Orígenes y evolución de los presupuestos participativos

AutorJuan Calvo Vérgez
Cargo del AutorProfesor Titular de Derecho Financiero y Tributario, Universidad de Extremadura
Páginas35-51
II. ORÍGENES Y EVOLUCIÓN DE LOS
PRESUPUESTOS PARTICIPATIVOS
¿En qué contexto cabe situar la experiencia obtenida de la elaboración
de esta clase de Presupuestos dentro del marco de las prácticas de participa-
ción ciudadana? Desde nuestro punto de vista, al objeto de poder analizar las
diferentes orientaciones existentes en la elaboración de estos Presupuestos,
así como los distintos intereses y problemas que puedan llegar a presentar-
se habremos de analizar, con carácter previo, los principales antecedentes
existentes al respecto.
Constituye un hecho innegable que, a lo largo de estos últimos años, las
distintas democracias representativas occidentales, afectadas por diversos
problemas de gobernabilidad y de legitimidad, han venido desarrollando
un interés creciente que les ha llevado en muchos casos a volver la mirada
hacia experiencias democráticas puestas en marcha en otros lugares, con
el fin de extraer elementos que permitan superar los condicionantes de
crisis que aparentemente se dan en los sistemas políticos representativos
contemporáneos. En ese sentido los diversos procesos de redemocratiza-
ción iniciados en Latinoamérica en la segunda mitad de los años ochenta,
con independencia del contexto de dificultades en el que se llevaron a cabo
(especialmente de tipo socioeconómico), permitieron la puesta en marcha
de prácticas concretas de democracia que concitan una enorme expectación
a la vez que recelo.17
17 Así lo puso de manifiesto CABANNES, Y., entre otros de sus trabajos, en
“Conceptualización sobre presupuesto participativo a partir de experiencias latinoamericanas”,
en “Memorias del Seminario Internacional “Presupuestos participativos en el contexto
Juan Calvo Vérgez
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A ello se ha de sumar el hecho de que, tradicionalmente, el ámbito de
la Administración Local ha constituido un espacio privilegiado para el
desarrollo de la construcción democrática y de la participación ciudadana.
En efecto, es en dicho ámbito donde los ciudadanos adquieren un mayor
contacto con la representación política o con el personal técnico de la Ad-
ministración, así como donde se materializan normalmente los servicios del
Estado y donde los ciudadanos se organizan en redes de cotidianeidad. En
definitiva, lo local es el lugar donde toman forma normalmente las formas
de ciudadanía. De este modo el ámbito municipal, a través del impulso de
los gobiernos locales, se está convirtiendo en el marco de la renovación
democrática, produciéndose la integración de la ciudadanía en importantes
sectores de población normalmente excluidos de la acción pública.
Pues bien, esta nueva visión política de los gobiernos locales exige, entre
otras cosas, la creación de instrumentos que relegitimen la toma de deci-
siones políticas por parte de los gobernantes mediante una profundización
en la democracia local. Y, a este respecto, ha de quedar claro ya desde un
primer momento que la democracia participativa local configura un esce-
nario muy distinto al de la participación en la democracia representativa
tradicional, siendo aquella configuración la que dispone el marco adecuado
para el desarrollo de procesos de innovación democrática local tales como
el de los Presupuestos Participativos.
Como ya hemos tenido ocasión de señalar, la experiencia de los Pre-
supuestos Participativos se inicia Porto Alegre (Brasil) hacia 1989. No
obstante, ya con anterioridad (entre 1978 y 1988) tuvieron lugar en algunos
municipios de Brasil diversas experiencias precursoras las cuales, si bien no
recibieron la denominación de “Presupuesto Participativo”, sí que contenían
elementos que los aproximaban al mismo. De ellas, las más conocidas fue-
ron las de Lajes y Boa Esperanza, municipios en los que, entre 1978 y 1982
(y bajo el gobierno de diferentes partidos políticos), trató de establecerse
un diálogo entre el ayuntamiento y los ciudadanos, fundamentalmente con
los barrios periféricos carentes de infraestructuras. También, aunque menos
conocidas, fueron las experiencias de Vila Velha, Diadema y Piracicaba.18
boliviano”, Serie: Cuadernos de Trabajo, núm.130, PGU-ALC, Red de Participación Ciudadana
y Control Social, Misereor, Quito, 2003, págs. 81 y ss. y “A Lesson on Participatory Budgeting
from Latin America”, Habitat Debate, vol.9, núm.1, 2003, Nairobi, pág. 6.
18 La experiencia desarrollada en esta última región presentaba, además, una particularidad
especial, concretada en el hecho de que fue escenario de la actuación de diversos partidos

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