Información y política sobre biodiversidad a la luz de las experiencias en Costa Rica
| Autor | Erick Mata y Rodrigo Gámez |
Introducción
El primer paso para proteger la biodiversidad de un país es conocer cuánta biodiversidad existe y donde se encuentra localizada. En Costa Rica se reconoció en 1989 la necesidad de que una institución específica realizase la tarea de catalogar y comprender la biodiversidad y se creó el Instituto Nacional de Biodiversidad, INBio (véase cuadro 2). Históricamente, esta tarea ha sido llevada a cabo por diversas instituciones científicas y académicas nacionales y extranjeras.
El enfoque que se tomó en Costa Rica para preservar la biodiversidad está basado en la estrategia de 'conservar', 'conocer' y 'utilizar' El enfoque que se tomó en Costa Rica para preservar la biodiversidad está basado en la estrategia de 'conservar', 'conocer' y 'utilizar'. Una parte importante para poner en práctica este enfoque consiste en recoger, procesar y compartir información y conocimiento. Éste es un proceso en cuatro etapas, conocido como 'proceso núcleo', que puede contemplarse como un ciclo de información, en el que la información compartida es introducida de nuevo en el sistema, una vez que se ha evaluado su impacto y relevancia para las audiencias objetivo.
El primer paso de este 'proceso núcleo' consiste en obtener datos y muestras de campo. Esto se lleva a cabo por los denominados 'parataxónomos', que son personas procedentes de las zonas rurales con una sólida formación en este proceso y conocimientos básicos de taxonomía. La información que suministran se valida e introduce en el sistema por técnicos que también están formados específicamente para esta tarea.
El segundo paso en este proceso es la generación de información. El conocimiento procedente de la red de taxónomos colaboradores distribuidos por todo el mundo enriquece los datos de campo recogidos y, en particular, permite que se identifiquen completamente las muestras obtenidas.
El tercer paso es preparar la información para audiencias determinadas. Esto puede significar escribir un artículo científico, producir un CD-ROM para niños, un sitio web para el público en general, etc. Esto se lleva a cabo por equipos interdisciplinarios en los que educadores y comunicadores juegan un papel clave.
El cuarto paso en el proceso es compartir la información y el conocimiento adquiridos. Esto puede conseguirse mediante cursos de formación, talleres, participación activa en foros nacionales e internacionales, y actividades educativas bajo el paraguas del programa de 'bioalfabetización'.
Lecciones obtenidas
En Costa Rica se han aprendido varias lecciones durante el proceso de recogida de información y conocimiento sobre biodiversidad. En primer lugar, se ha demostrado que hay varios prerrequisitos para que la información tenga un impacto genuino sobre la biodiversidad. La información sobre biodiversidad debería, por tanto, ser:
científicamente sólida actualizada representativa disponible a varias escalas suficientemente básica para ser utilizada como base para otras aplicaciones fácilmente accesible A pesar de todos los argumentos políticos y subjetivos que con frecuencia emergen cuando se discuten temas de conservación, las decisiones finales deberían estar siempre basadas en información científicamente sólida Claramente, la información que es científicamente sólida es un soporte indispensable para los procesos importantes de toma de decisiones. Entre los argumentos políticos y subjetivos que con frecuencia emergen cuando se discuten temas de conservación, la información científicamente sólida debería constituir los cimientos sobre los cuales se base cualquier decisión final. Todas las muestras recogidas, por tanto, deben sujetarse a un proceso que abarque protocolos formales para su recogida, preservación y almacenamiento. Al final del proceso de inventariado cada muestra ha de ser plenamente geo-referenciada, asignada a un código de barras y tener todas sus características introducidas en una base de datos.
Una amplia gama de información sobre biodiversidad está disponible tanto en formato digital como en formato tradicional. Sin embargo, dada la naturaleza inherentemente dinámica de los recursos de biodiversidad, se requiere un control y mantenimiento continuos para impedir que la información se convierta en obsoleta (por ejemplo poniendo al día la base de datos a diario). La colocación de los datos en línea puede ayudar en este proceso, ya que significa que está constantemente sujeta a revisión y mejora.
Es imposible mantener un inventario nacional completo de la biodiversidad como se hace con las existencias de una tienda. Sin embargo, se han de utilizar métodos de toma de muestras estadísticamente coherentes, con el fin de suministrar estimaciones precisas de la biodiversidad existente y de dónde está localizada. En la práctica, se puede alcanzar esta meta tomando como muestras sitios representativos en muchos ecosistemas localizados por todo el país.
No es posible hacer un inventario nacional completo de la biodiversidad. Se han de utilizar métodos de toma de muestras estadísticamente coherentes, con el fin de suministrar estimaciones precisas de la biodiversidad existente y de dónde está localizada La información sobre biodiversidad debe estar disponible a varias escalas, tanto desde el punto de vista geográfico como desde el taxonómico. Las necesidades de quienes toman las decisiones, a nivel nacional y a nivel local, varían, y los taxónomos necesitan claramente un mayor grado de detalle que los niños de escuela. El uso de Sistemas de Información Geográfica (GIS) permite manejar y presentar la información geoespacial a muchos niveles. La flexibilidad de permitir que los usuarios se muevan de un nivel a otro es otra característica importante de cualquier sistema de información sobre biodiversidad.
Es preciso definir una estrategia informática de la biodiversidad de una forma que se base en el concepto de bloques básicos de información. Dada la enorme complejidad de los sistemas estudiados (que abarcan todo el espectro desde el nivel genético al nivel de ecosistema), la gran cantidad de información (por ejemplo, hay millones de especies solamente en América), y los millones de relaciones que se pueden establecer entre una especie determinada y su medio, es imposible diseñar un sistema de información que proporcione información interpretada (conocimiento) de forma que satisfaga todas las necesidades de los usuarios. En su lugar, la estrategia adopta la metáfora de los 'bloques de construcción' (esto es, trata de proporcionar información a nivel de muestra, de especie y de ecosistema) y utiliza mecanismos de generación de informes a modo de cemento que los una. Una herramienta esencial para quienes toman las decisiones es un sistema flexible de consulta, que facilite la generación de informes relevantes y la integración de estos informes en un producto de información unificado, bajo control del usuario. Por último, un requisito obvio, pero a menudo ignorado, de la información sobre biodiversidad es que debe estar ampliamente disponible, no sólo en forma electrónica, sino también en formatos tradicionales.
Dada la enorme complejidad de los sistemas estudiados, cualquier estrategia informática de la biodiversidad debe definirse de una forma que se base en el concepto de bloques básicos de información Otra lección aprendida en la obtención de información sobre biodiversidad es que se han de promover tres acciones concretas, para reforzar el impacto de la información a medio y largo plazo:
Conformar valores, especialmente entre los jóvenes. A medio y largo plazo, un país obtiene beneficios de un sistema educativo que promueva valores tales como el respeto a la vida y la interacción ética con la naturaleza.
Apoyar la toma de decisiones, especialmente en la política. Estas acciones deben cubrir todo el espectro, desde elevar la concienciación sobre temas de conservación entre los políticos, a proporcionar información y conocimiento a los legisladores, los ayuntamientos y los centros oficiales.
Apoyar a las personas, las organizaciones y las comunidades que están realizando acciones concretas para conservar y utilizar la biodiversidad de un modo sostenible. La implicación directa de comunidades con capacidad de influencia es esencial para que las políticas y los valores se traduzcan en acciones concretas. Este principio tiene, desde luego, importantes consecuencias sobre la creación de capacidades.
Hay que subrayar que estas tres acciones no las puede llevar a cabo una única institución, sino que deben implicar a un conjunto adecuado de partícipes para garantizar su eficacia.
La búsqueda del conocimiento necesario para preservar la biodiversidad de un país, y utilizarla de forma sostenible, está colmada de desafíos. Exige metodologías científicas para generar información sólida, tecnologías adecuadas para garantizar la rentabilidad, y una evaluación continua de las necesidades de los usuarios actuales y potenciales del conocimiento adquirido.
Cuadro 1. La biodiversidad en Costa Rica
Los países tropicales como Costa Rica se enfrentan al complejo desafío de proteger su riqueza biológica, al tiempo que promueven el desarrollo social y económico necesario para apoyar y reforzar el bienestar de su población.
La riqueza biótica de Costa Rica es importante ya que, con una superficie de 51.100 km2, el país posee una media estimada de un millón de especies de plantas, animales y microorganismos, que representan casi el 5 % de la diversidad de especies del mundo.
En su búsqueda de un modelo de desarrollo humano sostenible, el país está dedicando casi un tercio de su territorio a la conservación a perpetuidad de su patrimonio natural. Esto representa una inversión importante para cualquier país, pero especialmente para un pequeño país tropical en vías de desarrollo, y es el resultado de una decisión consciente de renunciar a las ganancias a corto plazo, derivadas de un uso no sostenible de esta porción de su territorio. Ello lleva implícitamente consigo la obligación de demostrar que las ganancias a largo plazo superan a los beneficios a corto plazo a los que se renuncia.
Los sectores de la sociedad implicados percibirán este compromiso como beneficioso solamente si se proporciona información a la sociedad en su conjunto, a través de educación y concienciación. Además, se necesitan conocimientos científicos y tecnológicos para hacer un uso inteligente y sostenible de la biodiversidad del país.
El Ministerio de Medio Ambiente de Costa Rica gestiona las distintas categorías de áreas protegidas de propiedad estatal, y controla, apoya y facilita la gestión de otras categorías de áreas protegidas de propiedad privada, a través del Sistema Nacional de Conservación de Áreas (SINAC).
Cuadro 2. El Instituto Nacional de Biodiversidad de Costa Rica, INBio
INBio es una institución científica privada, de interés público, especializada en la obtención, tratamiento, producción y distribución de información sobre biodiversidad. Esta información se utiliza en las etapas de 'conservar' y 'utilizar' de la estrategia de conservación de la biodiversidad. Este 'proceso núcleo' de la institución es realmente un ciclo de información en el que la información compartida se vuelve a introducir en el sistema, una vez que se ha evaluado su relevancia e impacto para audiencias objetivo. En el 'proceso núcleo' del INBio participan unas 200 personas, que trabajan en coordinación con el SINAC y con fuerte apoyo de más de 250 colaboradores científicos de alto nivel, procedentes de todo el mundo.
Estratégicamente, el 'proceso núcleo' se ha concebido de modo que utilice metodologías y conocimientos científicos rigurosos, combinados con aplicaciones innovadoras de las tecnologías de la información, tales como códigos de barras, sistemas de información geográfica, bases de datos relacionales, multimedia e Internet. Como parte de este esfuerzo, el INBio ha diseñado y puesto en práctica un sistema de información llamado ATTA, que soporta la mayor parte de las actividades de tratamiento de la información (Mata, 2001). Este sistema está funcionando desde agosto de 2000 y ha logrado el reconocimiento internacional, como un buen ejemplo de la última generación de herramientas informáticas sobre biodiversidad.
Se puede obtener más información en: www.inbio.ac.cr
Palabras clave
informática sobre biodiversidad, conservación de la biodiversidad, inventarios de la biodiversidad ReferenciasMata, A., Bioinformatics at INBio: the Atta System, Alliance News, volumen 29, nº 6, diciembre 2001.
Contactos
Rodrigo Gámez Lobo, Director General, Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio), Costa Rica Tel.: 506 507 81 66, fax: 506 507 82 74, correo electrónico: rgamez@inbio.ac.cr Erick Mata, Director de Bioinformática, Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio), Costa Rica Tel.: 506 507 81 66, fax: 506 507 82 74, correo electrónico: emata@inbio.ac.cr
Sobre los autores
Erick Mata posee el grado de doctor y un máster en Informática de la Universidad de Oregón. Su carrera profesional comenzó como profesor de Informática en el Instituto de Tecnología de Costa Rica (ITCR), donde ha sido director del Programa de Informática, investigador e instructor. Sus líneas de investigación incluyen: algoritmos genéticos, informática sobre biodiversidad, sistemas orientados a objetos y teoría algorítmica de grafos. Se incorporó al INBio en 1995, como coordinador de la gestión de la información. Actualmente es Director Adjunto del INBio, presidente del Comité de Capacitación Científica del GBIF, y profesor asociado, a tiempo parcial, del ITCR.
El Dr. Rodrigo Gámez es presidente del Instituto Nacional de Biodiversidad de Costa Rica desde su fundación en 1989. También fue su Director General hasta diciembre de 2003. Es doctor en Virología Vegetal y Botánica por la Universidad de Illinois (1966) y ha sido profesor de investigación en la Universidad de Costa Rica durante más de treinta años (1958-1990). También ha desempeñado diversos cargos administrativos en dicha universidad, como Director de la Facultad de Botánica, Vicerrector de Investigación y Director del Centro de Investigación de Biología Celular y Molecular.
