312
sos o económicos), sin mayor horizontalidad poli-clasista, y
con poca propensión a formar coaliciones o a hacerse conce-
siones recíprocas. Todo indica que el pueblo alemán (aún en
sus sectores más pobres) internalizó profundamente la idea
de un poder ejecutivo fuerte, con un conductor autoritario y
personal al frente, aceptado sin objeciones, que seguramen-
te tiene a sus ejemplos prototípicos en las personalidades de
Bismarck y Hindenburg, al cual, sin transición, sucedería
nada menos que Hitler. Y por cierto, la dinastía Hohenzo-
llern también gozó de un amplio reconocimiento social, in-
cluyendo a su último representante, Guillermo II.
De tal modo, las guras dominantes del Kaiser, sus mi-
nistros y gabinetes de asesores conducían la política con
un amplio margen de maniobras, que nunca fue seriamen-
te obstaculizado por el parlamento. Pensar en un cambio
profundo del sistema político lucía, en los primeros 14 años
del siglo XX como una utopía considerada realizable sólo
por los sectores políticos más extremos, en especial de la iz-
quierda. Nadie hubiera podido prever, entonces, que apenas
cuatro años más tarde desaparecería la monarquía, dan-
do paso a una república parlamentaria, luego de aplastar
los intentos de establecer una república proletaria según el
modelo soviético. Bajo la monarquía, el único partido que
propuso de modo consecuente la necesidad de un cambio de
constitución fue el partido socialdemócrata (transformado
en SPD en 1880), que se convirtió en la principal fuerza po-
lítica de Alemania en 1912. Por cierto, la tendencia de todos
los partidos alemanes a la división y fragmentación interna
fue un factor que debilitó por largo tiempo el poder político
parlamentario del Reich.
Las dos mayores instancias legislativas, el Reichstag
(Cámara de diputados) y el Bundesrat (Cámara de Repre-
sentantes) ganaron en inuencia e importancia a lo largo de
las décadas, pero también es preciso caracterizar con exac-
313
titud los mecanismos institucionales en cuyo marco fun-
cionaron. Recordemos que el Reich era una federación de
22 Estados monárquicos (principados) y 3 ciudades libres,
cuyos representantes ocupaban el Bundesrat, elegidos por
los monarcas, como una “oligarquía de príncipes”, conforme
a los principios dinásticos; por ello, el Bundesrat disponía
de un amplio poder discrecional, al simbolizar la autonomía
de los Estados miembros. Sin embargo, se ha señalado que
tal poder resultó más aparente que real, porque nunca pudo
utilizarlo plenamente, a raíz del dominio excluyente que Pru-
sia ejercía dentro de la federación, contando no sólo con la
corona del Kaiser y su canciller, sino disponiendo también
del 65% de la supercie territorial, del 62% de la población,
y del ejército más poderoso del Reich, sometido a la jefatura
del Rey de Prusia, al cual sus potestades constitucionales le
otorgaban —además— el mando de las fuerzas armadas de
los Estados Federados, y también las relaciones internacio-
nales. Por otra parte, Prusia tenía 17 de los 58 asientos en el
Bundesrat, y mantenía una posición dominante sobre todos
los pequeños principados del norte de Alemania, haciendo
que, de hecho, la formación de coaliciones adversas a Prusia
en el Bundesrat fueran poco menos que imposibles319.
El Reichstag, en cambio, estaba integrado por la repre-
sentación popular, o sea unos 400 diputados, elegidos libre-
mente por el voto masculino de ciudadanos mayores de 25
años, inicialmente cada 3 años, y a partir de 1885 cada 5
años; era considerado uno de los legislativos más democrá-
ticos de Europa. El Reichstag recién tuvo su edicio propio
—el mismo de la actualidad, en la nueva capital tras la re-
unicación— en 1894. Y recién en 1906 se profesionalizó el
ejercicio de cargos electivos, que hasta entonces había sido
honorario.
319- Clark,Chr.,“WilhelmII“,obracitada,Pág.49.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR